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�Qui�n fue el santo patr�n
de los ni�os perdidos?

El enfermo, abandonado, descuidado, abusado.

Su carne fina como la gasa, muy penetrable.

Siempre acomod�ndose
cuando trato de dormir.

El pu�o abrazando
el dobladillo de mi camis�n.

Emocionando mis sue�os. Fantasmas tristes
con preguntas que gotean de sus ojos.

Espero que alg�n �ngel los
est� cuidando.

- �Crees que se enter�?
- Nadie nos va a encontrar aqu�.

A la Zona. S�, la Zona.

Dame diez puntos. S�, lo s�. S� que
te lo debo de la semana pasada.

Lo s�, s�... Este tipo no tiene
nada que ver con Serelli...

Puedo recordar un tiempo cuando cada
ciudad me llevar�a de regreso a ti.

Cuando las se�ales de tr�fico
me guiaron a casa y nunca me perd�.

No s� c�mo consiguieron estar revueltos, pero
ahora los caminos conducen a ninguna parte.

Las calles son callejones sin salida y
estoy corriendo en la direcci�n equivocada.

A veces, Janie, Creo que me estoy
acercando, pero todav�a estoy muy lejos.

Esta es una historia sobre lo
que se siente al estar perdido,

a pocos minutos de tu propia casa.

No s� si esta historia no ha terminado
todav�a, pero as� es como comenz�.

Esc�chame, quiero mi dinero.

No quiero hacerte da�o, pero voy a tener
que hacerlo y hacerlo muy mal.

�Oyes lo que te digo, ni�o bonito?

Ey, Jon, soy yo, hombre. �Qu� est� pasando?

Vi a Leo. Parece estar enojado. Est�s
donde est�s, qu�date all�, �de acuerdo?

Jon, no s� d�nde est�s,
pero necesitas volver a casa.

Tienes que venir a casa.
Ella est� realmente mal.

Estoy muy preocupada y
no puedo manejarlo sola.

Creo que debes volver
a casa de inmediato.

�Cu�nto tiempo te va a tomar llegar
hasta aqu�? No est�s haciendo nada.

Ven aqu�. Todav�a no he comido.

Nos encontraremos enfrente
del edificio. Vamos.

Quiero salir de aqu�.

�No es el tipo que le debe dinero a Leo?
�Qu� diablos est� haciendo aqu�?

Ya he dicho eso exactamente.

Vamos, ten cuidado.

P�rate aqu�.
�Sabes qu�? Puedo hacer esto solo.

De acuerdo.

- No, voy a hacerlo yo...
- Janie!

Bueno, mira qui�n decidi�
honrarnos con su presencia.

�Dios m�o!

Para esto.
�Qu�? �Te gastaste el dinero?

�O es Leo?
No es Leo. Vine a casa por ti.

Vine a casa por nosotros. Estoy aqu�.

Vine por ti. Vamos.

Bien, mira lo que te he tra�do. Tenemos
una cuenta de tel�fono, algunos seguros.

Para.
- Tengo la factura del gas, electricidad...

Detente...
- Tenemos el alquiler. Solo para nosotros.

- No me toques.
- Para.

Ey, detenlo. �C�rtalo!

- No me toques.
- C�rtalo.

- No vuelvas a tocarme.
- Ve afuera.

�Est�s feliz ahora?
- Ve afuera.

Ve a dormir la mona.

Ve afuera.

�Qu�? - Est�s muerto, muerto,
muerto, muerto.

Y estoy muerto.

Esp�rame fuera.

Estoy harto de esto. Cada vez
que vuelvo a casa es la misma cosa.

Ella est� loca.

�D�nde has estado?

No puedo hacer m�s esto.

Cada vez que regreso es el mismo...

�Cada vez que regresas? Suenas como si
le est�s haciendo a ella un favor.

Ey. Mira, nena, agradezco
tu ayuda. Lo agradezco.

S� que no est� bien, pero...
No lo entiendes.

Entiendo. Entiendo que tu
no tengas un tacho para mear.

Entiendo que te vas y vives tu
vida y dej�ndome aqu�. No es justo.

S� que la amas. La amo.
Pero ella no ha sanado.

No ayuda que ella trabaje en ese hospital.
Lleva su trabajo a casa todos los d�as.

Jon, eres su marido.

S�, lo eres.

�Lo tienes todo resuelto ahora?

Me das asco.

�Por qu� no te tomas otra copa?

Vamos, un par de tus p�ldoras de la
felicidad. Hacen que el mundo siga andando.

Estoy muy feliz.

�No puedo decirte lo feliz que soy?

�No puedo decirte lo feliz que soy?

Tan feliz.

