All language subtitles for Más allá del Missouri (1951)(Dual+Subt.)

�ste es mi pa�s,
aqu� fue donde nac�.

Mis primeros 9 a�os de vida
los pas� en esta aldea india

con el pueblo de mi madre, pero
mi padre era el m�s importante.

Este hombre es mi padre.
As� es como lo imagino mejor.

Pap� no s�lo fue Flint Mitchell,
simbolizaba una raza de hombres,

monta�eses que vivieron
y murieron en Am�rica.

�l me hablaba de esos hombres

que recorrieron los senderos indios
abriendo rutas desconocidas,

que descubrieron lagos,
r�os y prados,

que trazaron caminos al oeste
y a los mares del oeste,

que vagaron por monta�as y mesetas
que hoy son estados,

que buscaron castores
y hallaron la gloria,

que murieron en el anonimato
y alcanzaron la inmortalidad.

Mi padre comenzaba describiendo

el lugar de reuni�n
de los monta�eses,

donde se encontraban en julio
tras cazar en las Rocosas.

All� vend�an sus pieles
y se pon�an al d�a bebiendo,

peleando, jugando y divirti�ndose.
Y con las chicas.

Ganar� el que dispare
m�s veces en un minuto.

No era un concurso de punter�a
sino de rapidez.

Se compet�a en rapidez
para volver a cargar,

lo que no era f�cil
aquellos tiempos

en que se usaba p�lvora,
balas, tope y baqueta.

La vida de un monta��s
no depend�a siempre de su punter�a,

sino de preparar deprisa
el siguiente disparo.

Si erraba el tiro la primera vez,

deb�a asegurarse
de tener otra oportunidad.

Sr. Chennault, esta reuni�n
es una experiencia �nica.

De sitios que no
est�n en los mapas.

Uno de los amigos m�s extra�os
de mi padre era el capit�n Lyon,

un escoc�s veterano
de Waterloo.

Vino a las Rocosas con una escopeta
de dos ca�ones y una armadura,

y acompa�ado de un escudero
que pintaba cuanto ve�a

para que el capit�n tuviera
un recuerdo de sus aventuras.

S�, con mucho gusto.
Pero p�ntelo ahora.

�Fuera? Qu� pena.

- Sr. Chennault.
- No, sin dinero no se bebe.

- Por favor, Sr. Chennault.
- No.

Me debes dinero.
�Tienes dinero para pagarme?

- Sabe muy bien que no tengo nada.
- Por supuesto.

Lo siento. Olv�dalo. Yo soy
comerciante, no hago beneficencia.

Qu� poco amable.
Entre franceses...

S�lo le pido un vasito,
�qu� le cuesta?

Le pagar� la semana que viene.
Necesito...

Cuando las 7 estrellas est�n
alineadas con el pico del monte,

- Gowie, Gowie.
- �Se�or!

- �Seguro que esto es normal aqu�?
- Es cosa de ella. Obligatorio.

- Habla la lengua de los indios.
- S�, todas: Pie Negro, Nez Perc�...

- �Trabaja para la compa��a?
- Trabajo por mi cuenta.

Por su cuenta. Me debe
600 d�lares. Por su cuenta.

Tal vez le page alg�n d�a.
No olvide, Sr. Chennault,

que antes
fui rico e influyente.

Podr�a emplearlo, capit�n.
Le podr�a ense�ar a disparar.

- Gracias, se�or.
- �C�mo se llama?

Pierre Alphonse Marie Joseph Victor
de Promusenne, la Framboise.

- Tome un trago, Pierre.
- Oh, mi capit�n.

Ese verano mi padre estaba
comprando caballos y reclutando

hombres para ir al territorio
de los Pies Negros,

una tierra que �l hab�a explorado
y que estaba llena de castores.

Y castores significaban dinero.

La dama se llamaba Kamiah,

era una Pie Negro de pura raza.

Era orgullosa, fuerte
y preciosa.

Ella no es una Serpiente.
Las Nez Perc�s son austeras.

Bueno,
s�lo es una peque�a inversi�n.

Siete estrellas, sauces...

Lo siento, perdonen,
no ten�a ni idea.

Pregunta si compra caballos
para cambiarlos por una mujer.

Un hombre con tantos caballos
es tonto si no tiene mujer.

Dice que el caballo
va adonde vaya ella.

Brecan era un escoc�s
antiguo socio de mi padre.

