All language subtitles for Tiempo de amar, tiempo de morir (1958) (Dual+Subt.ESP-ING)ESP

TIEMPO DE AMAR,
TIEMPO DE MORIR.

FRENTE GERMANO-RUSO - 1944

Presente.

Desaparecido.

Desaparecido.

Presente.

Segunda compa��a: 31 presentes,
87 muertos, heridos o desaparecidos.

Los tenientes Kleinau y Hesse,
muertos.

Cuarta compa��a,
primera y segunda secci�n informando:

29 presentes, 42 muertos...
heridos o desaparecidos,

El teniente Vogel, entre ellos.

Quiz�s algunos se nos incorporen.

Esper�moslo.

Traten de instalar
a sus hombres aqu�.

Sargento Muecke,
que rompan filas.

�Batall�n, rompan filas!

�C�mo se llama este pueblo?

No lo s�.

Ten�a un nombre, la primera vez
que lo pasamos.

Y gentes viviendo en sus casas.

Estamos aqu� tanto, que
deber�amos pagar alquiler.

Cuando pasamos la primera vez,
hac�amos 150 km diarios,

Era la gran ofensiva.

�Y ahora la gran retirada, no?

�Es eso, Graeber?

S�lo he dicho que aqu�
estamos otra vez.

En retirada.
Eso es lo que tratas de decir.

Deja de buscarle,
las cosquillas, Steinbrenner.

El �nico que ha hablado aqu�
de retirada has sido t�.

Los dem�s ya sabemos que
todo est� bien.

Que aplastaremos al enemigo
este a�o.

Siempre los aplastamos, al menos
un par de veces al a�o.

Immerman, tu bocaza te
va a mandar un d�a al infierno

Saldr� ganando con el cambio.

Instalaremos nuestras posiciones
en esa cueva de ah�.

Gracias por haberle callado.

�ndate con cuidado.
Es un topo de la Gestapo.

Si te denuncia,
ya te puedes despedir de tu licencia.

�Mi licencia? Siete meses hace que la espero,
�me parecen siete a�os!

- �Immerman?
- �Qu� pasa ahora?

Se acerca la primavera.

S�, se nota..

El sol los desentierra.

Hirschland, �t� no has
hecho el frente ruso, a�n?

Lleva aqu� tres semanas,
y todo le sorprende todav�a.

Lo s�.

Nuestra primavera son hojas,
flores...

Aqu� llega m�s tarde.
Primero hay que escarbar en el fango.

D�jale, Sauer.

Es un alem�n.

Desenterradlo, y con cuidado.

Ya no va a sentir nada.

Es uno de los nuestros.

Eso no le har� m�s sensible.

Debe estar aqu� desde enero.

La gran tormenta de nieve
cubri� todos los cuerpos.

A los muertos de enero
se los comieron los lobos.

Este es un muerto de noviembre.

- Enero.
- Noviembre.

Es de nuestro regimiento.

Llamad al capit�n Rahe.

Con cuidado, es un oficial.

A�n as�, no ser� m�s sensible.

Es Reicke.

Parece llorar.

Es por la nieve.
Se derrite en sus ojos.

Es el teniente Reicke.

Enterradlo en el cementerio.
Con una cruz.

Y mandadle sus cosas a la familia.

Tenemos que fusilar a cuatro rebeldes.
Necesito voluntarios.

Voluntarios.

Yo me presento.

Elija los dem�s y
tome el mando.

No quedan oficiales.

A ver, para el pelot�n de ejecuci�n

Immerman, Sauer, Hirschland,
Maybach, Graeber...

Hacedla m�s grande,
para que est�is m�s c�modos.

�Obligarnos a eso!

�Desde cuando los soldados
matan a civiles?

Ni�gate y
te fusilar�n a ti.

�Ser�n rebeldes de verdad?

Ese no es nuestro problema.
Obedecemos �rdenes. Y punto.

la excusa de siempre,
sea lo que sea que hagamos.

�Pelot�n!

M�s gallard�a
Y menos charla.

Ten�is �rdenes que cumplir.

Sin discutir ni protestar.

Tirar� por encima de sus cabezas.

