All language subtitles for El huevo de la serpiente (1977) (Dual+Subt.ESP-ING)(HD)ESP

La escena toma
lugar en Berl�n,

la noche del s�bado
3 de noviembre de 1923.

Un paquete de cigarrillos
cuesta 4 billones de marcos

y casi todos han perdido
la fe en el futuro y en el presente.

� Se�or Abel?

Su hermano ya est� en casa.
Esto es para ustedes.

Gracias, Frau Hemse.

Gracias.

Tome asiento.

Y, �no habla
nada de alem�n?

Qu� fastidio.

Fr�ulein Dorst
tuvo un domingo p�simo.

-� C�mo se llama?
-Abel Rosenberg.

Tengo 35 a�os.
Nac� en Filadelfia.

Mi familia es de
Riga en Latvia.

Mi hermano Max
y su esposa Manuela,

los tres llegamos
a Berl�n hace un mes...

No, a finales de septiembre.

Max se lastim� la mu�eca
y ya no pudo actuar.

�ramos artistas de circo.
Ten�amos un acto de trapecios.

�La raz�n del suicidio
de su hermano?

�Depresi�n?
� Un romance fracasado?

�Alcoholismo?
�Drogas?

� Un ataque de nervios?

-� Cansado de la vida?
-No lo s�.

Un impulso inexplicable,
�fue eso?

Bueno, suele pasar.

� Se puso en contacto
con su esposa?

Lo intent� anoche y hoy,
pero no la encontr�.

� Ustedes no viv�an juntos?

Max y Manuela se divorciaron
hace dos a�os.

Despu�s de que nos
despidieron del circo,

Manuela se fue
a trabajar a un cabar�.

lr� a verla esta tarde.

Los domingos abren a las tres.

�Podr�a ver sus papeles?

S�.

�Es usted jud�o?

-�Por qu�?
-Por nada.

Simple curiosidad.

Ya puede retirarse.
Gracias.

� Cu�les son sus planes?

� Cu�nto tiempo
estar� en Berl�n?

Como sabe, el desempleo
es muy alto aqu�.

No nos encargaremos de usted
cuando se le termine el dinero.

S�, lo s�.

Adi�s, se�or Rosenberg.

Adi�s, lnspector.

Adi�s, Fr�ulein Dorst.

�Abel!

� Vas a almorzar? Yo tambi�n.
Te invito. Vamos.

� C�mo va todo, querido Abel?
� C�mo est�n Max y Manuela?

� Crees que pronto
mejore su mu�eca?

Los extra�amos, sabes.
El circo los necesita.

Te has de preguntar
qu� hago en Berl�n

si el circo est�
en �msterdam.

Busco nuevos actos.
Vamos, entra.

Ahora puedo conseguir
a la estrella que quiera.

Todos saben
que pago en d�lares.

Siempre tenemos
casa llena.

Si la carpa fuera el doble
de grande, igual estar�a lleno.

Mira lo que le� en el diario
esta ma�ana.

lntentar� traducirlo.
Escucha esto.

��Se aproximan
tiempos terribles.

��Los asi�ticos anticristianos
de todas partes

��est�n levantando las manos
para estrangularnos.

��La masacre de cristianos

��por parte de lsaskar Zederblum,
alias se�or Lenin,

��fue suficiente para
ruborizar a un Genghis Kahn.

��Un grupo de terroristas jud�o,
entrenado para matar y agredir,

��est� merodeando
en todo el pa�s,

��matando gente honesta
y granjeros en horcas port�tiles.

���Esperar� hasta ver
miles de personas

��colgadas de los faroles
en su ciudad?

���Esperar� hasta que
la comisi�n bolchevique

��inicie la masacre en su
ciudad, as� como en Rusia?

��� Quiere tropezarse con los
cuerpos de mujeres y ni�os?

En la actualidad
s�lo se vive terror.

�Necesitas dinero?
Puedo prestarte algo.

Mira.

Aqu� tienes unos billones.
T�malos. No los necesito.

�Por qu� no dices algo, Abel?

No creo en esa basura
de la pol�tica.

Los jud�os son tan est�pidos
como cualquier otra persona.

Si un jud�o tiene problemas,
es por su propia culpa.

Se mete en problemas
porque es est�pido.

Yo no ser� est�pido
y as� no tendr� problemas.

Ahora lo sabes,
pap� Hollinger.

Gracias por la sopa...
y por el dinero.

Debo encontrarme con
Manuela a las cuatro.

Cu�date.

Hola, Abel.

� Qu� pasa?

Cuando volv� a casa anoche,
Max se hab�a volado los sesos.

Sab�a que lo har�a.

Yo... trat� de cuidarlo...

pero nunca pens� que �l...

�l... brome� al respecto
las �ltimas semanas.

� Sabes por qu� lo dec�a?

Se lo pregunt� varias veces.

S�lo dijo que el dinero
era suficiente,

y me pidi� que me
ocupara de mis asuntos.

Es una carta para ti.

Es imposible leer su letra.

No puedo. � Y t�?

No puedo...

Espera.

Algo...

��Existe...

un envenenamiento��.

���Existe un envenenamiento?��

No lo vi mucho
las �ltimas semanas.

Viv�an en el mismo cuarto.

Tuvimos una pelea...

...una pelea a pu�os...

por una ramera.

No lo golpe� fuerte.

Me preocupaba
su mano lastimada.

�Cielos, el final!
No estoy lista. Ay�dame.

-No sab�a que actuabas.
-Yo tampoco.

Una de las chicas enferm�
y dije, ���Por qu� no intentarlo?��

Cuida el dinero de Max.
Aqu� no puedo esconderlo.

Es curioso ver las cosas
desde este punto de vista.

Creo que te conozco.

�Fumamos nuestro
primer cigarrillo juntos?

�No?

