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HACIA LA FELICIDAD

�Diga? �Diga?
�Con qui�n quiere hablar?

�Stig Ericsson?
Ahora est� en el ensayo.

�Cielo santo!
Espere, voy a avisarle.

Hola.

�Hola?

Me env�a la abuela.
Ella no pod�a viajar.

Intent� llamarte al trabajo, pero...

�Qu� ha pasado?

El hornillo ha explotado.

Marta se quem� entera.
Y la ni�a peque�a tambi�n.

Marta est� muerta.

Dicen en el hospital
que la ni�a est� bien.

Llamaron antes de irme y dijeron
que ya estaba fuera de peligro.

El hornillo de queroseno explot�.
O�mos la explosi�n y vinimos corriendo.

Marta muri� camino del hospital.

La abuela dice que ella y el abuelo
vendr�n ma�ana y que te llamar�n.

Lasse y yo iremos a comprar
un brazalete de luto.

LA HISTORIA DEL MATRIMONIO
DE STIG Y MARTA

EMPEZ� UN D�A DE OTO�O
SIETE A�OS ANTES.

Hoy empieza una nueva temporada.
Eso es bueno. No s� qu� dir�n ustedes.

Damos la bienvenida a las nuevas
incorporaciones de la orquesta.

Son Stig Ericsson,

que sustituye a Sunkan que falleci�
el pasado verano. Descanse en paz.

Y tenemos a una mujer en la orquesta.

Es una estupidez
y va totalmente contra natura.

Pero tiene un gran talento.
Est� all�, por si no la hab�an visto.

Se llama Marta.
Bienvenidos los dos.

Bien, empecemos.

Caballeros,

la secci�n de viento.
Desde fortissimo.

Vamos todos. Todos.

Hoy ha sido un desastre.
Pero es natural.

Buenas tardes, caballeros...
y se�ora.

Kurt H. viene el jueves.
Entonces oiremos m�sica.

Hola. Imagina que acabamos aqu�.
�Qu� tal el verano?

Fui al extranjero con mi hermano
y escuch� mucha m�sica. �Y t�?

- Orquesta de verano.
- Pobrecillo.

No quiero volver a tocar
"Oro y plata" nunca m�s.

- �Has trabajado?
- Estudi� a Mendelssohn y otros.

- Pareces enfadado.
- No estoy enfadado.

- �Tienes un sitio donde quedarte?
- S�. �Y t�?

- Es horrible, pero barato.
- Es mi cumplea�os. �Quieres venir?

- No me apetece. �Qui�n va?
- Ya lo ver�s si vienes.

�Puedes prestarme diez coronas?
Siento tener que ped�rtelo

- pero si me las pudieras prestar.
- S�lo si vienes esta noche.

- Si me prestas 20 ir�.
- �Tambi�n te cortar�s el pelo?

- �Cort�rmelo? �Qu� le pasa?
- Y compra un regalo por 1,50.

Intenta divertirte, s� agradable
y no acabes gritando como siempre.

- �Qu� pasa?
- Maldigo mi suerte.

Est�s muy gracioso con el pelo
reci�n cortado y peinado.

- �Es cosa de Marta?
- �La conoces?

- Tuvimos una aventura. �Y t�?
- No, yo la conozco de la academia.

Tiene una personalidad �nica,
pero es muy impulsiva.

- Est� madura para el amor, �sabes?
- �No te ped� un an�lisis!

Me dej� de tal modo que estuve
a punto de pedirle la mano.

- �Y?
- Me detuve en el �ltimo momento.

- Pero estuve muy cerca.
- No me interesa.

- �No vienes esta noche?
- Ni tiempo, ni ganas.

Ven. Trae el viol�n y tocaremos
antes de emborracharnos.

Quiero algo por 1,50.

- Eso. Ese oso de ah�.
- ��ste?

- Cuesta 4,80.
- Me lo llevo igualmente.

- �Lo envuelvo?
- No, me lo llevar� as�.

- Es muy bonito.
- S�, esos osos se venden mucho.

Gracias.

�D�jate de tonter�as!

Dio un pu�etazo y dijo:
"�d�jate de tonter�as!"

Es muy gracioso.
Te lo contar� la pr�xima vez.

No, no. No lo hagas.
No seas tonto.

- �De qu� te r�es?
- De ti, claro.

Ser� mejor que pares. Est�s borracho
y no quiero hacerte da�o.

Soy grandioso
cuando subo al escenario.

�Me has o�do tocar? Los violinistas
m�s prestigiosos son unos charlatanes.

Viven gracias a sus trucos baratos.
Pero yo los descubrir�.

Te contar� el secreto
del verdadero arte.

Uno crea cuando se siente desdichado.

Prefiero ser desdichado. Dios sabe
que siempre estoy en ese estado.

�Mostrar� a esos cabrones
c�mo se toca el viol�n!

Os sent�s culpables.
S� lo que est�is pensando.

�Somos artistas si s�lo pensamos
en beber, las mujeres y la beca?

Estoy borracho, lo admito.
Si no lo estuviera no dir�a nada.

Pero dejad que os diga
que yo veo m�s all�.

Qued�oslo todo vosotros.
�No vale nada!

Moriremos y renaceremos, y entonces
oir�is c�mo se toca el viol�n.

Porque la humildad
es la base de todo.

�Recordadlo gandules mientras
os revolc�is aqu�

y babe�is y eruct�is
con las corbatas manchadas!

- �C�mo te sientes?
- �Vete a la porra!