Pero ahora viv�a
con los Pies Negros.

Estaba harto de las matanzas
y le gustaban los indios y su vida.

Era un hombre de gran coraz�n
y de firmes convicciones.

Capit�n, un viejo amigo m�o:
el Brecan.

- �Brecan? �De Argyll?
- No, de McGregor.

Tengo un whisky que le gustar�.
�Sr. Chennault?

- Usted tambi�n, Pierre.
- �Yo? S�, gracias, se�or.

- No sab�as que pod�a hacer eso.
- No, no lo sab�a.

- Gowie, �aprender�as a tocar esto?
- No, eso no se aprende, es un don.

No hay nada como las gaitas para
la guerra. Me recuerdan a Waterloo.

No he vuelto a vivir
un momento como aquel.

- Quiz� en este pa�s de Pies Negros.
- Tal vez.

Presiento que en esta aventura
gastar� todo el dinero que tiene.

- No quiero que pierda sus ahorros.
- Ahorr� para esto.

Ojal� cogiera eso y se fuera
a vivir a Kentucky, su patria.

Voy a ver a los Nez Perc�s.
Un buen whisky, capit�n.

Va a hacer un trato con Espejo
por la chica del caballo.

- �Brecan? �Va a casarse con ella?
- No, no.

- �Qu� dices! �Es un Pie Negro!
- Lo que yo te diga.

- Pero escuche...
- De eso nada.

Un momento, un momento.

Le dec�a que ella no es Pie Negro,
es imposible, es hija de Espejo.

No, Espejo se la rob� a los
pues negros cuando era ni�a.

- Es as� de simple.
- �Est� seguro?

Su abuelo es Oso Fantasma,
un gran curandero.

Quiere recuperar a su nieta
y mand� a Brecan a comprarla.

�Oso Fantasma? El hechicero
de la tribu de los Pies Negros.

Y Coraz�n de Hierro
es s�lo un jefe guerrero.

Y Oso Fantasma es el gran jefe
del pa�s de los castores.

Dile a Dick que traiga todo
lo que tengamos para traficar.

Flint, no puede hacer eso.
No puede ir a comprarla sin m�s.

Una cosa es que Brecan quiera
llevarla a su tribu.

Pero Espejo no se la vender� a Vd.
S�lo si se casa con ella.

No le veo nada de malo.
Hasta puede serme �til.

Ama a su hija Pie Negro
y estar�a muy triste sin ella.

- �Cu�nto m�s me costar�?
- Es la luz de su tienda,

porque no puedo darle el sol
y la luna a cambio de su hija.

Pero si Brecan ofrece mucho
yo ofrezco m�s.

Su coraz�n est� sangrando.
Brecan es su amigo

y el monta��s tambi�n,
pero no puede d�rsela a ambos.

El jefe de los Nez Perc�s debe
decidir antes de ponerse el sol.

Brecan dice que si Espejo
le devuelve a la chica a su abuelo,

�l intentar� establecer la paz
entre los Pies Negros

Dile a Espejo que Brecan
es hombre de palabra. Cumplir�.

Espejo dice que la paz
es muy conveniente,

pero es viejo y pobre y tiene
parientes muy codiciosos.

El capit�n del Rey Jorge trajo
esta medicina de guerrero.

No teme a las flechas
y es �til contra los parientes.

No puede d�rsela
si ella no acepta.

Si ella quiere casarse con Vd.,
har� que preparen una tienda.

Cuando usted entre,
all� estar� como esposa.

Ir� a buscar a su hija
y la dejar� decidir.

Moscas en la leche de dos en dos,

moscas en la leche de dos en dos,
ven conmigo, querida.

Un p�jaro azul me servir�.

Un p�jaro azul me servir�.

Ven conmigo.

�Sr. Mitchell, dice que s�!

Que Chennault saque unos barriles.
Vamos a poner esto patas arriba.

Sabes que deseaba
devolverla a su tribu.

La llevar� yo. Si quieren
comprarla, se la vender�.

No te servir� de nada. Nunca
volver�s a entrar en esa regi�n.

Las cuatro parejas
adelantan y retroceden...

Saluda a la chica
que tienes delante.

Hazla girar.
Adelante, cruzando y atr�s.

Rep�telo y vuelve
a la posici�n anterior.

Vuelve con la tuya, la m�s bonita.
Repite el mismo paso y un paseo.

Hazla girar con ritmo y vaiv�n,
hazla girar y vuelve al c�rculo.