- Entonces, �cu�ndo volviste?
- Hace un par de horas.

- �Cu�nto tiempo te quedas?
- No s� lo que voy a hacer.

- No s� qu� hacer.
- Acerca de Leo?

No, peor. Es por Janie.

Oh, Cristo. �Todav�a?

Oh hombre. Lo siento, hombre.

Escucha, si necesitas un lugar para
dormir, todav�a estoy en el Chelsea.

Ella est� loca, hombre. Yo...

Simplemente no puedo m�s,
hacerme responsable de esto.

No tienes porqu�. Hemos
pasado por esto antes.

No s� si lo recuerdas. Ella se pone un poco
loca, luego al d�a siguiente, est� bien.

Es como que no pas� nada. Olv�dalo.

El problema es que no
tengo m�s energ�a para esto.

Tal vez si hace diez a�os,
era diferente.

Ella era m�s fuerte,
yo era m�s fuerte.

�Todav�a la amas?

S�, todav�a la amo.

�Sigue teniendo sexo con ella?

T�, mi amigo, necesitas un poco
de aventura. Necesita otro trago.

Jamie. Otra ronda, para mi amigo.

Recuerdo cuando la conoc�. Con esos
ojos que miraban a trav�s de m�.

Ella me conoc�a como un libro abierto.

Y el sexo... El sexo era bueno.

�En la enfermedad y en la salud...
Para bien o para mal�.

La cosa es que no te dicen
acerca de la enfermedad.

S�. Escucha hombre, te quiero pero
hablar conmigo sobre esto no te va a ayudar.

As� es como las mujeres
resuelven fuera sus problemas.

Hablo en serio. Esto ha sido lo mismo,
desde los antiguos tiempos prehist�ricos.

El hombre y la mujer de las
cavernas tendr�an que explotar.

La mujer toma todo emocionalmente, porque
tiene que sacarlo afuera, gritar y gritar.

Se re�ne con las otras mujeres
de la tribu y bailan.

Se siente mejor.

Pero el hombre, el se�or troglodita,
y all� es donde entras t�.

�Sabes a d�nde va?
- No, dime.

- Entra en la cueva.
- Qu� est�s diciendo?

En la oscuridad. En su peque�a
cueva, con �l, solo.

Y elabora su mierda.

Va con la velocidad de Dios.

�Te gustar�a un baile privado?

�Fuera de sus casas, hijos de
Dios. Salgan y vayan con Jes�s.

No juzgu�is, para que no se�is juzgados.

Y Jes�s dijo que un hombre debe amar a
su esposa como �l ama a su propio cuerpo.

Y el que ama a su esposa, se ama a s� mismo.

Y por esa causa el
hombre dejar� a su padre,

y dejar� a su madre

y se unir� junto con su
esposa como una sola la carne.

Esas son las palabras del Se�or.

Salid de vuestras casas, hijos de Dios.

Salid de vuestras casas y venid con Jes�s.

Y Jes�s dijo a sus disc�pulos:

un hombre debe amar a su esposa
como ama a su propio cuerpo.

Un hombre que ama a su esposa,
se ama a s� mismo.

Y por esa causa, el hombre dejar� a su
padre y dejar� a su madre...

�Puede abrir esa ventanilla?
Est�s un poco borracho.

- Noche dura.
- Supongo que as�.

�Qu�? �Te me� un perro?

Deja de beber ese vino, hombre.
Se te pudrir� el intestino.

- El dolor embota a veces.
- Oh. Est�s adolorido, hombre.

Significa que eres humano. S�lo las
personas muertas no tienen ning�n dolor.

Est�s muy callado. En la ma�ana,
se sale de detr�s de algunas ruinas.

�Por qu� te he levantado?

Oh, eres lindo. Eres demasiado joven para
m�, as� que no te pongas nervioso.

�Te gusta el cine?

- S�.
- Vimos una gran pel�cula de anoche.

Trabajaba Muhammad Ali. �Lo conoces?

- S�.
- Bueno, te ves joven todav�a.

Cuando tengas mi edad, tienes
que hacer esas preguntas.

Fue realmente genial. Cuando
era un ni�o, �l era el m�s grande.

�Sabes por qu� �l era genial?
Porque sab�a c�mo bajar.

Lo hab�an golpeado y golpeado.
Se levantaba enseguida.

Sin duda alguna. No se trata de
sobrevivir con �l.

De eso se trata la vida. Te
derriban y tienes que levantarte.

S�lo tienes que dejar fluya otra vez.
Como un r�o, tienes que seguir adelante.

No puedes levantarte, salvo que seas
un salm�n y puedes nadar contra corriente.

No creo que eso sea algo humano.
Est�s realmente tranquilo.

