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�Qu� hac�as en casa de Berger?
�Te env�a Kerlac?

- No s� qui�n es ese.
- �Quita! Eres una mentirosa.

Kerlac no se va a salir con la suya.
�Que te quites!

�Estate quieta! �Para!

�Para! �Para! �Joder!

Loulou.

�Qu� pasa?

Cu�ntame.

- He matado a un hombre, Lydia.
- �Qu�?

- Parecer� un accidente. Iba borracho.
- �C�mo sab�a que estabas all�?

No me buscaba a m�.
Buscaba a Antoine Kerlac.

Hostia, Lydia.

Di esa direcci�n al cuerpo.

Nadie m�s sabe
que Antoine Kerlac vive all�.

No.

- Quien mat� a Berger tiene un topo.
- �Qu�?

Lo hemos encontrado
medio quemado en el coche.

�Crees que ha sido un accidente?
�Hab�a estado bebiendo?

Lo normal, seg�n Jeannot,
que estaba con �l.

Dice que L�on le dijo
que estaba todo controlado.

- ��l no vio nada sospechoso?
- No, solo vio entrar a una chica.

�Y qu� hay del joven Kerlac?

Parece que se ha cre�do la historia
de lo de Berger, y de lo de su padre.

Vig�lalo de cerca
y mantenme informado.

Por c�mo se ha curado la cicatriz,

C�leste Dumont estuvo retenida
al menos cuatro d�as antes de morir.

- �Podr�an haber sido m�s?
- Podr�a ser. No lo puedo asegurar.

El cuerpo ha estado
entre tres y cuatro meses en el agua.

Pero la morfina hallada se inyect�
48 horas antes de que muriera.

Sin duda para tenerla a su merced
mientras estaba inconsciente.

M�renle las plantas de los pies.

Hay restos de l�quenes y helechos.

Estaba cerca de un bosque
con el suelo h�medo.

Hay muchos.
No s� si eso nos ser� de ayuda.

Estoy de acuerdo,

pero voy a intentar identificar
las part�culas arcillosas.

Y otra cosa: hab�a cemento
en el agua que ten�a en los pulmones.

Hab�a una cementera cerca, muchachos.

S�. O una cantera. Es incre�ble
lo que nos cuentan los cad�veres.

Totalmente, doctor.

Deber�amos darle las gracias a Ketoff
por la calidad de las fotos.

No se pase.

Se�ores... Les toca.

- Gracias por venir, Kerlac.
- Perd�n, jefe.

Alberti, busca para qui�n pos� C�leste
justo antes de Carnaval.

Ren�, busca cementeras cerca del Sena.

Y t�, Max, quiero saber
qui�n hizo esta foto.

Tengo un sospechoso, de unos 50 a�os,
y que va en limusina.

- C�leste lo ech� de su casa.
- �C�mo piensas encontrarlo?

Por su ch�fer,
un anamita llamado Phuong.

�Un anamita? �Eso qu� es?

- Un indochino.
- Pues vaya.

Se ve�a con una norteamericana.

- �Te he dado permiso para hablar?
- Perd�n, jefe.

Es que podr�a ser Jenny Meyer.
Monta fiestas con pintores y modelos.

�De d�nde has sacado la informaci�n?

Una amiga la conoc�a de L'Apollo,
un club de jazz.

- C�leste ten�a cerillas de ese club.
- S�.

- De hecho, fui all� anoche.
- Y hoy te has dormido.

Max se har� cargo
de la norteamericana.

Y t� buscar�s al ch�fer anamita.
Ve al Ministerio de las Colonias.

All� encontrar�s toda la informaci�n.
Y si vuelves a pasar la noche fuera,

aunque sea por una buena causa,
ponte el despertador.

�Una amiga de un club de jazz?

�Qu� opina tu enfermera de eso?

Es broma.

Voy a por la norteamericana.

- Vive en el bulevar Port Royal, 92.
- Gracias. Te mantengo informado.