Fue en Amalfi, un d�a
de verano, hace 26 a�os.

Nuestros padres ten�an
caba�as y eran vecinos.

T� ten�as una hermana
llamada... espera...

Rebeca, �cierto?

�Podr�as dejarme pasar?
Tengo prisa.

S�, claro... Abel Rosenberg.

Bien... lev�ntate

y qu�tate el saco mojado.

Y te preparar� un buen t�,

rico y caliente.

Eso te har� sentir bien.

Es el hombre que limpia
las cajas de los retretes.

Viene cada lunes como
a las cuatro de la ma�ana.

Cielos.

Sol�amos pasar
el verano en Amalfi.

Y mam� ten�a
problemas de pulm�n.

Max y yo jug�bamos con
un chico, Hans Vergerus.

Sus padres
eran de D�sseldorf.

El padre era
muy influyente,

del Tribunal Superior
o algo as�.

A mam�
no le agradaba Hans.

Creo que a nadie.

Pero todos cre�an
que era un genio.

Una vez...

atrapamos a un gato
y lo atamos.

Hans lo abri� en dos.

A�n estaba vivo.

Me dej� ver
c�mo lat�a su coraz�n.

R�pido, r�pido...

Volv� a encontrarlo hace
diez a�os, en Heidelberg...

cuando est�bamos
con el circo.

S�, lo recuerdo.

Hoy volv� a verlo.

�A Hans?

�Lo viste?

Estaba en el cabar�.

No.

�Manuela?

Ya es de d�a.

La ventaja de conocer
gente influyente

es que puedes tomar
buen caf� en el desayuno.

El fuego prendi� muy bien,

pero tardar� un poco
antes de que caliente.

� Consigues la le�a
de la misma forma?

A decir verdad,
conozco un le�ador.

Pero no conozco a alguien
que me consiga mantequilla,

as� que tendr�s
que comer mermelada.

La etiqueta dice que est�
hecha con qu�micos

Te debo un d�lar.
Debo llevar el control.

Olv�dalo.

Bueno, t�...

Guarda este dinero antes
de que lo gaste en bebida.

-�Bebes tanto?
-Siempre que tengo dinero.

�No volver�s al circo?

No es lo mismo sin Max.

Conseguiremos
un compa�ero, claro.

-Sabes que es imposible.
-No creo en eso.

Haremos un n�mero nuevo
juntos, s�lo t� y yo.

Abel, podr�amos
hacer un acto de magia.

Conozco un
mago maravilloso.

Markus.
Se retir� apenas.

Podr�amos
hacer su show.

No lo s�.

Desde lo que pas�
con Max, yo...

Desde que conoc� a Max,
has sido como un hermano.

Siempre estaremos juntos.

Despierto de una pesadilla

y descubro que la vida
es peor que el sue�o.

Abel, todo est� bien.

Tenemos todo
lo que necesitamos.

No lo puedo entender.

Anoche golpearon a un hombre.
La polic�a no hizo nada.

Abel, esc�chame.
Est�s muy cansado.

Has estado bebiendo
mucho �ltimamente.

Ahora yo voy a cuidarte.

En unos d�as todo
estar� mejor. Ya ver�s.

Hablaremos de todo,

pero ahora debo irme.
Tengo que ir al trabajo.

�Trabajo?

S�, tengo dos empleos.

-�A esta hora de la ma�ana?
-S�, a esta hora de la ma�ana.

-No puedo llegar tarde.
-� Qu� clase de trabajo?

Bueno, no lo s�,
pero es secreto.

-� Secreto?
-No, era broma.

-Es una oficina. Pongo sellos.
-� Qu� tipo de oficina?

De importaci�n y exportaci�n.
No estoy muy segura.

� C�mo se llama la compa��a?

� C�mo rayos se llama
la compa��a?

Ferkel.
Ferkel und Sohn.

�D�nde est� la oficina?

En Bayerstrasse.

No me interrogues.
Pareces un marido celoso.

Llegar� cerca de las dos
y cenaremos juntos.

Trata de conseguir carne
ahora que tenemos dinero.

-Veintid�s d�lares.
-Estamos ricos.

-�Herr Rosenberg?
-� S�?

�Podr�a venir aqu�
un momento?

Me llamo Frau Holle.
Soy la casera de Manuela.

Manuela apenas tuvo tiempo
de decirme sobre usted al salir.

Puede quedarse aqu�
conmigo por un rato.

Los cambios de clima hacen
que me duela la espalda,

as� que debo quedarme
en cama todo el d�a.

Aunque es lindo ver
el sol en noviembre,

�no lo cree,
Herr Rosenberg?

�Le apetece
una copa de jerez?

Estoy muy encari�ada
con Manuela.

Disculpe que lo diga,

la aprecio tanto como
si fuera mi propia hija.

Salud, Herr Rosenberg.

Es tan gentil e ingenua.

Todo lo terrible que est�
sucediendo no le preocupa.

Creo que su cu�ada se meter�
en problemas, Herr Rosenberg.

Lo extra�o de Manuela
es que no se defiende.

Nada debe pasarle.

Acept� ese nuevo trabajo.

Hay algo extra�o en ello.

La Sociedad de la lglesia
Dem�crata-- �qu� es eso?

Ni siquiera aparece
en el directorio.

Ya debo irme, Frau Holle.

� Cu�nto es por la renta?
�Le pago por adelantado?

No importa.

Pero si tiene el dinero,
estar�a bien.

Tiene d�lares, �cierto?

Digamos, tres d�lares al mes.
�Es mucho?

No, claro que no.

�Ha estado llorando?

No, �por qu�?

Eso parece.
Disculpe, Herr Rosenberg.

Adi�s, Frau Holle.

Adi�s, Herr Rosenberg.

Lo est�bamos esperando.

�Podr�a decirme d�nde
estuvo toda la noche?