Eso no les va a ayudar.

Ya se les ha hecho de todo.
Esto es s�lo como volver a empezar.

Es como si les ejecut�ran dos veces.

D�jadme a m� la gru�ona.

�Qu� es lo que quiere?

No quiere nada. S�lo les maldice.

A ustedes y a todos los alemanes.

�C�llate!

�Que te calles, maldita loca!

�Atentos!

�Preparados!

Hirshland.

Deja de temblar.

Apunten.

�Fuego!

�Traigo vodka!

Me la ha dado el sargento,

Para premiar a los del pelot�n.

Vodka de la buena,
�no quieres?

L�rgate,
tratamos de jugar a las cartas.

- �Sauer!
- Voy.

�Y qu� le digo al sargento?

�Dile lo que quieras!
Deja eso y l�rgate.

- Sauer, para ti.
- No grites, da �l.

Como quer�is pandilla de idiotas.

Esto no va a impedir que los otros
peguen un buen trago.

Largo.

B�betela t� y no dejes
ni gota.

Maybach, pon la radio.

�Apaga eso inmediatamente!

Son como viejas arp�as
dispuestas a destrozarse entre s�.

Es por culpa de la ejecuci�n.

�Enci�ndela otra vez!

�Int�ntalo y ver�s!

Es una transmisi�n oficial,
tenemos �rdenes de escucharla.

No estoy de humor.

Y ni se te ocurra perder
el tiempo denunci�ndome.

Las cosas han cambiado.

Soy ametrallador,
algo m�s �til para el ej�rcito

que los de tu especie.

Abro con veinte.

Paso.

�He dicho veinte!

Nos est�n machacando.
Si esto continua as�, tendremos visita.

�Estamos de guardia o jugamos
a las cartas?

Abro con veinte.

Ma�ana volvemos al frente
si es que a�n hay alguno.

No te preocupes por tu permiso.

Tal y como va la cosa,
vamos a volver todos.

- �Juegas o parloteas?
- �Quieres que me calle?

Yo s� que quiero. �C�llate!

�Pues c�llate t�, entonces!

�Qu� est� pasando aqu�?

Nada.

Una mala mano.

L�stima, un buen vodka
perdido.

Estoy en decadencia.

En Francia escup�a bien lejos.
Ahora lo hago como un civil cualquiera.

Preferir�a ser un civil,
aunque escupiera mal.

Pres�ntate al capit�n.

Tu permiso ha llegado.

- �Termina la mano!
- En tres semanas.

�Qu� es lo primero
que har�s?

Despiojarme, darme un buen ba�o,
dormir en una cama limpia

y olvidarme de la guerra.

- �Eso es todo?
- A m� se me ocurrir�an mejores cosas que hacer.

�Qu� est�s haciendo ah�?

�Se beben la vodka del sargento, no?

No.

Y aunque se lo estuvieran bebiendo,

nada cambiar�a,
eso no resucitar�a a nadie.

Crees que vales m�s que nosotros,
con tus grandes ojos inocentes.

Pues no es tan sencillo.

�Qu� est�s mirando?

No lo pienses m�s.
�Olv�date!

No s� c�mo olvidar.
�Lo sabes t�?

No, no lo s�.

Y no quiero hablar de eso.

�No quiero hablar de esta guerra
durante mucho tiempo!

Graeber.

Descansa.

Tu permiso.

Muchas gracias, se�or.

�Cu�ndo fue el �ltimo?

Hace m�s de dos a�os.

Hirschland, se�or.

Est� muerto.

Habr� sido un accidente.

No, el muy cobarde se suicid�.

�Muecke!

Haga un informe.

Muerto por accidente.

Llevad al chico a la iglesia.

No pierda el tiempo en salir.

Si esto se mueve,
los permisos ser�n cancelados.

Pero si se va, se habr� ido.

�Cu�nto es?

Si preguntas es que no te lo
puedes permitir.

Tengo jab�n de verdad, tra�do de Francia.

Siempre lo mismo...

...al pr�ximo que me pregunte
cu�nto es...

le deg�ello.