Deber�a darte verg�enza.

�Te has cortado el pelo?
Pareces un gato mojado.

Es culpa tuya.

No entiendo qui�n soy.

�Por qu� no puedo ser respetable
aunque tenga talento?

Porque tengo mucho talento
pese a estar borracho.

�Conoces a mi esposa Nelly?

Te aseguro
que vale la pena conocerla.

Es una mujer muy divertida.

Con una boca como una...
como una flor roja.

Creo que te la voy a dar.
A ella le gustar�.

- �Por qu� gritas?
- Se cay� el tejado.

Aunque fue la cortina.
Me voy a tumbar. Me encuentro fatal.

- Ayer te pasaste un poco.
- S�.

Tengo que sentarme.

- �Qu� hora es y d�nde estoy?
- Son las 5 y est�s en mi casa.

- �Por qu�?
- No te pod�as mover.

No, no, Stig, vamos.
No seas pesado.

- Est�s montando una escena.
- Si no sabes comportarte, vete.

- Soy un tonto sin remedio.
- Eso es verdad.

- La gente como yo no deber�a vivir.
- Eres inofensivo.

Pod�as haberme tra�do
un regalo de cumplea�os.

- Te lo traje. Pues claro.
- Pero te lo has olvidado.

No, espera, ya ver�s.
�D�nde est� mi abrigo?

Quiz� te parezca una bobada.
Es lo mejor que encontr�.

Muchas gracias, Stig.
Es un regalo muy bonito.

Deber�amos dormir.
Ensayamos ma�ana a las 9.

Quiz� uno haga el loco
y el idiota a veces.

Lo principal es que uno quiere ser
una persona de verdad y un artista.

Con eso tienes que estar de acuerdo.

Lo estoy. Buenas noches.

Buenas noches.

HA LLEGADO EL OTO�O

- S�nderby es simp�tico.
- Es un poco aburrido.

- �Te gustar�a ser como �l?
- Le ha ido bien. S�, me gustar�a.

Tengo 25 a�os. Cuando tienes
esa edad ya debes ser alguien.

- Alguien con responsabilidades.
- Yo soy feliz.

Me gustar�a formar un buen cuarteto
de cuerda y viajar por todo el mundo.

- Ser�amos los mejores.
- Pues claro.

- Esa sonrisa no me gusta nada.
- Es que estoy contenta.

- �Y t�? �Qu� quieres t�?
- Nada.

Me gustar�a enterrarme profundamente
para que nada me afectase.

- Pero t� eres feliz.
- Digamos que al menos lo aparento.

Siempre hablamos de cuando
nos conocimos. No s� nada de ti.

- Tal vez sea lo mejor para los dos.
- No digas tonter�as.

Oye, �Stig?

�Yo te importo?

- �Qu� quieres decir?
- No te he dejado acostarte conmigo.

�Si me hicieras el amor
te importar�a un poco m�s?

Responde sinceramente.
No tengas miedo de hacerme da�o.

- �Lo ves? No puedes responder.
- Primero tengo que pensarlo.

Claro que lo he pensado por qu�
has estado tan rara que...

- Pero nos hemos divertido igualmente.
- No me has contestado.

Te entiendo perfectamente.
Quieres estar segura de que te quiero.

De lo contrario
te remorder� la conciencia.

- Mira que eres tonto.
- Entonces habla a las claras.

Quiero que estemos juntos los dos.

Perdona. A veces divago y me
olvido que hablaba con alguien.

Hay tanta miseria, laxitud
e indiferencia en el cuerpo y mente.

Al final ya no creo en nada.
Las cosas son as� y ya est�.

- Eso es lo que significa.
- No tiene que haber un significado.

Debe haberlo. Si no, te lo inventas.
De lo contrario no se puede vivir.

He estado casada. Ya lo sabes.
Pero son todo mentiras y decepci�n.

Tambi�n he enga�ado con el trabajo.
No tengo demasiado talento.

Todo lo que he hecho ha sido enga�ar.
Durante toda mi vida.

- No me lo creo.
- Eso es f�cil decirlo.

No quiero que lo nuestro
sea un enga�o.

- �Tienes miedo?
- Puedes tomarte las cosas en serio.

Esto ser� como un juego
de palabras para ti.

Quiero estar contigo.
Eso ya lo sabes.

Pero uno no puede hablar de amor
y matrimonio todo el rato.

- Te prometo que ser� agradable.
- No nos prometeremos nada.

S�lo prometeremos ser honestos.
Eso es absolutamente necesario.

- Y no nos insultaremos.
- No. Y si nos cansamos, lo diremos.

T� ser�s quien se canse.

Eso no te lo crees.
No viviremos bajo falsas ilusiones.

Ser� m�s complicado.
M�s complicado de lo que creemos.

- Vamos a dejarlo.
- S�.

Vamos a traer tus cosas a mi casa.
Ser� m�s barato.

Bien. Odio mi habitaci�n.
Habr�a pillado reuma all�.

- Pagaremos el alquiler a medias.
- S�.

Prometo que no tendr�s que dormir
en ese sof� tan inc�modo.

A no ser que quieras, claro.

�Qu� han estado haciendo
esta Navidad?

En esta ciudad de mala muerte
donde s�lo comen y comen.

�In�tiles!

- �sta es de las m�s dif�ciles.
- No para alguien con talento.

Pero son unos vagos y unos zoquetes.
Otra vez, desde el principio.

No aguanto estos chirridos.

Vamos a descansar diez minutos.