No pude dormir bien
en ese cuarto.

-�D�nde ha estado?
-Con mi cu�ada.

Vive en Bergmannstrasse 35,
�cierto?

-S�, eso creo.
-�Eso cree?

-Creo que es n�mero 35.
-Bien, ahora ya lo sabe.

-�Puedo empacar unas cosas?
-A�n no, Rosenberg.

Debe acompa�arnos a la
morgue a identificar a alguien.

-�Debo hacerlo?
-Temo que le insistir�.

Bien, ser� mejor
que nos vayamos.

Le aconsejo que fume.
Le ayudar�.

-�Reconoce a esta chica?
-S�.

-� Qui�n es?
-Greta Hofer.

-�Por qu� la conoce?
-Era la prometida de mi hermano.

-� Cu�ndo la vio por �ltima vez?
-Hace una semana.

-�Estaba bien con su hermano?
-S�, eso creo.

Fr�ulein Hofer fue agredida.

La causa de muerte...
la ahogaron.

�Reconoce a este hombre?

No.

-�Est� seguro?
-No.

P�enselo bien.
Es importante.

-Se parece a alguien.
-�A qui�n?

Se parece a mi padre.

-D�game algo mejor que eso.
-Es verdad.

Se parece a mi padre.
�l muri� hace cinco a�os.

Alguien le clav� una jeringa
hipod�rmica en el coraz�n.

Le inyectaron un l�quido
en el ventr�culo izquierdo,

un veneno que le caus�
mucho dolor antes de morir,

y que tal vez tard�
varias horas.

D�game, �ha visto
a este hombre antes?

�Ha visto a esta mujer antes?

S�.

� Qui�n es?

No lo s�.

-Pero la he visto antes.
-�D�nde?

Creo que entregaba diarios.

Sol�a verla en la pensi�n
de Frau Hemse.

Una vez me ayud�
a subir las escaleras.

Estaba muy tomado
para subirlas yo solo.

-Su nombre es Mar�a Stern.
-No sab�a su nombre.

Se ahorc�
en el cuarto del s�tano

donde viv�a con su marido
y sus dos hijos.

Pero dej� una carta
muy extra�a.

Totalmente confusa.

Dec�a que le tem�a
a la muerte

y que el dolor
era insoportable.

No creo que pueda
soportar esto.

Ac�rquese.

�Venga!

�Ha visto a este chico?

No.

Trabajaba en el cabar�.
�Jam�s lo vio ah�?

No.

Trabajaba en la entrada,
manejaba el reflector.

Debi� haberlo visto.

S�, es posible.

No estamos seguros
de c�mo lo asesinaron.

Parece que lo arroll�
un veh�culo,

pero algo nos dice que primero
fue agredido o torturado.

�Por qu� quiere
que vea todo esto?

En el �ltimo mes ha habido
siete misteriosos asesinatos...

en su vecindario,
Herr Rosenberg.

� Sospecha de m�?

Creo que necesitamos
una taza de caf�.

No se le puede llamar
caf� a esto, pero es algo.

No habla mucho,
� verdad, Rosenberg?

�Podr�a decirme lo que hizo

la noche del domingo
28 de octubre?

-�No puede?
-Estaba tomado.

As� como el 19 de octubre,
tambi�n estaba tomado.

He estado ebrio cada noche
desde que dej� el circo.

Algo aqu� no concuerda.

�No?

Si era tan famoso--

con un buen ingreso
y buena reputaci�n--

�por qu� empez� a beber?

Soy alcoh�lico.

Un trapecista famoso...
�alcoh�lico?

Tal vez no me sent�a bien
en su hermosa ciudad.

�Por qu� debo
permanecer aqu�?

Podr�a ayudarme con esos siete
asesinatos sin resolver.

Ma�ana todo desaparecer�.

�Por qu� molestarse
con un par de asesinatos?

Escuche, me preocupo
por mi propio bien.

S� que la cat�strofe
podr�a llegar en unas horas.

El tipo de cambio por un d�lar
es de cinco billones de marcos.

Los franceses
han ocupado Ruhr.

Ya pagamos un bill�n
en oro a los brit�nicos.

En todos los trabajos
hay agitadores bolcheviques.

En Munich, Herr Hitler est�
preparando un golpe de estado

con soldados hambrientos
y locos uniformados.

Tenemos un gobierno
que no sabe a qu� lado irle.

Todos tienen miedo.
Y yo tambi�n.

El miedo no me deja dormir.

Nada funciona bien,
a excepci�n del miedo.

El viernes quer�a ir
a Stettin a ver a mi madre.

Cumpl�a ochenta,
pero ya no hab�a horarios.

Hab�a un tren que part�a
para all�, pero sin horario.

�lmag�nese!
�Alemania sin horarios!

� Y qu� hace
el lnspector Bauer?

El lnspector Bauer
hace su trabajo.

Trata de crear un poco
de orden y de sensatez

en medio del caos.

Pero no est� solo.
En toda Alemania,

millones y millones
de suboficiales,

igualmente aterrados,
est�n haciendo lo mismo.

Usted se emborracha
todas las noches, �eh?

Eso tambi�n
es respetable, Rosenberg.

Pero me har�a m�s feliz si se
subiera al trapecio con sus amigos.

De esa forma enfrentar�a
su miedo m�s efectivamente.

Ahora ya sabe
porqu� estoy aqu�,

investigando algo
que me parece muy extra�o,

por no decir horrendo.

Debo pedirle que guarde
silencio unos minutos

mientras escribo unas l�neas
al lnspector Lohmann,

que trabaja en otro caso que
tambi�n es descabellado.

Si�ntese, Herr Rosenberg.

�Por qu� sospecha de m�?

-Tengo derecho a un abogado.
-Es una charla, no interrogaci�n.