Para celebrar vuestra vuelta a casa,
el F�hrer ha decidido

ofrecer un paquete de v�veres
a cada uno que tenga permiso.

As�, vuestras familias ver�n
lo bien que se os trata en el frente

que ten�is tanto de comer
que hasta os sobra.

Por lo tanto, es vuestra
responsabilidad, tranquilizarlos...

�Tranquilos, son de los nuestros!

Ten�is la obligaci�n
de animarlos.

Revelar nuestra posici�n
ser� considerado traici�n.

Criticar, es traici�n.

No deber�is revelar nada
de nuestros combates.

�Nada!

�Entendido?

Los licenciados para Colonia.
que levanten la mano.

Los accesos a Colonia est�n prohibidos.
Los permisos quedan anulados.

Tengo a toda mi familia ah�.
�Es que pasa algo?

Los licenciados para Hamburgo
y Bremen,

que levanten la mano.

Comprobad vuestros papeles.

Y lavaos y despiojaos.

Por fin estamos a casa.

Llegar� para la hora de comer.

Y no lo har� en una escudilla,
sino en aut�ntica porcelana.

�Bremen, abajo todo el mundo!

�No llega a la estaci�n central?

Tendr� que hacer el resto a pie.

El mismo caballo desde que ten�a siete a�os.

Cuidado, las paredes se pueden
caer sobre su cabeza.

�D�nde est� el n�mero 18?
Necesito encontrarlo.

�Qu� d�nde est� el 18?

"Estaba" es la palabra de moda.
�No lo sabe?

�En qu� agujero ha pasado el invierno?

Estaba en el frente.

�Esto es el frente!

Tuvimos seis bombardeos
en diez d�as.

Ustedes, digamos que
est�n en posici�n avanzada,

bien escondidos.

Y nosotros, aqu� enterrados.

Y mi mujer y mis hijos ya lo est�n para siempre.
Est�n muertos.

El 18, estaba por ah�.

�Hay alguien ah� abajo?

No. Cavamos para estar en forma.

Busco a mis padres, los Graeber.

�Est�n ah�?

�C�mo podr�a saberlo?

�R�pido!
Empieza a faltarles el aire.

Somos suficientes.
No se moleste.

Iremos m�s r�pido sin usted.

Este no es el 18, sino el 16.

Aqu�l es el 18.

No queda nada.
Pierde el tiempo.

Sus papeles.

�Viv�a en el 18?

Aqu� nac�.

�Se salvaron mis padres?

Ni siquiera sabemos si a�n
estar�n ah�.

Vaya a ver si dejaron alg�n
mensaje en la puerta.

Conozco todos esos mensajes de memoria.

"Heinrich, re�nete con nosotros
en casa del t�o Hermann".

"Irma ha muerto. Mama. "

�Es usted Heinrich?

�O es Otto?
"Otto, estamos en la escuela de primaria. "

�D�jele en paz!

�Ninguno para usted?

No, no sab�an que volver�a.

Les encontrar� de alguna manera.

Esta noche no.
Ma�ana podr� buscarlos.

Estar�n inscritos en alg�n sitio,
si a�n viven.

Buenas noches.

Ning�n Boettcher. Siguiente.

�Ning�n Boettcher?
Entonces qui�n soy yo, �Don Nadie?

Siguiente.

Graeber, Paul y Marie.
18, Hakenstrasse.

�Vaya barullo, forman esos!

Los bomberos destrozan
lo que no ha ardido.

Sin el m�s m�nimo respeto
por los papeles oficiales.

Graeber, Paul y Marie.
Hijo: Ernst.

�D�nde est�n?

No tiene por qu� gritar.
Aqu� s�lo tengo su direcci�n.

- Mire en personas desaparecidas.
- Voy.

�Y en aprovisionamiento?
Si viven, tienen que comer.

Ya fui,
y tambi�n a los hospitales.

�Cerramos!
Vuelvan ma�ana.

Estas flacuchas,
siempre d�ndote lecciones.

Nadie sabe nada en ninguna parte.

He pasado todo mi permiso
buscando a mi mujer.

Yo estoy empezando.

Espera, espera.
Seamos m�s estrat�gicos.