- Queremos pedirle salir antes.
- �Salir antes?

- �Est�n locos?
- Dijo que acabar�amos antes de la 1.

- Yo cre�a que ten�an talento.
- De todos modos, nos vamos.

- �De verdad?
- Nos casamos a las 2:30.

Dios... Dios m�o...

Lo olvid�. Deber�a solicitar
mi pensi�n y dejar de trabajar.

- Yo ten�a que ser...
- Ten�a que ser el testigo.

Estupendo. Llamaremos
al alcalde para posponerla.

No puede posponerla
sin un motivo v�lido.

- �Pero puede cancelar un ensayo?
- No se cancela ni en guerra.

Pero esto no es el ej�rcito.

No puede ser un campo
de concentraci�n.

- Ensayaremos todo el d�a.
- Ser� sin Marta y sin m�.

- Pues dejen mi orquesta.
- Nosotros somos su orquesta.

A usted no le dieron
unos azotes de ni�o.

Y usted se est� convirtiendo
en un ni�o otra vez.

- V�yase a la mierda.
- No quiero estar donde est� usted.

No deber�a enfadarme tanto.
Desagradecido inconsiderado.

- Podr�a darme un ataque y morir.
- Que le vaya bien.

As� la gente honrada podr� casarse.

Esto pasa por admitir a mujeres
en las orquestas.

�Qu� le ha pasado?

- �Miraste en la caja de herramientas?
- Y en tu joyero.

- Ve a comprar un bot�n nuevo.
- �Como puede desaparecer?

- �Seguro que no lo has visto?
- No tengo tiempo.

- �D�nde est�?
- Ya voy.

Aqu� estoy.
Tenemos que darnos prisa.

Casarse te roba mucho tiempo
y te pone de los nervios. Adm�telo.

- �Te arrepientes?
- Sinceramente, me arrepiento mucho.

- Yo tambi�n. Qu� ideas nos dan.
- Vamos a llamar y cancelarlo.

Con la que hemos montado
para irnos. �Qu� dir� S�nderby?

- Le has manejado muy bien.
- �A qu� te refieres?

El desmayo le ha desarmado.

- Era de verdad.
- Venga ya. Era teatro de aficionados.

- Ya veo. Pues ya lo sabes.
- �De verdad te desmayaste?

- �Y si as� fuera?
- �Por qu�?

No es tan extra�o.
Con un ni�o comprender�s...

No pareces muy entusiasmado.
No tienes que estarlo.

- �C�mo ha pasado?
- Pues como suele pasar.

- No te hagas la graciosa.
- Pregunta tonta, respuesta tonta.

- �Hace mucho que lo sabes?
- S�, casi tres meses.

- �Por qu� no has dicho nada?
- Porque quiero un hijo, �entiendes?

- Lo tendr�s si lo quieres, �o no?
- Mira que eres ingenuo.

- �Te refieres a qu�...?
- �S�!

- Nunca lo dijiste.
- �Iba a cambiar algo?

Si has abortado antes puedes repetir.
Es todo tan desagradable.

- �Qu� es desagradable?
- Casi lo has tenido a mis espaldas.

�C�mo sabes que es m�o?

Adem�s, no tenemos sitio.
Pa�ales, meados y cuidados

y ni�eras y mocos y tu abuela.

Piensa en los llantos
�D�nde ensayar�? Muchas gracias.

�C�mo piensas organizar esto?
Debiste dec�rmelo.

�Pensabas llegar un d�a y decir:
"aqu� tienes a tu hijo, pap�"?

- �Bien?
- �Tengo que disculparme?

No lo entiendes. No quiero un hijo,
�odio a los ni�os!

�Crees que es un buen mundo
para traerle? Prefiero la extinci�n.

- �Por qu� no dices nada?
- Te estoy escuchando.

No tienes ni idea de lo que dices.
S�lo dices estupideces.

�Qu� quieres que haga?
�Decirte que ser� primer ministro?

- Reacciona como un hombre.
- �Como un superhombre?

- Un hombre normal.
- �Ahora no soy un hombre!

Sab�a que eras neur�tico.
Que eras infantil y ego�sta

- pero no sab�a que fueras cruel.
- De verdad...

Me alegra saberlo antes de la boda
porque no la habr�.

- No podemos cancelarla ahora.
- Y dicen que somos convencionales.

- �Qu� pasar� ahora?
- Voy al estanco a llamar.

De todos modos puedes quedarte
a vivir aqu�, no me importa.

Esto siempre me pareci�
una simple pensi�n.

Est�s loca, completamente loca.
�Est�s llorando?

- Nunca hab�as llorado. �Est�s triste?
- No.

Es que estoy cansada. De ti.

�Lo he arruinado todo?
�Por qu� lloras si ya sabes como soy?

Lloro porque estoy enfadada
por estar llorando.

Si no estuviera seco, tambi�n llorar�a.
�Cre�as que eso me har�a feliz?

�Es que acaso cre�as
que yo ser�a feliz?

En el fondo sabr�a
que esto acabar�a as�.

Una se imagina muchas cosas.
No s�...

- Forma parte de ello.
- �Tambi�n te pas� la �ltima vez?

Entonces... todo fue mal.

- Ni siquiera pod�a imaginar nada.
- Quieres decir que ahora...

Pensaba que lo que hab�a
entre nosotros

era algo distinto.
Deb� comprender que nada cambia.

Todo es siempre igual.

- Incluso las palabras que una dice.
- Maldita sea, yo te quiero.

Pero ya sabes que nunca
me han gustado las sorpresas.