Ocho manos suben y giran.

Sigue dando vueltas
y nunca la sueltes.

Deja a tu antigua dama
para hacer un cambio.

Coge a la nueva
e intenta besarla...

los castores en la trampa
te miran bailar.

El novio al centro. Toma
un vaso de roc�o de la monta�a,

Dale la mano a esa belleza.

Busca a tu compa�era
y de vuelta al c�rculo.

Perd�n, �es una pelea privada?

- No, puedes participar.
- Gracias, se�or.

- Entrez, a lattaque.
- �Qu� ha dicho?

Venga, no tema nada.
Entrez, a l'attaque.

Entrez, a l'attaque.

�Se�or! �Ya basta!

- �Qu� dice?
- Que est� borracho.

- Me vas a arrancar la cabellera.
- S�.

- Est� helada.
- S�.

- �T� te pones eso?
- No, se�or, yo me lo bebo.

Sr. Flint, usted sabr�
mucho de la monta�a,

pero no sabe nada
de mujeres. Todav�a.

Pero aprender�... quiz�.

LOS TRAMPEROS TIENEN UNA CITA
AQU� EL 4 DE JULIO DEL PR�XIMO A�O

CORRAN LA VOZ POR
LAS MONTA�AS CHENNAULT

Se denominaba brigada
a esta fila parduzca

Llevaban caballos y mulas
cargadas con cepos, comida

y munici�n. Un cargamento
ordinario, valor incluido.

Esos �rboles eran la 1: frontera
del pa�s de los Pies Negros.

Los exploradores se destacaban
para reconocer el terreno y mor�an.

- �Y Luke?
- Los muertos no nos sirven.

Este pr�ncipe Pie Negro
se llamaba Camisa de Hierro.

Para �l los tramperos eran
el enemigo, hab�a que matarlos.

�l pensaba que �se era su pa�s,

y quer�a que siguiera si�ndolo.

Claro. Seguro
que Camisa de Hierro atacar�.

Nunca le hab�a visto vacilar
para combatir a los Pies Negros.

Su mujer lo convertir�
en uno de ellos.

Calla. Redobla
la guardia esta noche.

Cuando decida
lo que voy a hacer, te lo dir�.

Preg�ntale a Kamiah si conoce
otro camino hacia los Pies Negros.

No el viejo sendero, sino otro
por donde pase una peque�a partida.

Cuando la robaron
los Nez Perc�s,

la trajeron por la monta�a
muy r�pido.

Pues iremos.
Vamos a dec�rselo a Du Nord.

- Yo me quedo aqu�.
- No, vamos.

Mi padre siempre dec�a
que se alegraba

de haber hecho una sola vez
aquel viaje.

Se ve�an obligados a marchar
por caminos intransitables

soportando d�as secos y calurosos
y noches heladas.

Montana e Idaho
a�n no ten�an nombre.

Lo que manten�a su fe era que
aquella monta�a ser�a el final,

la �ltima en cruzar,

y luego,
aparecer�an los verdes valles.

Pero siempre hab�a otra cordillera
que cruzar,

y otra. Y cada vez
m�s altas y m�s fr�as.

- �Qu� lleva esa mula?
- Dos juegos de cepos.

Las estrellas. Casi podr�a
tocarlas con la mano.

Aquello era un ventisquero
cuya profundidad nadie conoc�a.

�Podr�an cruzar los caballos?
Nadie lo sab�a.

Seguir adelante era dudoso,
retroceder parec�a imposible.

Su gente lo llama
"la luz de la monta�a".

Ha dicho: " Aqu� nac� yo,
�sta es mi tierra".

El sol se la dio a mi pueblo. Le
dio la tierra, el cielo y el agua.

La mejor regi�n del mundo
para el castor.

Un d�a
te dar� una buena zurra.

Sus brazos eran fuertes, sus hachas
afiladas y la madera abundante.

Pronto construyeron una empalizada
fuerte, alta y blanca.

All� viv�an y cazaban.

Yall� extend�an, secaban
y empacaban las pieles.

- �Ya has terminado los dibujos?
- S�, pero no s� qu� significan.

- Hierba Azul.
- Es donde yo nac�.

Ah, es como un �rbol geneal�gico,
empieza con un escudo de armas.

El emblema de su marido:
Hierba Azul.

Y el suyo, un oso.

El oso, el oso es su abuelo.