- He o�do que ha muerto un compa�ero.
- S�, lo hemos sabido por la matr�cula.

- �Un accidente?
- Beb�a mucho.

Se sali� de la carretera.
No hubo testigos.

Pero bueno, siendo alguien de casa,
lo investigaremos a fondo.

�Lo conoc�as?

�A L�on Bonnin? Creo que no.
Trabajaba en seguridad oficial.

�Qu�, inspector Kerlac? �Todo bien?

- �Qu� tal, �mile?
- Bien.

- �Eso es del archivo?
- S�, �por qu�?

- Si necesito algo, �qu� hago?
- Me lo dice y se lo traigo.

- �Qu� necesita?
- El caso de Ciseaux del 18 de enero.

Qu� casualidad.
Justo me lo pidi� Ventura ayer.

- Se lo pedir� cuando vuelva.
- No, ya se lo pedir� yo.

- �Puedo?
- C�mo no.

Usted no tiene hambre, yo s�.
No le ha dado ni un bocado.

- �Me estaba vigilando?
- Le estaba observando. Es diferente.

Ni come ni lee.
Est� totalmente perdido.

- Podr�a ayudarle.
- No lo creo.

- Y no me va a sacar nada.
- Venga, Kerlac.

Somos hombres de bien, �no?

Ser� un intercambio. Todos ganamos.

Sobre todo usted, por lo que dicen.

�Eso le dice Pardieu?
Normal, le llevo ventaja.

Bueno, me voy para poder alcanzarle.

Le va a costar, y m�s si no le cuento
cosas de C�leste y sus amigas.

- �C�mo sabe c�mo se llamaba?
- Tengo mis fuentes.

Conozco a una amiga suya,
una tal Gis�le, una belleza.

�Ah, s�?
�Y que le ha contado esa Gis�le?

Que era modelo.

- Eso ya lo sab�a.
- Podr�a sacarle m�s informaci�n.

�En qu� anda usted?

Estoy investigando a Indochina
porque no puedo con Asia.

No he comido
porque la carne estaba pasada.

Usted no sabe nada.

�Y si le digo que Gis�le se fue a casa
anoche con un pintor llamado Valbonne?

Un yonqui de Montparnasse.

Si le presiono, me dir� d�nde est�
y podr� preguntarle acerca de C�leste.

�Qu�? �Trabajamos juntos?
�O prefiere leerlo en el peri�dico?

Ya veremos.

Ya est� todo visto.

- �Todo bien?
- Genial.

He mirado lo de Indochina.
�Has visto a la norteamericana?

No estaba en Par�s.

Pero el portero ha reconocido
a C�leste. As� que volver�.

- Volveremos. Somos un equipo, �no?
- Que s�, tranquilo.

�Tienes al ch�fer o qu�?

Me van a mandar una lista,
pero aqu� viven muchos anamitas.

Y muchos se llaman Phuong.

Muchos tienen apodo.

As� que en el registro
puede aparecer otro nombre.

- Hay que comprobarlos todos.
- S�.

Como conduce una limusina,
primero ir� a los barrios ricos.

Voy a ello.

- �Qu� crees que busca?
- Ni idea.

Est� investigando
la muerte de la chica del Sena.

C�leste.

�S�? �Qui�n es?

- O�d...
- �Cre�as que te ibas a librar?

Me debes 800 francos. Paga.

Sabes que te pagar�.

Tienes 48 horas.
O quemar� esto contigo dentro. �O�do?

Inspector Kerlac.

- Tiene el examen m�dico.
- �Ahora?

- No me hab�an dicho nada.
- �Qu� pasa?

�Llevas los calzoncillos sucios?

Tranquilo, es una formalidad.
Ojos, pulmones, mear en un tarro...

- Y ya est�.
- Ve. No les hagas esperar.

Por aqu�.

- Suerte.
- Gracias.

Hola.

Antoine m�o. Ten.

Ve empezando. Ahora voy.

Bueno, desv�stete.

Tu padre estar�a content�simo

de verte seguir sus pasos.