Est� desquit�ndose conmigo.

Necesito un cigarrillo.

S� porqu� hace esto.

Porque soy jud�o.

Estoy aqu�
porque hablo ingl�s.

Pueden fumar.
Tienen diez minutos.

Habl� con el lnspector Bauer.

Fue muy gentil
y comprensivo.

�l quiere ayudarte.

Dice que te volviste loco.

� Qu� pasa, Manuela?

Estoy preocupada.

Me robaron mis ahorros.

Supongo que no sabes
d�nde est�n.

No sab�a que ten�as ahorros.

Ya no los tengo.

Por suerte estoy a cargo
del dinero de Max.

Justamente.
El lnspector Bauer me dijo

que encontraron el dinero
de Max cuando te registraron.

Me pregunt� si sab�a d�nde
guardaba Max el dinero.

Le dije que eran
nuestros ahorros,

de cuando estuvimos
en Suiza con el circo

y varios de los artistas
cambiaron su dinero a d�lares

antes de ir a la gira
en Alemania.

� Qui�n crees
que te rob� el dinero?

� Qu� dijiste?

� S�?

No est�s escuchando.

Est�s enferma.

-� Qu� pasa?
-Est� enferma.

Estoy bien.

Hoy no he comido.

Les aviso que s�lo
les quedan unos minutos.

� S�, Herr Rosenberg?

Voy a dejarlo ir,
Herr Rosenberg.

A pesar de que nos atac�
a m� y a mis colegas.

Dios m�o, c�mo nos golpe�.

Claro, es usted cirquero.

� Qu� est� viendo?

No estoy viendo,
estoy dudando.

Dudo si deber�a
decirle qu� estoy dudando.

Pero creo que no.

Fr�ulein Dorst le dir�
d�nde recoger sus pertenencias.

Nos quedaremos con el dinero
de su hermano por un tiempo.

Claro, le daremos un recibo.

-� Qu� haces aqu�?
-Vine a ver a Manuela.

Apenas me enter�
de la muerte de tu hermano.

Puedes irte al infierno.

�� Qu�--

�Tienes cigarrillos?

Hay unos en el estante.

� Qui�n es?

-Ven un momento, Manuela.
-Estoy muy cansada.

�Podr�amos hablar ma�ana,
cuando llegue a casa?

Me gustar�a hablar
contigo ahora.

No puedo dormir por el dolor.

Adem�s,
estoy preocupada.

�Tiene que ver conmigo?

Eso no lo habr�as
preguntado antes.

Estoy muy cansada.
Creo que tengo un resfr�o.

Quiero ir a dormir.

Es sobre Herr Rosenberg.

No quiero que se
quede en mi casa.

�Por qu�?

�Es informal y arrogante!

Adem�s, las autoridades
no me tienen permitido

que tenga parejas sin casarse
en un mismo cuarto.

�He cambiado de parecer!

�Herr Rosenberg,
debe irse ma�ana!

Pero ya pag� su renta.

Ah� est� el dinero.
Lo cambi� a marcos.

Es il�cito tener d�lares.
T� deber�as saberlo.

Si Herr Rosenberg se va,
yo tambi�n me ir�.

Puedes hacer
lo que te plazca.

�Es una malvada!
�Es usted una bruja!

Nos las arreglaremos.
Ya ver�s.

Siempre y cuando
estemos juntos.

�Te has acostado
con Hans Vergerus?

S�, as� es.

-�Lo haces seguido?
-No seas tonto, Abel.

Quiero saber.

Tres, tal vez cuatro veces.
No lo s�.

-� Y te paga?
-No.

S�... una vez.

-�Por qu� s�lo una vez?
-No lo s�.

-�Por qu� no sabes?
-Sent� l�stima por �l.

�Est�s enamorada de �l?

-No lo s�.
-�No lo sabes?

Siento l�stima por �l...
tal vez por m�.

Tal vez necesite
algo de ternura.

�D�nde fuiste hoy?

Fui a la oficina.

Luego vine a casa
a cenar contigo.

�Es de importaci�n y exportaci�n
o tiene que ver con la iglesia

o ninguna de esas?
� Qu� es?

En las ma�anas
trabajo en un burdel.

No est� prohibido,
seg�n tengo entendido.

Es un burdel
muy respetable.

Es para diplom�ticos,
gerentes y actores famosos.

Es de mucha clase.

S� bueno conmigo, Abel.

Por favor, s� bueno
conmigo, Abel

Por favor,
s� bueno conmigo.

Martes 6 de noviembre.

Los diarios est�n llenos
de temor, amenazas y rumores.

El gobierno est� indefenso.

Una sangrienta confrontaci�n
entre los grupos extremistas

parece inevitable.

Pero a pesar de eso,
la gente va a trabajar,

la lluvia no cesa nunca,

y el temor crece como
el vapor en los adoquines.

Puede sentirse
como un olor acre.

Se soporta como
un envenenamiento interno,

como un lento
envenenamiento,

que s�lo se siente
r�pida o lentamente,

o como un espasmo
de nausea.

Abel, ya voy tarde.
Me qued� dormida.

Llegar� a casa
a las dos para cenar.

No s� porqu� le molesto.

Me llamo Manuela.

Mi padre era mago.
Mi madre era jinete de circo.

He estado en circos
toda la vida.

Mi esposo
tambi�n era cirquero.

Tal vez haga
mal en molestarle,

pero necesito hablar
con alguien que me entienda.

Esta semana he estado
yendo a las misas matutinas.

Estoy confundida.

Y alguien me dijo
que usted es americano.

Eso es confortante.
Mi alem�n no es muy bueno.

Mi querida se�ora,
�quiere ir al grano?

Tengo que atender
a otro servicio.

Ya veo.

Tal vez quiera
venir otro d�a.

Toda esta culpa
es demasiado para m�.