Cuando era peque�o me enfadaba
y me asustaba cuando me sorprend�an.

Creo que esta vez
me ha pasado lo mismo.

La verdad es que no pod�as haber
buscado un momento m�s oportuno.

Pero pens�ndolo bien nos dar�n una
ayuda por el ni�o que nos vendr� bien.

El peque�o nos mantendr� a nosotros.
Y no pueden echarte con un beb�.

La hermana de Putte
siempre est� embarazada

y se sienta a tocar
con su barriga al aire.

Y cuando no puede tocar m�s
creo que le dan media paga.

L�gicamente cambiar�amos de piso
si fuera necesario.

- Eh.
- Hablas mucho.

Lo de la sorpresa es cierto
y psicol�gicamente cre�ble.

Mira que aspecto tengo. La nariz
se me pone enorme cuando lloro.

Di lo que quieras pero esta ser�
una boda que ambos recordaremos.

El matrimonio es por el bienestar
individual y el bien social.

Has indicado tu disposici�n
a contraer matrimonio.

- �Aceptas a Marta Olsson como esposa?
- Acepto.

Marta Olsson, �aceptas
a Stig Ericsson como esposo?

- Acepto.
- Pod�is intercambiar los anillos.

Por el poder que se me otorga,
yo os declaro marido y mujer.

No olvid�is nunca la promesa
de fidelidad que hab�is hecho.

Vivir juntos en amor mutuo
y salvaguardar las generaciones futuras.

Que la armon�a y felicidad
formen parte de vuestro matrimonio.

Tal vez sea primer ministro
si es como t�.

El gemelo...
Lo guardaremos como recuerdo.

Bueno, tenemos 14 d�as.

Hemos repasado el concierto
dos veces.

- Deber�an tenerlo dominado.
- Claro.

Eso dice, pero s�
lo que est� pensando.

- �Qu� dice su esposa?
- Nada.

- Eso es preocupante.
- Ambos quieren humillarme.

Preferir�a evitar este
n�mero de equilibrista.

�Qu� har� cuando su violinista
haga las maletas?

Pero usted lo considera
un caso cerrado. �Qu� est� mirando?

Bueno, se lo dir�.

Miro a ese demonio llamado ambici�n
centelleando en sus ojos.

- �Y tan extra�o es eso?
- No.

No lo es. No es nada extra�o.

Pero s�lo lleva aqu� seis meses

y no ha descubierto que la m�sica
es un objetivo no un medio.

- �Qu� ha dicho?
- Funcion�. Tengo mi oportunidad.

Ahora les ense�ar� a tocar el viol�n.
Podr� llegar a ser lo que quiera.

Tal vez vaya a Estocolmo.
No s� qu� puede ocurrir.

Es una sensaci�n maravillosa.
Lo tienes todo ante ti.

Saber que no hay l�mites.
Pero al�grate t� tambi�n.

- Esto es para ti y para m�.
- Pues claro que me alegro.

- Vamos.
- No voy a entrar. No soy un payaso.

Entrar�s aunque sea lo �ltimo
que hagas. Ya no depende de ti.

Vamos.

El ensayo no es
hasta ma�ana a las 10.

�Cabr�n! �Maldito cabr�n!
Seguro que ahora est� contento.

Vamos a casa a tomar una copa.
Ambos lo necesitamos.

S�, vamos.
No podemos quedarnos aqu�.

�Maldito cabr�n!
�Soy un mediocre!

- Fue mejor de lo que esperaba.
- Vamos, t�rate al lago m�s profundo.

L�elo. Es mejor que lo leas.

L�elo en alto.

- No hay mucho.
- Lee lo que pone ah�.

"Stig Ericsson debut� prematuramente
en el concierto de Mendelssohn.

Es sorprendente que un director
experimentado como S�nderby

no evitara este suicidio innecesario.

Puede que Ericsson tenga talento.

Seg�n el programa, ha estado
en las mejores escuelas".

- Sigue.
- No dice nada m�s.

�No dice nada...?

�Tan malo es?

�Ya est�is contentos?
�T� y S�nderby?

Piensa en c�mo se reir�n todos ahora.

- �D�nde vas ahora?
- A hacer caf�.

- No quiero caf�.
- Pero yo s�.

T� crees que esto no importa.

- Cierra la ventana me estoy helando.
- Quiero tomar el aire fresco.

�Por qu� no dices nada?

Pero, �qu� quieres que diga?
�Que el concierto fue bien?

�Que han publicado mentiras
y que todos se equivocan?

�Quieres que te consuele diciendo
que la pr�xima vez ir� mejor?

No habr� pr�xima vez.
Lo sabes tan bien como yo.

- Me alegrar�a por una cosa.
- �El qu�?

Que podr�a ir al ensayo
de hoy a las 10:00

sentarme en mi sitio de siempre
y hacer mi trabajo.

Eso demuestra lo poco que sabes.
Voy a dar un paseo. �Solo!

No, Stig. �Puedo ir contigo?
�Puedo ir contigo?

He dicho que quiero ir solo.
No quiero cargar contigo.

- �Ir�s al ensayo?
- No lo s�.

- No tiene nada que ver contigo.
- No deber�as apartarme de tu lado.

Hay tantas cosas
que no deber�a hacer.

Es mucho m�s f�cil
cuando se son dos. Seguro.

Nunca se pueden ser dos.
Dentro siempre est�s solo.

No dices m�s que pamplinas
y sentimentalismos.