A ver...

Cuatro a�os en la guerra,

algunas heridas, pero todo bien.

Bueno, ahora lo veremos, Kerlac.

Venga. Espabila y desv�stete.
Nos est�n esperando.

No soy Antoine Kerlac.
Soy su hermana, Louise.

�Pero qu� dices?

�A qu� juegas?

Es una cuesti�n de vida o muerte.

- �Doctor!
- �Un segundo!

D�jeme explic�rselo, por favor.

- Es una urgencia, lo siento.
- Un minuto.

Expl�cate.

Estaba en casa de Berger
cuando lo mataron.

Eran de los nuestros. Me vieron.

Te has metido en un pozo.

Te viene de familia.

Podr�a delatarte.

�Sabes?

�Ya voy!

Bueno...

Louise...

Vas a venir a mi casa a las siete.

Rue de Passy, n�mero 16.

�Valbonne, abre!

Modi nos ha dicho que estabas aqu�.

Estoy con la se�ora Vandel.
Quiere ver tu obra.

- �No hay nada que ver!
- �Abre, por Dios! �Insiste!

Respeto su radicalidad.

- Habla en su favor.
- �De verdad?

Su marido no opina igual.

�l tiene sus opiniones y yo las m�as.

�Nos dejas pasar?
Estaremos mejor dentro.

Quiero un retrato.

Son 2000 francos.

Por adelantado.
Sin devoluciones. Le guste o no.

�Est�s loco?

�Algo m�s?

El estilo y los colores que quiera.
Sin restricciones.

Un adelanto.

Ma�ana le pago el resto.

Impasse des Peupliers. �A las 11?

Bueno...

Tienes agallas, como tu padre.

�Sabes?

Siempre pens�
que su muerte fue sospechosa.

Porque caer en una trampa
de unos matones no era su estilo.

- �Cree que lo mataron?
- S�.

Y, como con Berger,
se ha culpado a un inocente.

- O a una inocente.
- Pero �por qu�?

Una noche, justo antes del asesinato,

una mujer se le acerc�
cuando sal�amos de un restaurante.

Parec�a que la conoc�a.

�Una mujer?

Ten�a unos 50 a�os y parec�a triste.

Hab�a perdido a su hijo en la guerra.

Quer�a ense�arle
unos documentos a tu padre.

�l le prometi� que ir�a a su casa
y les echar�a un vistazo.

- �Sabe d�nde puedo encontrarla?
- Ni idea.

Estaba decidido a averiguar la verdad,
pero no le cont� nada a nadie.

Excepto a Berger.

Debi� de seguir con la investigaci�n
y tambi�n lo pag� con su vida.

Entra, querida.

La cena estar� en 30 minutos.

- Delphine, mi hija mayor.
- Encantado.

Cari�o, dile a tu madre
que ponga un cubierto para Antoine.

El hijo de nuestro amigo Kerlac.

Le encantar� verte.

Y has cambiado tanto...

Has tenido suerte
de salvar el pellejo, Louise.

- Pero hacerte pasar por tu hermano...
- �Va a delatarme?

Me encantar�a ver la cara de Pardieu,
pero no dir� nada.

- Aunque solo si tienes cuidado.
- Me est�n vigilando.

- He visto que me segu�a un coche.
- No hagas nada.

Que no piensen que sospechas algo
de lo de tu padre o de lo de Berger.

Si se ha vertido tanta sangre,
es que el asunto es grave.

As� que no te pongas en peligro
y d�jalo estar. Al menos, por ahora.

- Cuidado. Las alb�ndigas.
- Buenas noches.

�Antoine! Madre m�a, cu�nto tiempo.

Pero qu� hombre m�s guapo est�s hecho.

- Gracias por invitarme a cenar.
- De nada, es un placer.

�Has visto ese cuadro?
Lo pint� tu madre.

Cen�bamos mucho en casa de tus padres.
Menuda alegr�a de vivir.

Tras su muerte,
tu padre no fue el mismo.