Siento que por mi culpa
Max se suicid�.

Se es responsable
por alguien y luego se falla

y uno se queda ah�,
con las manos vac�as, apenada,

pregunt�ndose
qu� m�s pudo hacerse.

Ahora creo que debo
cuidar a su hermano, Abel,

-y eso es todav�a peor.
-�Peor?

�l es como Max.
Jam�s dice lo que piensa.

S�lo se deja llevar
por sus sentimientos

y se ve tan asustado.

Y trato de decirle que nos
ayudaremos mutuamente,

pero s�lo son
palabras para �l.

Y todo lo que digo es in�til.

Lo �nico real es el temor.

Y estoy enferma.
No s� lo que me pasa.

�Existe alg�n perd�n?

� Quiere que rece por usted?

-� Cree que eso ayude?
-No lo s�.

-�Ahora?
-S�, ahora.

-�Es una oraci�n especial?
-S�, s�. D�jeme pensar.

Todos... vivimos...
tan alejados de Dios.

...que tal vez no nos escucha
cuando le pedimos ayuda,

as� que...

debemos ayudarnos
mutuamente,

darnos el perd�n que
un Dios apartado nos niega.

Yo... le digo...

...que es perdonada
por la muerte de su marido.

Usted ya no es la culpable.

Y le ruego
que me perdone...

...por mi apat�a...

...y mi indiferencia.

�Me perdona?

S�, lo perdono.

Es todo lo que
podemos hacer.

Debo irme.

El p�rroco se molesta
si llego tarde.

Se�ora,
debo cerrar, por favor.

� Qu� rayos
significa esto?

Es el lugar
donde viviremos.

Es lindo,
�no crees?

Anoche,
cuando fuiste al cabar�,

le dec�a a Hans sobre
todos nuestros problemas.

�l sugiri� que pod�amos
mudarnos a este piso

que pertenece
a la Cl�nica St. Anna.

Acaba de desocuparse.

Di que est� lindo,
por favor.

No necesitamos
pagar renta por ahora.

Tambi�n dijo que puedes
trabajar en la cl�nica.

Podemos quedarnos aqu�
y decidir qu� queremos hacer.

Estar� maldito si vivo aqu�

o si acepto caridades
de ese perverso de Hans.

Tal vez es mejor si arreglamos
nuestras cosas solos.

Tal vez no te vea
por un tiempo.

Es mejor que no
mezclemos las cosas.

No tiene sentido
seguir en Berl�n.

Mire a su alrededor,
se�or Rosenberg.

Diecis�is personas
y qu� show.

�Puedo invitarle un trago?
� Un co�ac?

Un co�ac para el se�or.

� Qu� opina,
se�or Rosenberg?

Un cabar� y un burdel...
En Beirut, por ejemplo.

Un clima muy diferente.
Un ambiente muy diferente.

Hoy cerraremos temprano
y hemos acortado el show.

Es in�til estar abiertos.

Jam�s vi una lluvia
como esta.

Tal vez es la tormenta.

Salud,
se�or Rosenberg.

� Qu� le parece
mi acento ingl�s?

Maravilloso.

Viv� un tiempo con una
mujer fakir de Nueva Jersey.

Ella me ense��
el ingl�s que ahora s�.

Ya me esperaba esto.

�No puedes dormir?

Tengo que estar
tomado para dormir.

Tengo un poco de ginebra
en la valija en la cocina.

Sabes, es bueno
tener fiebre.

Uno puede so�ar despierto.

Te duermes
y luego despiertas,

y todo se confunde.

De repente tienes
6 a�os y luego 15.

Todo est� tan claro.

Ese maldito motor.
Ya empez� de nuevo.

-� Qu� motor?
-�No lo oyes?

Escucho algo que retumba.

�S�! Es un motor.

La bata que traes
era de pap�.

Qu� conmovedor.

Me recuerdo
sentada en el sol,

viendo a pap� practicando
su nuevo n�mero.

No le funcion� muy bien.

Mam� sali�
del cami�n y dijo,

��No est�s haci�ndolo bien��.

Y le mostr� c�mo hacerlo.

�l se qued� ah�,
avergonzado

con una sonrisa
t�mida en su rostro.

� Y qu� es lo peor ahora?

La gente no tiene futuro.

La gente perdi� su futuro.

Al fin estoy...
emborrach�ndome.

�Me permite presentarme?
Soy el Doctor Soltermann,

y �l es mi colega,
el Doctor Silbermann.

Nosotros estamos,
como debe imaginarse,

a cargo de los archivos
de la Cl�nica St. Anna,

los archivos cl�nicos
m�s amplios en Europa

y uno de los m�s grandes
en todo el mundo.

Tenemos un espacio
de miles de metros cuadrados

y nuestros �ndices incluyen
m�s de 100.000 entradas.

La Cl�nica St. Anna ha
existido desde hace 357 a�os...

bajo varios nombres, claro.

�Le muestro su lugar,
Herr Rosenberg?

S�, gracias.

Estamos muy agradecidos
de tener un asistente.

Nos quejamos con nuestro jefe,
el Profesor Vergerus,

durante a�os y era in�til.

Entonces si�ntase
muy bienvenido.

Es muy bienvenido,
Herr Rosenberg.

� Verdad que el Dr. Soltermann
habla muy buen ingl�s?

-Muy bien.
-El Doctor es muy gentil.

Estuve siete a�os en
lnglaterra antes de la guerra.

Mi tesis m�dica trataba
sobre las perversiones er�ticas

de Ben Johnson, un tema
interesante, pero limitado.

Por aqu�, por favor.

�Podr�a decirme,
Herr Rosenberg,

si tiene experiencia previa
en el trabajo de archivos?

No, desafortunadamente yo--

Lo tem�a, pero no importa.