Me voy solo, como siempre he estado.
Y no hay m�s que decir.

�Por qu� te asusto tanto?

�Asustarme? Qu� graciosa.

Quiero que me dejes en paz,
eso es todo. Adi�s.

- �Te vas a sentar ah� meditabundo?
- �Y usted? No parece feliz.

Insomnio.

�Est� desarrollando un personaje?
Un acto creativo.

No. Escuch� a Mendelssohn ayer.
Fue horrible.

- No pude dormir despu�s.
- Me alegro de que se lo tomara as�.

- Usted lo comprende.
- Lo he vivido. El gran silencio.

�Por qu� r�e? �Todos lo hacen?
�Es que soy gracioso o es casualidad?

Claro que es gracioso,
porque ha fracasado.

Vamos, tomaremos
un poco de caf� en casa.

Cielo santo, qu� desorden hay aqu�.

- No puedo limpiar cada d�a.
- T� nunca limpias, querida.

Cerraremos las persianas
para no tener que verlo.

Una vez estaba tan desordenado
que vinieron los de Sanidad.

Dijeron que nos tendr�amos que ir
si no pon�amos remedio.

- Entonces ten�amos perro, pero muri�.
- Tuvo cachorros y muri�.

Seguramente de la sorpresa.

- Est�s muy triste.
- Quer�a atrapar la luna con una red.

Pero cuando iba a sacarla
desapareci� debajo de m�.

- �Como un pez?
- No, como una moneda grande.

Ahora lo entiendo.

T� eres el cazatesoros que zarpa
en busca de planetas hundidos.

Iba a hacer volar por los aires
un almac�n. Alima�as.

La enfermedad del cachorro.
Diarrea verbal, destrizar cosas,

dar pu�etazos
y maldecir a los cielos.

Todo acaba en una pensi�n
y una medalla por tus servicios. �Salud!

- Calla, que hablo con tu mujer.
- Casarse con un viejo es in�til.

Es conmovedor, �verdad?

- Me voy a casa. Tengo ensayo.
- Buenos d�as.

Siempre ser�s bienvenido aqu�,
sea cual sea tu estado.

- Vuelve pronto.
- Nunca.

- �Por qu� no?
- No me gustas.

- No lo parece.
- Adem�s, esta casa es asquerosa.

- T� te lo pierdes.
- Tienes un cuerpo bonito, pero ya est�.

- Es suficiente.
- Est�s loca

si crees que te compartir�a
con ese viejo asqueroso.

- No he ca�do tan bajo a�n.
- Vuelve cuando quieras.

- Podemos hablar de la luna.
- Si no quieres nada m�s...

�Estate quieta!

Yo tambi�n fui a dar un paseo.
Aunque esperaba encontrarte.

- Ir�amos en direcciones opuestas.
- Estuve en casa de Mikael Bror.

�De verdad?

- �Tenemos que hablar m�s de esto?
- No, no volveremos a hablar de ello.

Alg�n d�a en el futuro cuando
seamos mayores y no nos duela tanto.

- �Te has hecho da�o?
- �Yo?

- No, es pintalabios.
- �De verdad?

Una mujer extra�a
que se empe�� en besarme.

- �Qu� te pasa?
- Viene de camino.

- �Puedo ayudarte?
- �Tienes miedo?

S�, lo tengo. �Y t�?

No lo s�.
No tengo ganas de averiguarlo.

En cierto modo me alegro
de haberme deshecho de �l.

- Me alegro que no haya sido yo.
- Yo tambi�n.

Me siento fatal.
�No ser�a mejor que nos fu�ramos?

Todav�a no. Ser�a peor
que nos enviaran a casa de nuevo.

Eso ser�a humillante.

Pobre. �Quieres que haga
un poco de t� y un bocadillo?

S�, por favor. No s� qu� ocurre.
Seguramente algo me sent� mal.

En algunas tribus cuando
la mujer est� de parto,

el hombre se mete en cama
y grita y gesticula.

�l se lleva todas las felicitaciones.
Supongo que eso es lo justo.

�No crees, Stig?

Sra. Ericsson, venga conmigo.
Qu�dese aqu�, Sr. Ericsson.

Cu�date, cari�o.

ESTAMOS EN AGOSTO
TRES A�OS DESPU�S

Eran tan pobres, tan pobres
que no ten�an comida.

Me alegro de no ser un escritor.

Si tuviera que retratar
a Stig y Marta,

desde que se conocieron
hace cuatro a�os,

qu� cuadro tan incompleto
y poco fidedigno pintar�a.

Seguramente nunca olvidar�a
aquel episodio del pasado invierno

cuando fui a dejarle
una partitura a Stig.

Puede tambi�n que
me est� haciendo viejo.

Uno tiene que vigilarse mucho.

El timbre estaba roto as� que entr�.

Me qued� en el pasillo oscuro
mirando hacia el sal�n.

�C�mo podr�a describir
el modo en el que se abrazaban?

Infinitamente tiernos pero tambi�n
er�ticamente conscientes.

�Por qu� hab�a tanta soledad
y temor infantil en su quietud?

Volv� a salir de nuevo
y llam� a la puerta.

Cuando Marta abri� la puerta,
segu�a teni�ndolo todo en sus ojos.

S�, es una mujer admirable.

O el d�a que discutieron.
Me di cuenta enseguida.

Estaba en el aire.
Marta estaba muy callada.

Se sent� hundida en el sof�
y mirando a Stig.

�l me hablaba sin parar,
pero cosas intranscendentes.