Por cierto, �c�mo est� tu hermana?

- Se ha ido a vivir a Argelia.
- �Ah, s�?

Qu� aventurera.

- �Y no est�s muy solo aqu�?
- Estoy prometido.

- Te ayudo.
- No, d�jalo, Antoine.

Somos muchas para servir la cena.

- �Nos sentamos? Ten, si�ntate.
- Gracias.

Querida, menuda maravilla.

Est�s jugando con fuego.

Aunque te vaya bien con los compa�eros
y el doctor no diga nada.

Tengo que advertirle a Antoine
sobre el periodista ese, Ketoff.

- �Sabe el doctor que te siguen?
- S�.

Me ha dicho que no me meta en l�os.

- �Y sabe lo del muerto?
- No, no he podido cont�rselo.

�Ves? No deber�as salir.

- Gis�le les da igual a ellos.
- Ya, pero tengo miedo.

La verdad es que te gusta
ir de puta por los bares.

S�, �y sabes por qu�?

Porque, por un momento,
no pienso en nada m�s.

�Roman!

Hola, guapa.

Te ha llegado esto.

- Una carta de Granville.
- Gracias.

�Qu� haces aqu�?

Yo tambi�n me alegro de verte.
Tranquilo. Solo ser� un momento. Ven.

- �Conoces a Roman Ketoff?
- �El periodista norteamericano?

Vagamente.

A veces se pasa por aqu�.

- �Qu� le pasa?
- Que me est� buscando.

A Gis�le, vaya. Nos vio ayer
y quiere que le digas d�nde est�.

- �Qu� le digo si le veo?
- �Est�s o no?

- Dile que te acostaste con ella y...
- �Eh!

�Qui�n te crees que eres, cari�o?
�Ni una sonrisa?

- Ayer te lo estabas pasando muy bien.
- �As� le hablas a una mujer?

No te metas. Esta mujer es m�a.

Sigue so�ando. No fuiste gran cosa.

Me gustar�a invitarte a una copa
y que habl�ramos.

- No tengo nada que decirte.
- �D�nde estabas?

- Vamos a tomar algo.
- �Gis�le! Ven aqu�.

�Te importa?
Tengo que hablar con mi amiga.

P�denos algo mientras.

- �Te has enterado de lo de C�leste?
- S�. Es horrible.

Cre�a que estaba en EE. UU.

- Menudo psic�pata.
- �Sabes para qui�n posaba?

Para muchos. Necesitaba dinero.

�Por? �Crees que la mat� un pintor?

�Qui�n sabe?

A su salud, se�oras.
Me he apuntado en tu lista.

Gis�le, te presento a Man.

Acabo de conocerle, pero va muy bien.

Mira.

C�leste posaba para ese
antes de desaparecer.

Es muy raro. Y siniestro.
Pero paga bien.

- �C�mo se llama?
- Pascin. Vende mucho.

Lo llaman "el pr�ncipe de Par�s".
A la gente le encanta.

�Est�s libre esta noche, Kiki?

- Mi modelo me ha plantado.
- La habr�s asustado.

- No, est� enferma.
- Hoy no puedo, cari�o.

Ya tengo plan, �verdad, Man?

S�, as� es.
De hecho, nos tenemos que ir.

�Ah, s�? Vale.

Antes de que se me olvide:
Jenny monta una fiesta.

�Te interesar�a?
Sidney, el clarinetista,

- estar� en la puerta. Sidney Bechet.
- Vale.

�T� tambi�n posas?
Me vendr�as bien, si te interesa.

- S�, vale. �Nos vamos?
- Perfecto. Tengo el coche fuera.

Desv�stete.

Ahora pongo la estufa.

Deja el chal y t�mbate en el sof�.

Desnuda. Has venido por eso, �no?

Seg�n lo que me pagues.

Sois todas iguales.

�Cu�nto m�s por acostarnos?

Yo no hago eso.

- �Y si quiero follarte aqu� y ahora?
- Me defender�.

Idiota, no me interesa tu culo plano.