Hoy le asignar� una tarea

que requiere poca
experiencia para archivar.

Se lo agradezco mucho.

� C�mo salgo de aqu�?

Para la cena, el Doctor
o yo vendremos por usted.

Conf�e en nosotros.
No nos olvidaremos de usted.

A prop�sito, hay algo
que olvidaba decirle,

todo nuestro material
es estrictamente confidencial.

No debe salir de aqu�
y tampoco puede leerlo

o descifrar los documentos
que pasen por sus manos.

Los archivos contienen reportes
del sufrimiento humano,

de las batallas de la ciencia,
sus victorias y sus fracasos.

�ste ser� su lugar,
Herr Rosenberg.

Empezamos a trabajar
a las 8 y terminamos a las 6.

Cenamos a la 1 :30.

Nos turnamos para ir
a la cocina de la cl�nica.

Tambi�n podemos llevar la cena
a casa en un envase especial.

En la actualidad,
es un gratificaci�n invaluable.

Que tenga buen d�a,
Herr Rosenberg.

Disculpe mi pregunta,
�qu� se supone que haga?

� Ve estas carpetas grises?

Hay unas carpetas
amarillas m�s econ�micas.

Su primera tarea es sacar el
contenido de las carpetas grises

y pasarlo a las
carpetas amarillas.

Despu�s las numerar�
e identificar�

de la misma forma
que est�n las grises.

Buena suerte,
Herr Rosenberg.

-� C�mo te va?
-Es un trabajo duro.

-No est�s bien.
-No.

� Ya comiste algo?

Cenamos en la cafeter�a
de personal de la cl�nica.

�A qu� hora terminas?

Creo que salgo a las siete.

Puedo traerme la cena.
Es parte del salario.

� C�mo te va en los archivos?

Bien.

No puedo estar
aqu� mucho tiempo.

Soy muy estrictos.

De pronto te ves
tan delgada y p�lida.

Estoy bien, Abel.
Podr�a ser peor.

Debo irme.

-�Dir�as que est�s enferma?
-No me atrevo.

-Casi te arrollan.
-Gracias.

-�Te gusta estar con nosotros?
-Apenas empec�.

-� Y a Manuela?
-Preg�ntaselo t�.

Reun�monos los tres
una de estas noches.

Tengo prisa.

El Dr. Soltermann se fue
a casa despu�s de la cena.

Est� un poco enfermo.

Normalmente yo estoy
solo en los archivos.

Ahora que el Doctor no est�,
puedo dec�rselo.

Algo terrible
est� pasando aqu�.

� Qu�?

Aqu�, en la cl�nica.

� Sabe qu� es esto,
Herr Rosenberg?

No entiendo alem�n.

Son reportes, muy detallados,
marcados como ��secretos��.

� Y?

Se relacionan con ciertos
experimentos realizados aqu�

bajo la supervisi�n
del Profesor Vergerus.

No entiendo.

�No se imagina
qu� tipo de experimentos?

� C�mo podr�a imaginarme?

Experimentos muy extra�os.

�Extra�os?

Experimentos con humanos,
Herr Rosenberg.

Ese motor me
est� volviendo loco.

No lo not�.

Pero lo escuchas, � verdad?

Cuando me lo mencionas.

-Es una trampa.
-� Qu� pasa?

No seas idiota,
estamos encerrados.

No te pongas hist�rico, Abel.

�La cabeza me explota!

-� Segura que el gas no se fuga?
-Segura.

-�Por qu� est�s tan segura?
-Porque ya lo revis�.

Entonces cre�ste
que se fugaba, �cierto?

Deja de hablar disparates
como un lun�tico.

�Si quieres marcharte, hazlo!

�Entonces quieres
que me vaya?

S�lo dije que si quieres,
puedes irte.

Ya hice todo lo posible
para que estemos juntos.

Ya no soporto m�s.

�Escuchaste lo que dije?
�Ya no soporto mas!

�No me importan
tus temores!

�No me importas t�!

Quieres que me vaya.

No.

Me rindo.
Me rindo.

No puedo.

-S�lo abr�zame.
-No, no puedo.

Qu�date ah�.

No puedo quedarme as�.

S�lo un rato m�s, Abel.

L�rgate.

Ven a casa conmigo.

Est� caliente.

Puedes hac�rmelo
como t� quieras.

Tienes d�lares, � verdad?

�Vete al infierno!

�D�nde crees
que estamos?

Vamos, ven.

�Quieres matarme!
�Quieres agotarme!

�Quieres chuparme!

�Stella dice
que no s� joder!

Esa perra jode a todo
el maldito mundo.

Tiene colmillos en el co�o.
�Colmillos! �En el co�o!

�Yo los vi! �S�!
�Yo los vi!

Mike, dile que t� y yo

hemos jodido siete veces
en siete formas distintas.

Mikaela,
t� conoces a Monroe,

y sabes bien que s�lo
puede joder maricas.

Y si dices que a ti
te jodi�, est�s mintiendo.

�Recuerdas esa vez?
� Stella, recuerdas la vez

que fuimos al hospital porque
cre�ste que ten�as s�filis?

-�No ten�a s�filis!
-Pero cre�ste que s�.

� Qui�n fue
el gentil hombre

que se acost� junto
a ti todas las noches,

haci�ndote sentir bien,
con el riesgo de infectarse?

� Quieres un poco?
Es bueno.

-�No ten�a s�filis!
-Pero cre�ste que s�.

�Te ve�as fatal!

Eres fatal.

Eras tan hermosa.
Ella era tan hermosa,

pero ahora eres la peor
bruja en todo Steinstrasse.

Contigo puedo joder en cualquier
momento... �S�lo que...

esa bruja bocona, esa,
me pone nervioso!

Puedo joderte...

Puedo joderte todas
las veces que quiera.

� Ves? �No soy marica!