Se levant� a buscar co�ac
y al volver pas� junto a Marta.

Se sent� en el sof� y la mir�.

De pronto, Stig le dijo:
"�hola, peque�a!"

Parec�a una invocaci�n,
porque el ambiente tenso

desapareci� como un soplido
de viento en mar abierto.

No s� por qu� no puedo explicarlo.

Imaginad que trat�is de descifrar
un complicado lenguaje secreto

que dos amantes han desarrollado
y hablan libremente

escondiendo sus emociones
m�s secretas y delicadas.

Describir un s�lo d�a de sus vidas

llenar�a muchos estantes
con grandes vol�menes.

Menos mal, que no es �sa mi labor.
S�lo tengo que reproducir

lo que los grandes compositores
crearon, con autenticidad.

Es mi placer.
Nadie me lo puede arrebatar.

- Soy inmensamente rica.
- �Rica? No me lo hab�as dicho.

Te tengo a ti y a los ni�os
y al viejo S�nderby roncando.

Y es verano y el sol brilla.
No tengo preocupaciones.

Estamos todos sanos y fuertes.
Cre�a que te hab�a tocado la loter�a.

Esto es m�s de lo que pensaba
que una persona pod�a tener.

Claro. Eres una mujer.
Para ti es distinto.

�Eso crees?
Tambi�n me preocupo y pienso:

�Ser� esto as� toda la vida?
Peque�as preocupaciones y alegr�as.

Peque�as adversidades.
Nada que no pueda soportar.

Es horrible pensar
que me lo puedan reprochar, �verdad?

Creo que es distinto. No est� escrito
que un hombre deba estar contento.

- Ni siquiera que deba ser feliz.
- �Stig?

Deber�amos irnos si queremos llegar
a tiempo para el concierto.

Est�s trabajando en Beethoven.
�C�mo va?

- No muy bien. �Por qu� pregunta?
- Pero sigues en ello.

- �Y?
- Abandona la idea de ser un solista.

- Eres un buen m�sico de orquesta.
- No ped� su consejo.

- Como quieras.
- No hay tiempo. Esa es la cuesti�n.

Voy a tomarme un descanso y recibir�
lecciones del Profesor Chabatska.

- Ya le he escrito.
- No es m�s que el orgullo.

S�lo porque usted sea un fracasado
no significa que yo lo sea tambi�n.

Los de segunda fila somos necesarios.
Sin abejas obreras no hay panal.

Es horrible o�rle hablar.
Es como escuchar a un muerto.

Ya te he dicho que no vengas.
No deben enterarse de lo nuestro.

Le he dicho a Mikael que te quiero.

Ojal� pudiera dejarte,
pero no tengo ganas.

Vamos, no podemos estar
sentados aqu� toda la tarde.

Escuchad: "todo forma parte de algo
llamado ciencia espiritual.

Esto puede incluir la sociedad,
la moral del estado o la religi�n.

Es simplemente un juego intelectual
con expresiones

que uno utiliza como si designara
algo aut�ntico".

Este H�gersten tiene raz�n
y tiene mi simpat�a total.

- Y la m�a, pero me importa muy poco.
- Creo que Stig est� cansado hoy.

Nuestro hu�sped. Es horrible
pero lo hacemos por el dinero.

Buenas noches.
�Todav�a no est�n acostados?

- He comido algo en el Grand.
- Hola. No sab�a que viv�as aqu�.

Y no viv�a antes, pero ahora s�.
Desde ayer.

As� que te mueves en esos c�rculos.
No lo sab�a.

...primera variable y luego
predominantemente desde el norte.

Parcialmente nublado con tormentas
y ambiente algo m�s c�lido.

El distrito costero de V�ner
G�taland y Gotland.

Oye, �por qu� no nos vamos
a la ciudad?

Ahora mismo.
Lo m�s lejos posible.

�Ten�as que mudarte a la ciudad?
En el campo est�bamos tan bien.

�Por qu� no me respondes?

�Por qu� me tratas
como a un criminal?

- Chabatska no ha contestado.
- Me haces da�o.

- T� y S�nderby hab�is escrito.
- Est�s loco, su�ltame.

Mira, �se ha roto el osito?

No importa, ma�ana te lo coser�.
Ser� un momento.

No discutas delante de los ni�os.
Recuerda eso, Stig.

Pase lo que pase, que los ni�os
no vean nuestras discusiones.

- �Qu� hora es?
- Las diez y media.

- Esta noche habr� mucha niebla.
- Ya lo oigo.

�Recuerdas lo que dijo S�nderby?
Parecen vacas en un cami�n.

- �Qu� ocurre?
- No me gusta que me mires as�.

- Es como si estuvieras comparando.
- Tal vez.

�No podemos ser agradables
el uno con el otro de nuevo?

- �Por qu� no podemos hablar de nada?
- No vale la pena.

No, d�jame en paz.
Es asqueroso.

No puedo evitarlo.
Creo que es asqueroso.

No lloriquees, nadie te puede o�r.

No lo soporto...
He hecho lo que he podido...

Nunca te he acusado
o reprochado nada.

He intentado comprenderte.
Siempre.

- �Y la culpa es m�a?
- Jam�s he preguntado nada.

No preguntes sobre cosas
que no son de tu incumbencia.

- �Lo tuyo con Nelly no me incumbe?
- Pues no, la verdad.

Tal vez lo encuentres censurable,
pero a m� no me interesa tu opini�n.

Lo malo es que no fui con cuidado y
por eso ahora estamos as�.