A mi amiga C�leste la mataron
y no me fio de nadie.

A tu amiga la mat� el dinero.

Quer�a m�s. Me dej� por un t�o
que le pagaba m�s que yo.

Ya vale. O te desnudas o te vas.

El brazo izquierdo
por encima de la cabeza.

M�s redondeado.

Vale. No te muevas.

�Por qui�n te dejo C�leste?

Ni lo s� ni me importa.

Lo conoci� en Les Ursulines
en Carnaval y no volvi�.

Calla y d�jame trabajar.

�D�nde estuviste anoche?
Ten�a turno, pero te esper�.

- Estaba preocupad�sima.
- Perdona, no pude avisarte.

Te daba por muerta,
pero no pod�a ir a la polic�a.

No. Vi a Antoine y me asegur�
de que Ketoff no fuera tras �l.

�Te aseguraste?
�Has pasado la noche con �l?

�Con Ketoff? No. Pos� para un pintor
que me dej� dormir en su casa.

�Posaste? �Desnuda? No.

- Tienes que cont�rmelo. Yo no podr�a.
- Eso cree una y luego...

Esto es para la casa.
Vete, luego te cuento.

Eso espero.

�Qu�, Kerlac? �Ya trabajando?

- �Qu� tienes?
- He visto a unos seis indochinos.

Ninguno era ch�fer, pero he contactado
con concesionarios de lujo

y tengo algunos nombres.

Buena iniciativa.

Ayer fui a La Rotonde.

Un verdadero noct�mbulo.

La v�spera de Carnaval

C�leste conoci� en Les Ursulines
al hombre con el que ten�a la cita.

�C�mo sabemos que es �l?

Su vecina nos dijo que desapareci�
el d�a siguiente de Carnaval.

Pero, bueno, siempre hay baile
los lunes y los viernes.

Y a las modelos les gusta ir.

Muy bien.

Ir�is los dos.

Nunca se sabe.
Quiz� este hombre tenga un patr�n.

Muy bien, jefe.

�Y qu� opina tu enfermera
de tus salidas?

Le da igual. Adem�s, no est� en casa.
Dos semanas al mes tiene guardia.

Ya, pues yo preferir�a
que no trabajaras sin m�.

- �De acuerdo?
- De acuerdo.

Hola, Valbonne. Me alegro de verle.

Espero que le sirvan los materiales.

�Un caf�?

He tra�do mis pinturas y mis pinceles.
El caf� lo tomo con dos azucarillos.

Si�ntese ah�.

Cruce las piernas.

Levante la barbilla.

Un poco menos.

No se mueva.

- �Podemos hablar?
- Estese callada.

El art�culo es demasiado largo.

Por la tipograf�a, no puede ser
de m�s de 1000 caracteres.

T� deja lo de Berger.
A los lectores ya se les ha olvidado.

�C�mo vas con la costurera?
Eso s� interesa, y a las mujeres, m�s.

Por cierto, �c�mo te va con tu fuente?

Ah� va, pero tengo a una amiga
de C�leste. Le sacar� algo.

Espabila. Quiero tres columnas
con su vida, sus sue�os... Rapidito.

Ya lo tengo. Te lo doy en una hora.

- �Te vas?
- Me deja ir a Estambul.

- Se est� moviendo la cosa.
- �Van a derrocar al sult�n?

Y los aliados se quieren repartir
el imperio. No me lo puedo perder.

- P�salo bien.
- �Es tu fuente?

- Es guapa.
- S�.

- Te voy a echar de menos.
- No lo creo.

Es de los nuestros. Choc� el coche
contra un �rbol y se le incendi�.

Con lo que queda de �l,
ser� dif�cil saber por qu�.

Hab�a bebido. En la chaqueta
llevaba una petaca y un reloj.

Sobrevivieron al fuego.

El reloj...

- �Dices que lo llevaba en la chaqueta?
- S�, �por qu�?

Porque es un reloj de bolsillo.

�Lo has examinado?