Pregunta a Kamiah
si recuerda a su abuelo.

Le llaman Oso Fantasma porque
el viejo oso pardo le dio poder,

Pregunta si sabe
d�nde est� ahora.

En esta �poca puede estar en las
fuentes termales de Tres Colinas.

Quiere saber si tu abuelo va
a las fuentes termales

durante esta �poca
en Hierba Azul.

�Mi abuelo? No.
Lo mataron los indios de Virginia.

Bueno, es hora de irse a dormir.
Vamos, Gowie.

Dile a Kamiah que me ir� ma�ana.
Quiz�s est� fuera dos noches.

Juega con ellos
mientras yo no est�.

No, te quedar�s aqu�
con tu vestido puesto.

Los siguientes d�as, mi padre
caz� castores con Du Nord.

Estaba muy ocupado, pero al mismo
tiempo segu�a buscando se�ales

para saber si los indios iban
tras �l como �l tras los castores.

los hombres
son enterrados donde mueren.

YDu Nord, su amigo, fue enterrado
con las flechas en la espalda.

�Correr?
No, no puedo correr.

Lo de correr para salvarse ten�a
su significado en esos tiempos.

Si corr�as m�s que un Pie Negro
salvabas la vida.

Pero luego ten�as que enfrentarte
a los montes y los lobos.

Camisa de Hierro ten�a razones
para creer que el bosque

o los lobos hab�an matado
a mi padre.

As� que decidi� atacar
el fuerte.

El primer paso era
robar todos los caballos posibles.

Ni me han dejado disparar.

- Era Camisa de Hierro.
- S�.

�Los caballos no est�n!
Pies Negros.

Mi madre se puso furiosa,
como una india.

Ha ido a dec�rselo a su abuelo
para rescatarlos.

Mi padre no s�lo escap� de
los indios, tambi�n de los lobos.

La p�rdida de los caballos
le molest�,

pero que mi madre se fuera
lo sac� de quicio.

- Me necesitar�, se�or.
- Vamos.

Que ya ve que es usted su marido.
Sin duda alguna.

Mi padre me cont� que era la
primera vez que ve�a a los indios

tal como eran en realidad:
personas con hogares,

tradiciones
y costumbres propias.

De pronto dejaron de ser salvajes.
Eran seres que re�an,

�ltima Estrella ha matado a
un b�falo. Nos invita a un fest�n.

Dice que Camisa de Hierro
traer� ma�ana tus caballos.

Dile a Oso Fantasma
que le estoy muy agradecido.

Cuando era joven, s�lo pensaba
en matar enemigos y robar caballos.

Nacieron sus hijos y se hicieron
hombres fuertes. Eran un deleite.

Pero todos murieron en la guerra.
Todos, uno tras otro.

Y ansiaba ver a su nieta
antes de que se cerraran su ojos.

" No se encuentra
la felicidad sin mujer".

Camisa de Hierro ten�a
tres motivos para estar furioso.

Primero: que Flint
estuviera vivo.

Segundo: que estuviera
con Oso Fantasma, el jefe.

Y tercero y m�s importante:
que �l tuviera que devolver

- �Qu� ha dicho?
- Hay sangre entre los dos.

Dile que habla
como un soldado rabioso.

Si quiere estrechar mi mano
se la tiendo. Si no...

- �l regresa ya.
- Dile que estoy muy agradecido,

pero que a�n lo estar� m�s
el d�a que nos visite.

Cuando Brecan vuelva
de su cacer�a, Oso Fantasma

viajar� con �l para visitar
a su nieta y a su esposo.

Dice que le desea un buen viaje.

Espera que se tengan mucho amor
y que volvamos a reunirnos todos.

�Qu� es " kah mika"?

- �D�nde naci�?
- En Kentu...

En Hierba Azul. En el pa�s
donde la hierba es azul.

- �Hierba Azul?
- Hierba Azul.

- Hierba Azul.
- Eso es. Bien, ahora me voy.

No hay suficientes trampas para
darte los avalorios que deseas.

�Quiere probar mi estofado?

Entiendo.
Usted cocina, yo pinto.

�Pero qu� oigo?
�Habla nuestra lengua?

Para que le ayudara a cazar,
mi padre se llev� a Roy Du Nord,

hermano de Baptiste
que hab�a muerto hac�a poco.

Roy deseaba ver d�nde
estaba enterrado su hermano.

Yante la tumba prometi�
tomar venganza.