- Claro.
- Di lo que quieras...

Cuando nos conocimos estabas rodeada
de hombres. Estabas con Marcel.

Eso fue antes de tener a los ni�os.
�Es que no significan nada para ti?

T� te deshiciste de los primeros.

Siento recordarte que entonces
t� no quer�as hijos.

- �Lo ves? �Lo ves, Marta?
- Veo lo andrajosa que me he vuelto.

Ya s� cu�l es el problema.
No sacamos nada de nuestras vidas.

A ambos nos ha cegado la claridad.

Con la pureza llega la repugnancia.
Es una consecuencia natural.

Antes pod�amos discutir
y ser desagradables.

Pero luego s�lo ten�amos que pedir
perd�n y todo se acababa.

- Era un gran alivio.
- Ahora vemos que no hay alivio.

�Recuerdas lo que dijiste
en nuestra primera noche juntos?

Lo importante es que uno
sea una persona aut�ntica.

Entonces hablaba demasiado.
Era mentira, Marta.

La ma�ana que volv� con un corte en la
mano fue cuando empez� la claridad.

Era tan caprichoso que atraves�
una ventana con la mano

para dejar de so�ar
con ser un solista.

All� de pie con la mano ensangrentada
pens� en lo est�pido que era.

�Por qu� no se r�e nadie
de un segunda fila que no lo acepta?

�Es que no te das cuenta
de lo mal que suena todo eso?

Perd�n.
No hablaremos de ello.

Ir� a casa de la abuela.
All� los ni�os estar�n mejor.

�De d�nde sacar�s el dinero
para el viaje? Yo no tengo.

- Ten�as la semana pasada.
- Para el tel�fono y la leche.

- Hab�a bastante.
- �Quieres los recibos?

- No ahorras, eso es lo que pasa.
- Acepta un consejo como los dem�s.

- Ya lo he hecho.
- Debes tener gastos... yo tengo.

- �No es tuyo!
- Es para la casa.

No tengo dinero
para ese viaje tan precipitado.

Somos pobres y no podemos permitirnos
gastos de naturaleza emocional.

- Deber�as gast�rtelo en Nelly.
- C�llate.

- �Qu� tono es �se?
- El mismo que el tuyo.

- Las amantes cuestan dinero.
- Un precio fijo es m�s justo.

- Eres bastante cruel.
- Te has vuelto sensible.

- Seguro que enga�aste a Marcel.
- �C�mo puedes tener una amante?

- Siempre con el m�nimo esfuerzo.
- Eso es culpa tuya.

- Qu� ingenua creyendo en la fidelidad.
- Basta, Marta.

Necesitas una salida para tu
temperamento art�stico.

No puede haber sido f�cil para ella...

Perd�name, Marta. Perd�name.

- Ha sido culpa m�a. Tengo la culpa.
- Perd�name de todos modos.

Pero no perdono a la otra.

Puedes estar seguro de que
conseguir� el dinero para el viaje.

Aunque tenga que mendigarlo
por la calle. �No me toques!

Me das tanto asco
que te escupir�a en la cara.

Bien. S� as� lo quieres,
ser� como t� digas.

Le pedir� el dinero a S�nderby
y ser� estupendo perderte de vista.

"El doctor dice que es un infarto

pero s� que Nelly me ha envenenado".

- �Crees que est� sufriendo?
- Seguramente.

Bien. Ojal� sienta tanto dolor
que quiera gritar sin parar.

- No puede gritar, est� paralizado.
- Eso es lo mejor.

- Debes odiarle mucho.
- Pronto estar� muerto.

A veces es como un sue�o.

�l me da miedo.
A veces, de noche

pienso que me pegar�
o me estrangular�.

- Voy a pensar que le has envenenado.
- A menudo pienso que deber�a.

- �Qu� te ha hecho?
- �Qu� me ha hecho?

Existir. De alg�n modo
dependo de �l.

- No s�...
- Puedes divorciarte.

�Ad�nde ir�a?
Nadie se preocupa por m�.

Es porque eres repugnante
y no tienes sentimientos.

- Creo que hace fr�o.
- Estamos a 13 bajo cero.

Entra t�. �l no quiere verme.

- �Qu� te pasa? �Resaca?
- �S�lo hay m�sica de �rgano?

A Mikael le gusta o�rla.
Oye, no deber�as beber as�.

"Oye, no deber�as beber as�".
Nelly...

Si no fueras tan est�pida ver�as
que siempre voy bien vestido.

- �Y qu�?
- Mira a ese idiota de Stig. �l sufre.

Cree que la vida es horrible, t� eres
repugnante. No acepta su fracaso.

Por eso va con los zapatos sucios
y deja a su mujer.

- Est� ah� dentro con Mikael.
- Pues a ver si me oye.

�Dices que bebo? Yo hago mi trabajo.
Soy atractivo y pulcro.

Soy educado y amable.
Y vivo mi vida.

Y adem�s, soy muy feliz.

No, creo que me voy a dormir.
Qu� m�s se puede hacer en domingo.

�Vas a venir?

"Soy un cabr�n y estoy
recibiendo mi merecido.

Pero t� deber�as tener cuidado.
Ten cuidado, Stig".

Escucha, Mikael. Me voy a ir ahora
y no volver� nunca m�s.

Te agradezco todo
lo que me has ense�ado

pero no quiero seguir aqu�.
No quiero ser como vosotros tres.

S�lo hay una persona
que puede ayudarme y esa es Marta.