�Es una maldita mentira que
Stella le dice a todo el mundo

porque no me tiene
entre sus piernas!

�Uno podr�a morir ah�!

�Puedo joderte cuando quiera!

-�Aqu�?
-� C�mo que aqu�?

Dices que puedes
joderla cuando quieras.

-�Puedes hacerlo ahora?
-�Eres de esos!

�Claro!
�Claro que puedo!

Si crees que vas
a vernos de gratis, est�s loco.

Vamos, Monroe,
mu�strale de qu� est�s hecho.

-Har� una apuesta.
-� Cu�nto?

Te har�s rico, Monroe.

Vamos, Monroe,
antes de que baje.

Tendr�s el dinero de este tipo que
no quiere decirnos su nombre.

Espera, espera, espera.

C�llate.
No te r�as.

Yo le ayudo.

Tiene que hacerlo solo.

Dilo, dilo.
Dilo, dilo, dilo.

�No puedes!

�Dilo!
Di, ���Hazlo, papi!��

Di, ���Hazlo, papi!��

Dilo.

Monroe, no llores.
No llores, Monroe.

�Ganamos!
�Ganamos!

�Deja de re�rte!
�Deja de re�rte!

La ma�ana del mi�rcoles
7 de noviembre

no se consegu�a
leche en Berl�n.

Las tiendas estaban cerradas.
No ten�an nada para vender.

El marco pr�cticamente
hab�a dejado de existir.

Los fajos de billetes
se contaban por peso,

y ya no se fijaban
en el valor impreso.

Cuando comenz� a trabajar,

le dije que sus horas
de trabajo eran de 8 a 6.

�Podr�a mostrarme
mi lugar de trabajo?

No s� c�mo llegar.

Claro.

�Hay otras personas
en los archivos?

Por supuesto.

A diario nos visitan
cient�ficos de otras instituciones.

Deme las llaves.

Deme las llaves.

Se comporta indecente
con un viejo.

Esto es absurdo
y humillante.

Usted sabe
que no le dir� nada,

no importa cu�n rudo sea.

A diferencia de usted,
yo tengo una convicci�n.

Algo inaudito
est� ocurriendo en Munich.

Ha nacido el salvador.

Su nacimiento est�
dejando sangre y dolor.

Se aproximan
tiempos terribles.

� Qu� son 30 o 40 a�os
de sufrimiento y muerte?

� Qu� importamos
usted y yo?

lncluso, �qu� importan
esos millones de vidas?

Hay demasiados humanos,
Herr Rosenberg.

M�teme, Herr Rosenberg.
No me resistir�.

Mi cuerpo es d�bil,
pero mi alma es fuerte.

Cerrar� la puerta para
que no nos molesten.

El Dr. Soltermann
me advirti� sobre ti,

pero no le cre�.

No dices nada.

Ve la pantalla y ver�s
unas fotos interesantes.

Fueron tomadas durante
nuestros experimentos

aqu�, en la Cl�nica St. Anna.

Este es un experimento
de resistencia.

Esta mujer de 30 a�os,

se ofreci� a cuidar
un beb� de cuatro meses

con una lesi�n cerebral,
que lloraba d�a y noche.

Quer�amos ver
lo que le pasar�a

a esta mujer normal,
de inteligencia promedio,

si la encerr�bamos con
un beb� que no dejaba de llorar.

Como ves, despu�s de 12 horas
a�n est� bajo control.

Sin embargo,
pasan 24 horas...

ahora podemos ver
que est� afectada.

Su compasi�n por el
beb� enfermo desapareci�,

y se transforma en
una profunda depresi�n,

que por lo tanto, paraliza
cualquier iniciativa.

Ella abandona
al beb� a su suerte.

Aqu� podemos
ver claramente

que su impulso por atacar
al beb� se ha desarrollado.

Pasaron seis horas antes
de llevar a cabo su intenci�n.

Una resistencia
extraordinaria.

Por desgracia, nuestra
c�mara no logr�

documentar el hecho final.

Nuestra t�cnica a�n
no se ha perfeccionado.

Quieres ver m�s, � verdad?

Por siete d�as, �l fue puesto
en una celda tan peque�a

que no pod�a mover
los brazos, piernas o cabeza.

Adem�s, fue privado
de cualquier sonido

y estuvo
en completa oscuridad.

S� lo que vas a decir, Abel.

Te preguntar�s c�mo
logramos convencerlos

de que se prestaran
a tales experimentos.

No hubo problema,
te lo aseguro.

Hacen cualquier cosa por
un poco de dinero y una comida.

Estas pel�culas
no son muy instructivas,

pero pueden tener
un inter�s fison�mico.

El sujeto recibi�
una inyecci�n de Thanatoxin,

una droga que produce
una violenta angustia.

Ahora ver�s a alguien expuesto
a una agon�a insoportable.

Aqu� lo vemos justo
cuando le dan la inyecci�n.

Puedes ver que est�
bastante equilibrado,

y se r�e y bromea.

Un muy buen chico,
por cierto.

Era estudiante de ciencias
pol�ticas en la universidad.

Ahora vemos
su condici�n de pavor,

que empeora
a cada momento.

En un momento
�l se suicidar�.

Presta atenci�n.
Pasa repentinamente.

�l toma el revolver.
No se puede ver bien.

Ahora puedes verlo.

Lo pone en su boca.

El arma no est� cargada, claro.

El estudiante se peg�
un tiro unos d�as despu�s,

a pesar de que el efecto del
Thanatoxin hab�a desaparecido.

Tu hermano Max...

se enfrent� con la
misma desgracia.

A prop�sito, era uno
de nuestros mejores asistentes.

Estaba muy interesado
en nuestros experimentos.

�l quiso probar
el Thanatoxin.

Le advert� que no lo hiciera,
pero �l insisti�.