�Est�s nervioso? Soy una buena conductora.

�Mu�vete! Perd�n, no significa
que lo conseguir� as�.

La gente solo me molesta fuera de aqu�,
porque no pueden conducir. Son de Jersey.

�No eres de Jersey? �De d�nde eres?

�Est�s casado?

- S�.
- Es linda?

- S�.
- La amas?

S�.

�Estuviste fuera toda la noche?
S�.

�Quieres que pare y le compras
algunas flores?

No.

Tienes que llevarle flores.
Tienes que llevarle flores.

Tienes que decirle:
�Lo siento. Comet� un error�.

Porque sabes que fuiste t�,
o estar�as en casa.

Si no hubieras sido t�,
no te habr�as quedado fuera.

Por lo tanto, tienes que ser el gran
hombre. Tienes que mantenerte en pie.

Y aun cuando ella diga ��Vete!�
Porque las ni�as blancas son dram�ticas,

Tienes que volver y quedarte con ella.

- Tengo que tener �xito, �eh?
- Tienes que tener �xito.

Y hacerte cargo de ello. Es all� arriba.
Genial.

Ve esa pel�cula con Muhammad. Te
ense�ar� mucho sobre la vida.

Construy� una casa para m�.

Vigas fuertes con ra�ces en la tierra.

Y paredes suaves, lindas en color.

Y un dosel como cielo.

Las ventanas muestran una nueva vista.

En su reflejo,

mi boca sonr�e, sus curvas relajadas.

Y la cama, suave como una mano de bienvenida.

Quien, en toda mi vida, hab�a hecho
mi casa con habitaciones alquiladas,

las alfombras con costras con las
sobras de los ocupantes anteriores,

ahora tienen una direcci�n.

Esta casa �l la construy�. Esta calle
pavimentada con nuestro amor.

Lo siento.

Yo tambi�n.

�Qu� nos ha pasado?

Me estoy sintiendo un poco perdido,
en estos d�as.

A veces, te odio.

Odio que me dejes.

Te odio cuando vuelves.

Y luego a veces...

ni siquiera deseo que vuelvas.

Solo soy yo, nena.

Mereces lo mejor.

S�.

T� tambi�n.

Y t� tambi�n.

Tal vez perd� mi toque.

�Qu� demonios te ha pasado? Es respecto de
la hora en que volviste. Ponte de espaldas.

- Hola Jon, Leo vino a buscarte.
- Oh s�?

Boy, odio ver como esa cara bonita
estar en tan mal estado.

Un descubrimiento sorprendente
de esta ma�ana en Manhattan.

Un beb�, de apenas una semana de edad,
fue encontrado en un contenedor de basura.

La polic�a escuch� al ni�o

mientras respond�an a una llamada
cerca de la autopista del West Side.

El beb� est� descansando en el hospital.

La polic�a no tiene idea de qui�n es la madre

o c�mo su beb� termin�
abandonado en la basura.

Cambia de canal, Harry. Veamos los juegos.

- �Qu� raro que sea tan grande!
- Enfermo hijo de puta.

- �Qu� tipo de mujer har�a eso?
- Alguien lo sabe.

Alguien sabe algo.

Lo van a pagar.

Creen que Dios cerr� sus ojos
y el mundo lo consigui�.

Nunca me imagin� que ser�a
tan perfecto.

Que cada d�a, podr�a vislumbrar
otro milagro.

Ella me hace sentir humilde. La forma en que
sus ojos brillan como la luna en negativo.

La forma en que su cuerpo llega al
mundo, deseoso de tacto y olfato

y degustar cada parte de ella.

Conf�a por completo como si todo el mundo
estuviera pleno de amor como ella.

Y lo deseo mucho para que se
le haga realidad.

Encabezando nuestro noticiero con el beb�
que fue encontrado abandonado en la basura.

La polic�a hizo el descubrimiento
esta ma�ana.

Un reci�n nacido dejado en un contenedor de
basura cerca de la autopista del West Side.

Los m�dicos dicen que el beb�
tiene contusiones leves,

pero est� descansando c�modamente
en el hospital.

La polic�a no sabe cu�nto tiempo
el beb� hab�a estado all�,

donde est� la madre, o c�mo fue que su
hijo termin� en el fr�o, solo.

- �Qu� pasa con nosotros?
- �Qu� diablos quieres decir?

- Estamos perdidos.
- T� eres el que se ha perdido.

Vuelve aqu�. No he terminado
contigo todav�a.

Tengo que ir a trabajar.

Si�ntate y habla conmigo, Janie.

Bueno, tengo que tomar
el autob�s. Si yo no...

- Hay otros autobuses o el tren.
- No, realmente no puedo.