- �Has encontrado huellas?
- A�n no. No.

Yo me encargo.

Hola, primo. Cu�nto tiempo.

- �C�mo est� la familia?
- Bien.

- �Qu� tal con el Dr. Paul? �Contento?
- M�s que eso.

Es muy bueno. Estoy aprendiendo mucho.
Gracias. Te lo debo a ti.

�Y Kerlac, el nuevo, qu� tal?

Es bastante bueno. En su primer d�a
el doctor le invit� a una autopsia.

- �Ah, s�?
- S�.

Eso me lo tienes que contar.
Te invito a comer.

Doctor, �quer�a verme?

Era de tu padre, �no?
Lo llevabas en el chaleco el otro d�a.

Y ahora lo ten�a un polic�a calcinado.
�Me tomas por imb�cil?

- No sab�a c�mo dec�rselo.
- �Decirme qu�?

Era o �l o yo, doctor. No tuve opci�n.

Bueno... Los tienes bien puestos.

�Me puedo ir?

Perd�n. No sab�a que cansaba tanto.

- No, siga.
- Luego.

�Puedo verlo?

V�yase de aqu�. Ahora mismo.

- No quedamos as�. Quiero mi dinero.
- No le pienso dar nada por esto.

V�yase o har� que le echen.

Esa es usted.
Tanto si le gusta como si no.

Pareces cansada. �Qu� pasa?

El Dr. Paul ha encontrado
el reloj de mi padre en el cuerpo.

He tenido que cont�rselo todo.

- �Y?
- Se ha enfadado, pero lo ha entendido.

La investigaci�n concluir�

que sufri� un accidente
porque iba borracho.

�Y sabemos qui�n era?

L�on Bonnin.

Trabajaba en el cuerpo de polic�a.

- Todo esto me da mucho miedo.
- �Me ayudas?

�Qu� dicen?

Es Ketoff.

Ni una palabra
de Gis�le ni de Valbonne.

Se ha tragado nuestro numerito
de ayer de La Rotonde.

Tiene talento. El relato que hace
de C�leste es muy entra�able.

Parece muy interesante ese Ketoff.
�C�mo es?

- Tiene dos brazos, dos piernas...
- Te gusta.

Ay, Lydia, por favor. Odio
a los t�os que se creen irresistibles.

- �Y lo es?
- Para nada.

Adem�s, estar�
con dos o tres a la vez.

Y llevar� alianza...

No.

�Ves? Te has fijado.

- Vas progresando.
- Bueno, Antoine no le gustar�.

No, pero Gis�le, s�.

- Yo no soy Gis�le.
- �Seguro?

- Me han dicho que estaba aqu�.
- �Qu� quiere?

- �Ha le�do mi art�culo?
- No estaba mal.

- �Qu�? �Dispuesto a colaborar?
- Esto es un toma y daca.

Ya veremos.

- No se la juega.
- Eso es.

Quiero saber qui�n hizo esta foto.

Eso no lo s�.

Pero por el formato y el encuadre,
s� con qu� c�mara se hizo.

Esperaba m�s, pero �qu� modelo es?

Es una Kodak Vest Pocket.
En la pel�cula se puede escribir.

No se vende en muchos sitios.

�Qu� significa el 0412?

El polic�a eres t�, no yo, Kerlac.

- �Ya nos tuteamos?
- Ahora somos compa�eros.

De acuerdo, con la condici�n
de que no compartas la foto.

- �D�nde estaba?
- Entre las cosas de C�leste.

�La hizo el asesino?

Es posible.
No tardaremos en identificarlo.

Un hombre de unos 50 a�os,
con un ch�fer asi�tico.

Necesito saber qu� tiendas
venden estas Kodak.

Photo-Plait, en Rue Lafayette.

Tiranty, que no est� muy lejos.
Y luego est�n Cipi�re y Vaugirard.

Te toca. �De d�nde es el ch�fer?

Antes tendr� que comprobar
las tiendas donde venden Kodak.