El disparo de hoy al alce
es lo mejor que he visto.

- Nieve pronto.
- Mucha nieve.

Habr� que invernar en otro sitio.
Tu abuelo me indic� uno muy bueno.

Podr�amos convencerlo
para que nos acompa�e.

�Norte? No.
No van al norte sino al sur.

Ah, �cuando vuelvan al norte?

�Qu�? �Un ni�o, un hijo?

Quieta, deja eso,
que lo haga otro.

Bueno, si lo tomas as�,
t� sabr�s lo que haces.

- Oso Fantasma nos hace se�ales.
- �Qu� dice?

Que vendr� a verle
cuando el sol est� arriba.

- Dile que tenemos una gran noticia.
- S�, se�or.

Le haremos un gran recibimiento.
Re�ne a los hombres disponibles.

Se la dar� yo mismo
a Oso Fantasma.

Dile que estoy muy contento
de que haya venido a visitarnos.

Unos meses antes, mi padre
s�lo se habr�a preocupado

por lo que aquello
supusiera para sus pieles.

A sus pies
hab�a un hombre muerto.

Yaquel hombre
hab�a sido su amigo.

- �Puedo hacer algo?
- Ahora no.

Camisa de Hierro es jefe ahora.

Pasaremos aqu� el invierno. Camisa
de Hierro es jefe. Habr� problemas.

Tal vez eso le detenga
pero no podemos confiar.

Que nadie salga solo,
iremos en grupos.

Cuando venga Camisa de Hierro
estaremos preparados.

- Richardson. Remplazar�s a Du
Nord. -S�, se�or.

Mi padre me dec�a siemre
que aquel 25 de diciembre

se percat� por primera vez
de lo que significaba la Navidad.

Alondra, mi buena alondra,

alondra, te voy a desplumar.

Te voy a desplumar la pata.

Yla pata, y el pico.

Yla cabeza. Alondra.

Alondra, mi buena alondra,

alondra, te voy a desplumar.

Te voy a desplumar el cuello.

- Feliz Navidad.
- Feliz Navidad.

Hurra por la reuni�n estival.

�Y por el aguardiente!

Hay movimiento, los indios
cruzaron la bifurcaci�n.

A empacar, chicos.

Eres m�gica. Y la �nica
mujer del mundo para m�.

No lo sab�a cuando te conoc�,
pero ahora estoy seguro.

No puedes entender
lo que intento decirte.

Y yo tampoco entiendo mucho
lo que dices. Alg�n d�a, quiz�s.

Yahora la brigada regresaba
al punto de concentraci�n.

Las mulas cabalgaban
bajo el peso de las pieles.

Era mi primer viaje
pero no ten�a edad para saberlo.

Tranquilo, peque�o Chip.
No pasa nada.

KAMIAH
ESPOSA DE FLINT MITCHELL 1830

El viejo Espejo conseguir�
una mujer para cuidar del ni�o.

Ella querr�a que estuviera
con su pueblo.

Tome, se�or. Un poco de az�car
para el ni�o. Buen alimento.

No, esta vez no, Pierre.

Yas� nos alejamos del lugar
donde descansaba mi madre,

Ahora �l pertenec�a al pueblo
indio, con todo su coraz�n.

�l ayud� a abrir el oeste
a los tramperos,

a los hombres que amaban
el pa�s como �l,

a que hubiera m�s civilizaci�n
y comprensi�n.

�l me quer�a con �l, pero conforme
crec�a empez� a sentirse culpable

por no mandarme a la escuela.

No comprend�a, como yo ahora,
que ninguna ense�anza

podr�a igualar
a esos a�os que pas� con �l.

Me ense�� lo que no
se aprende en la escuela.

Pero pens�
que yo deb�a ir al este

y prepararme para lo que
�l llamaba una vida respetable.

fue como una puerta
cerrando mi vida.

Mi caballo era r�pido
y yo sab�a manejarlo.

Pap� me mir� y sonri�.

Decidi� que la escuela
pod�a esperar un a�o m�s.

Durante 4 a�os
se lo quit� de la cabeza.

Aquellos fueron los a�os
m�s felices de mi vida

porque ten�a edad para
conocer a mi padre, entenderlo

y hacer que me relatara
lo que les he contado.

Su historia
no es s�lo su historia,

es la de los hombres
de las monta�as,

la de los colosos que exploraron
el oeste creando nuestra historia.