Tal vez m�s tarde o algo as�, pero me
est�n esperando, as� que me tengo que ir.

�Cu�ndo vas a dejar ese trabajo de mierda?

Mira lo que te est� haciendo.

Me tengo que ir.

S�lo si�ntate y habla conmigo,
�quieres, por favor?

Me tengo que ir.

Habla conmigo carajo, �quieres? S�cate el
abrigo y habla conmigo.

Esto no va a traerla de vuelta. �De acuerdo?

Lo que me est�s haciendo
no va a traerla de vuelta.

Tienes que hablar conmigo.

- Vamos.
- No era...

No ibas a romper las reglas.
Me lo prometiste.

Est�s rompiendo las reglas. T� no eres...
Para. Para.

Esc�chame. Para.

No puedo hacer esto. Realmente necesita ir.
�De acuerdo? Realmente necesito ir.

Tienes que dejar que me vaya ahora.

- Escucha...
- �D�jame ir, ahora!

�D�jame ir, ahora! �D�jame ir!

Quiero mi abrigo. Quiero mi abrigo.

Quiero mi abrigo. S�lo dame mi abrigo.

- Vete.
- Mi abrigo.

Ponme mi abrigo.

Ponme mi abrigo y...

Me voy. Eso es lo que voy a hacer.

Me pondr� mi abrigo y me voy.

�Vas a estar aqu� cuando yo vuelva?

Me tengo que ir. Me tengo que ir.
Eso es todo, Me tengo que ir.

Ahora es invierno.

Dedos helados llegan por debajo
del marco de una puerta s�lida,

debajo de las mantas que envuelven nuestra
cama, en los ventr�culos de mi coraz�n.

Todo el color se congela. Mi cara,
gris, las calles, grises.

Las voces que se arrastran a trav�s de
las l�neas telef�nicas son grises.

Ninguna savia corre dentro de m�.
Ninguna corriente de vida.

Como Dem�ter, mi hija me ha sido robada.

Exiliado al infierno y condenado a
un mundo de invierno perpetuo.

Por las noches la escucho en mis sue�os.

Ella me llama:

� Mam� �.

Su voz tiene eco a trav�s de la oscuridad y
voy hacia ella como siempre lo he hecho.

Mis grises pies en los pisos
resbaladizos por el hielo de la casa.

Corro de habitaci�n en habitaci�n,
pero cada uno de ellas est� vac�a.

Las paredes cubiertas de escarcha.

La oigo llamarme m�s all� de las ventanas,
pero la puerta est� atascada.

No puedo salir. Estoy atrapada aqu�,

sin ella en el otro lado.

Y ah� est� �l, como un dios fr�gido
y sin compasi�n.

- Pap�, pap�.
- Vamos, Caitlin.

Ven aqu�, calabaza.

� Vamos �, me dice.

Tienes que aceptar.

Pero no es su vientre el que
se volvi� hacia los glaciares.

Ella nunca vivi� dentro de
tu cuerpo como lo hizo en el m�o.

Como todav�a lo hace.

El coraz�n nunca latir� a menos que respire.

El beb� llora hasta que su
madre lo estrecha a ella.

La madre lo estrecha hasta
que se termina el invierno.

Jane.

Ey, Jane.

Los p�jaros oscuros en mi
cabeza baten sus alas...

Y cada sombra en mi cerebro...

Sus gritos levantan los diminutos pelos
a lo largo de mi columna vertebral...

Como escombros hecho a�icos dentro de mi
cabeza y ponen mis dientes en el borde...

est�n atacando, encerrados
juntos en un combate mortal...

Estos son los p�jaros que salpican las
paredes de mi cerebro con sangre...

Me mata ver el dolor en sus ojos.

Pero no fue culpa nuestra, Janie.
No tienes la culpa.

�Qu� puedo hacer?

�Qu� puedo decir?

Muchacho bonito, �sabes qui�n es?

�Por qu� nunca me viniste
a ver con el dinero?

�Crees que estoy jugando?

S� d�nde est�s y Voy a usar tu
cabeza como pelota de b�isbol.

Ella solo...

S�lo necesitaba a alguien
para cuidarla.

Oh Dios!

Es un beb�.

Te quiero.

Est� bien, querida. Est� bien.

S�. Ahora todo va a estar bien.
T.

Todo va a estar bien. S�.

No llores. No tienes que llorar.

Lo siento.

Ven.

Entra. Entra.

Me he dado cuenta que no
me preocupan las consecuencias.

S�lo me preocupaba por ella,
porque no se puede correr por siempre.

No puedo decir donde conducir� esta
carretera. Si es el principio o el fin.

Todo lo que s� es estoy en
mi camino hacia ti.