VENGA

Tengo los nombres de quienes compraron
una desde que sali� el modelo.

Solo me faltar�a saber qui�n la compr�
en Vaugirard, que cerr�.

Ma�ana mirar� cu�l de esas personas
es propietaria de un coche blanco.

Bien jugado, chaval.

- Quiz� el fot�grafo sea el del coche.
- O el asesino.

La Kodak la pueden haber
revendido o robado.

Hay quien sigue haciendo
lo que le da la gana.

- La c�mara...
- Gracias. Lo he o�do.

- Quiero saber qui�n te ha autorizado.
- Yo. Tendr�a que hab�rselo dicho.

Averiguar con qu� c�mara se hizo
ha sido muy buena idea, Max.

Iba a hacerlo yo, pero cre�
que hab�a que darle algo al nuevo.

Bueno, vamos avanzando.

Interrogaremos a esas personas. A ver
si vendieron o les robaron la c�mara.

Ren�, a por ello.

Jefe, es para usted.

�S�? D�game. Hola.

- Es la �ltima vez que te cubro, �eh?
- S�. Gracias.

Ten cuidado
con lo que le cuentas a Ketoff.

Nada importante.
Y nos est� ayudando, �no?

- Ese solo se ayuda a s� mismo.
- Si t� lo dices...

�C�mo lo sab�a?

No se nota que tengo sangre negra.

No lo sab�a.

Era como si estuviera ah�,
sin que se viera.

Y as� es.

Mi familia es de las Antillas.

Mi madre era mestiza.

Una ni�a mulata.

�Qu� m�s ve en m�?

�Adem�s de su dinero?

El cuadro no est� acabado.

Ayer me alter� mucho.

El retrato es magn�fico, Valbonne.
Inst�lese el tiempo que haga falta.

- No necesito mucho para acabarlo.
- D� rienda suelta a su talento.

Le puedo aportar mucho.
Reconocimiento.

�xito. Y todo lo que eso conlleva.

No lo dudo.

Pero a m� no se me puede enjaular.

�Se�oritas?

- S�, venimos con...
- Tranquilo.

Las se�oritas est�n conmigo.

- Hola, Sidney. �Qu� tal?
- Hola. Bien.

�Jenny!

- Hola.
- Hola.

Has venido acompa�ada. Bien hecho.
Tu amiga es muy guapa.

- Gis�le.
- Bienvenida a mi casa.

Gracias.

Ven, Kiki. Me han preguntado por ti.

- Te echaba de menos.
- No os vay�is sin m�.

Claro, ven.

- Hola, �quiere bailar?
- Hola.

- Creo que a mi jefe no le gustar�a.
- No le ver�.

Es que... De hecho, est� ah�.

Pues qu� pena.

- �Qu� buscas? �O a qui�n?
- Nada. A nadie.

Mira, guapa. Aqu� venimos a disfrutar
y a desmelenarnos.

Pero, al salir, nos olvidamos de todo:
de lo visto y de lo hecho.

�Entendido?

Eres preciosa.

Tambi�n me gustan las mujeres,
�lo sab�as?

- Enhorabuena, Jenny.
- Edouard. Qu� ganas ten�a de verte.

�C�mo es que siempre te veo
rodeada de belleza?

Placer para la vista.

Espero que no solo sea para la vista.

Es Gis�le.

�Qui�n es el hombre
que est� con Jenny?

Un ministro a quien le gusta
la carne fresca.

�A ti tambi�n te ha hecho algo?

- �C�mo que tambi�n?
- Es que...

Un d�a, en La Rotonde, Jenny lo trajo
y C�leste se puso muy nerviosa.

- Se fue.
- �Ah, s�?

- �C�mo se llama?
- Rebeyrol o algo as�.

�Por qu�?

Chicas, no os qued�is aqu�.
Venid conmigo.

- �A d�nde van?
- A hacer maldades.

MASAJE ORIENTAL

�Te gusta?

C�leste.

� Sincronizado y corregido por MarcusL �
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