Su prometida tambi�n
nos ayud� bastante.

Estaban muy enamorados.
Vivieron un tiempo

en uno de los departamentos
que ustedes-- t�...

Este es uno de los experimentos
m�s recientes e interesantes.

Los sujetos reciben

una dosis controlada
de Kapta Blue,

un gas pr�cticamente inodoro.

El gas primero juega
con el comportamiento,

logrando un total
desequilibrio emocional.

Los sujetos son despojados
de sus defensas sociales,

pierden las inhibiciones,
vacilan como locos

entre los r�pidos cambios
de humor que los poseen.

Sus reacciones
son tan absurdas,

que en ratos no pueden
dejar de re�rse.

Claro, el constante
contacto al Kapta Blue

puede causar
da�os permanentes.

Tal vez te preguntes
cu�les eran mis intenciones

contigo y Manuela,

al ponerlos en uno de los
cuartos de experimentos.

�Me creer�as si te digo que
no ten�a ninguna intenci�n?

S�lo ayudarles.

Como ves, el edificio detr�s
del cuarto fue desocupado.

Tiempo atr�s fuimos forzados
a transferir las actividades

a un lugar, digamos,
menos visible.

Debemos tener
mucho cuidado.

Adem�s, los recursos
econ�micos son limitados.

Nos patrocina
una entidad privada.

No soy un monstruo, Abel.

Lo que has visto
son los primeros pasos

de un desarrollo
necesario y l�gico.

S� que le dijiste de tus
experiencias al lnspector Bauer.

Y s� que la justicia, bajo el
mando del torpe inspector,

ya empez� a moverse,
lenta y penosamente.

Pronto estar� aqu� con sus
hombres y sus oxidadas armas.

Pero en un momento,

me tomar� esta
c�psula de cianuro.

Pens� en quemar
los archivos

y destruir los resultados
de nuestro trabajo,

pero me pareci�
muy melodram�tico.

La ley los confiscar�
y luego los archivar�.

En unos a�os la ciencia
pedir� los documentos

y continuaremos con los
experimentos a gran escala.

Estamos adelantados, Abel.

Estamos aqu�
para ser sacrificados.

Es l�gico.

En uno o dos d�as,
tal vez ma�ana,

el ej�rcito de Alemania del Sur
intentar� una revuelta,

dirigido por un demente
llamado Adolfo Hitler.

Ser� un fiasco descomunal.

Herr Hitler carece de capacidad
intelectual y de t�cnica.

�l no sabe las
fuerzas tremendas

con las que se enfrentar�.

Ser� arrasado como
una hoja marchita

el d�a que se desate
la tormenta.

Observa esa imagen.

Observa a toda esa gente.

Son incapaces
de una revoluci�n.

Est�n muy humillados,

muy temerosos,
muy oprimidos.

Pero en diez a�os...

Para entonces...

los de 10 a�os tendr�n 20,

los de 15 a�os tendr�n 25.

Al odio heredado
por sus padres,

ellos a�adir�n su propio
idealismo e impaciencia.

Alguno se adelantar� y pondr�
sus sentimientos en palabras.

Alguno prometer� un futuro.

Alguno har� sus demandas.

Alguno hablar�
de grandeza y sacrificio.

Los j�venes e inexpertos
brindar�n su valor y su fe

a los cansados e indecisos.

Y entonces habr�
una revoluci�n,

y nuestro mundo se hundir�
en sangre y fuego.

En diez a�os, no m�s,

ellos crear�n una sociedad
sin igual en la historia mundial.

La antigua sociedad se basaba
en ideas muy rom�nticas

sobre la bondad del hombre.

Muy complicado, ya que las ideas
no concuerdan con la realidad.

La nueva sociedad
se basar� en un juicio real

de los potenciales
y limitaciones del hombre.

El hombre es una deformidad,
una perversi�n de la naturaleza.

Entonces nuestros
experimentos toman lugar.

Lidiamos con la forma b�sica
y luego la moldeamos.

Liberamos las fuerzas productivas
y controlamos las destructivas

Exterminamos lo inferior
y aumentamos lo �til.

Siempre me agradaron
t� y Manuela.

Ella me mostr� un afecto,
que espero haya sido sincero.

Contra mi propio juicio,
yo trat� de ayudarles.

C�mico,
� verdad, Abel?

Alg�n d�a podr�s decir esto a
quienquiera que desee o�rlo.

Nadie va a creerte

a pesar de que cualquiera
que haga un m�nimo esfuerzo

puede ver lo que
depara el futuro.

Es como un huevo
de serpiente.

A trav�s
de la delgada membrana,

se puede distinguir
un reptil ya formado.

Le dieron Veronal.
Durmi� durante dos d�as.

� Qu� d�a es hoy?

Es la ma�ana
del 1 1 de noviembre.

-�Podr�a darme agua?
-S�.

He estado en contacto
con Hollinger.

�l dice que puede
tenerlo en el circo.

El gobierno alem�n pagar�
su boleto en tren a Basel.

Ah� estar� el circo
las pr�ximas dos semanas.

Estoy seguro de que aceptar�
su gentil oferta, �no?

Creo que s�.

Ser�a lo m�s sencillo,
Herr Rosenberg.

Un agente ir�
a la estaci�n con usted.

El tren de la noche
debe salir a las 1 1 :20.

Gracias.

Adi�s,
Herr Rosenberg.

A prop�sito,

Herr Hitler fall� con su golpe
de estado en Munich.

Fue un fiasco descomunal.

Herr Hitler y su bando
subestimaron la fuerza

de la democracia alemana.

Adi�s,
Herr Rosenberg.

La noche del domingo
1 1 de noviembre

Abel Rosenberg escap�
de la escolta policial

que lo llevaba
a la estaci�n de trenes.

Jam�s se le volvi� a ver.