Querida Marta: te sorprender� no
haber sabido de m� �ltimamente.

Ten�a que escribirte
porque me han pasado algunas cosas.

Es como si de pronto
entendiera mi locura.

He comprendido c�mo he malgastado
lo �nico que ten�a valor en mi vida.

Querido Stig: cuando recib� tu carta
me preocup� al principio

al notar que hab�as estado solo
y hab�as pasado por dificultades.

La he le�do muchas veces
y veo que ha pasado algo importante.

Tambi�n he estado pensando y
ahora s� que nunca nos separaremos.

Ser�a un error. Pero no volver�
a casa, aunque te echo de menos.

Querida Marta: me alegr� tanto
al leer tus palabras que casi lloro.

Escond� mis sentimientos
y lo hice contigo y los ni�os.

Porque me hac�an da�o. O no ent
lo mucho que me importaba.

Quiero que vengas a por nosotros.
Hay tanto que planear para el verano.

�Verdad? Me siento idiota
y un poco rara escribiendo.

Me gustar�a decir muchas cosas
pero en un papel es muy sentimental.

Pero cr�eme que lo he intentado.

No tendremos que
hablar cuando nos veamos.

S� exactamente c�mo mostrarte
cuanto te quiero. �Lo adivinas?

Ven pronto...

Este tren es muy lento. Me gustar�a
saltar y correr junto a �l.

Quiz� lo empuje cuesta arriba.

Ser�a tan raro escuchar
su voz diciendo:

"eres bastante tonto" o

"�Te has lavado bien las orejas?"

O sentarme en la cocina tras
un concierto y comer de la despensa

bebiendo vodka y cerveza, riendo
y sin decir una palabra en serio.

Me he convertido
en una morena bastante guapa.

No sabes que anoche
tampoco pude dormir.

�Qu� tonta! S�lo voy a ver a mi
marido. Estamos hartos de vernos.

Y a�n as�, todo es nuevo.
�Nuevo!

Reci�n ba�ada y acicalada.
Qu� divertido ser� cocinar de nuevo

tener mi propia cocina
y dormir en mi propia cama.

Sentir su calor y tenerlo
durmiendo a mi lado.

Nunca m�s volver� a estar sola.
Nunca m�s sola.

Su boca que es tan deliciosa
y suave al besar.

Tambi�n me gusta su cuerpo.
La piel tersa de sus hombros.

Sus pechos que no se recuperaron
tras los ni�os

pero que son tan sensibles
como seres humanos.

El pelo fino de su cuello,
las curvas suaves de su ombligo.

Una cintura tan peque�a que puedo
rodearla con mis manos.

La quiero porque nos hemos pegado
y nos hemos hecho da�o

pero tambi�n por las mil noches
de alegr�a y placer absoluto.

ALGUNOS A�OS DESPU�S

Te has portado mal,
as� que no podr�s ir

a ver a la abuela.

Pescaremos peces grandes
y tendremos uno en la ba�era

y le ense�ar� a hablar.

- Los peces no hablan.
- Puedes ense�arles.

- �Lasse est� mintiendo!
- Stig, �puedes llamar a un taxi?

Claro.

- Pap�, Lasse est� mintiendo.
- No, s�lo se inventa cosas.

Taxi. �Por qu� no pueden hablar
los peces? Nunca lo sabremos.

�Pueden enviar un coche
a Pr�stgatatan 7 B?

Ericsson.
�Se�orita, se�orita!

Que sea un coche grande.
Somos cuatro y con mucho equipaje.

Eso es. �Y qu� quieres t�?

Dile a S�nderby que venga.
Hay agua mineral en la nevera.

- Creo que me voy a sentir muy solo.
- De eso nada.

- Est�s encantado.
- Muchas gracias.

Que se vayan los ni�os
y qu�date t� conmigo.

Qu� tonto eres.
�Qu� dir� la abuela?

Tienes cosas para aguantar
hasta el d�a del Juicio Final.

No vengas a la estaci�n.
Puedo pedir un mozo all�.

- �Qu� es esto, una bomba?
- No, una estufa de queroseno.

- �Te llevas una estufa?
- S�, as� es mejor.

Nos quedaremos en nuestra caba�a,

cocinaremos y dejaremos
a los otros en paz.

Ahora suspiras, pero ya ver�s
lo bien que estar�s cuando vengas.

- Deber�as cortarte el pelo.
- S�, ya me molesta un poco.

- Si vienes te lo corto.
- Ya ir� luego.

- Es extra�o. Te echo de menos.
- �Por qu� es extra�o?

Llevamos mucho tiempo casados.
No chupes la ventana que est� sucia.

- Har� buen tiempo.
- Parece que llega la primavera.

- �Es que no se va?
- �Quieres deshacerte de nosotros?

Me siento un poco idiota
aqu� de pie en el and�n.

�Cogeremos un pez que sepa hablar!

He o�do lo que ha pasado.
Yo...

Ver�s, yo...

No tienes que venir aqu�
si no quieres.

- Gracias. Creo que es mejor trabajar.
- S�.

- Haz lo que quieras.
- No me toque.

Los chelos y los bajos
deber�an sonar como truenos.

Es una cuesti�n de alegr�a.

No una alegr�a
que se expresa con risas.

O una alegr�a
que nos haga ser felices.

Me refiero a una alegr�a
que es tan grande,

tan particular que va m�s all�
del dolor y la desesperaci�n.

Es una alegr�a
m�s all� de toda comprensi�n.

Es... bueno...

No s� explicarlo mejor.

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