Tu preguntas por tus padres y por mi mujer
y yo har� lo mismo.

Tendremos el doble de eficacia.

Mi mujer se llama Alma.
Mejor ap�ntalo.

Alma Boettcher.

�Menuda tabla de planchar!
No como mi mujer, mira.

�Una aut�ntica mula de carga!

Furiosa o feliz,
hace temblar las paredes.

Me alist� para poder descansar.

Una mujer como esta
me espera en alguna parte,

y yo paso mis noches
tap�ndome con cartones entre soldados.

�Sabes d�nde buscar?

Yo me tengo que presentar
en el cuartel de pernocta.

Ah� estoy tambi�n yo.

Har� que entres en la enfermer�a.

Pero si estoy bien.

Tambi�n yo. Pero puedes enfermar
sin necesidad de m�dicos...

�Un m�dico! El Dr. Kruse
es el m�dico de mi madre.

Seguro que sabe d�nde est�.

Nos vemos en el cuartel.

- �Est� el doctor?
- Ya no ejerce.

�A�n as�, podr�a verle?

Ya no vive aqu�.

- Pero esta es su placa...
- Debimos haberla quitado.

�Qui�n est� ah�?

�Es para m�?

�Elizabeth!

�Es usted Elizabeth Kruse?

�Qu� es lo que quiere?

No quisiera molestar,
pero su padre...

Ah, es por �l... Venga.

Yo le conozco.

�No fuimos juntos al instituto?

S�, soy Ernst Graeber.

Ernst Graeber, claro.

Hace tanto de eso.

Siete a�os, al menos.

Yo casi tampoco te reconoc�.

Has cambiado mucho.

�Se�orita Kruse!
�Es que no tiene verg�enza?

Un hombre en su habitaci�n,
�qu� descaro!

�Qui�n es ese cocodrilo?

Una alojada oficial.

Las autoridades la pusieron aqu� cuando
perdi� su casa,

con otras tres m�s.

�Y t� no puedes decir nada?

Yo debo considerarme afortunada
de poder seguir en mi habitaci�n.

Ser miembros del partido
les da ciertos privilegios.

Seguro que escucha tras la puerta.

�Qu� sabes de mi padre?

�De tu padre?

Nada. �Por qu�?

�No sabes nada?

Volv� de Rusia ayer por la noche.

Esperaba que �l sabr�a

d�nde est�n mis padres.

Mi padre no est� aqu�.

�Le ha pasado algo?

No, nada.

Simplemente no est� aqu�.

Lleva cuatro meses fuera.

No me ha dicho por qu�
ni d�nde estaba.

Esperaba que t�
supieras alguna cosa.

Pero no.

Lo siento,
no s� nada sobre tu familia.

Ser� mejor que te marches.

Llegan m�s pronto que
de costumbre esta noche.

�Primera alerta!

�Apaguen todas las luces!

�Vayan todos al refugio!

Con calma.

�Comprendido?

�Todo el mundo al refugio!

Es perejil.

Son las �nicas plantas
que he encontrado.

Necesito algo verde
y delicado...

- No tenemos mucho tiempo...
- El refugio est� en el s�tano.

Apres�rate,
o te quedar�s sin sitio.

Hay tambi�n un gran refugio, en la plaza.
Sigue a la multitud.

Yo prefiero esperarte.

�Pero es un buen momento
para ponerse a regar?

No quiero ir a empujones.

Como todos ellos.

Como jefa de barrio,

informar� que
no han ido al refugio.

En el ej�rcito se aprende al menos
a refugiarse en caso de ataque.

- Hazlo.
- No te enfades.

No me enfado.

Es s�lo que me niego
a tener miedo.

In�til, ya tengo miedo por los dos.

Las bombas caen a ciegas.

Odiar a tu jefa de barrio
no es ninguna raz�n...

No es eso.

Esto es todo lo que tengo,

incluso si es insignificante y risible,

para preservar lo
que me queda de libertad.

Si yo no puedo, otros podr�n.

Eres una chica muy extra�a.

Me he prometido no correr.

Muy bien.

Vayamos.

Avancen al fondo, por favor.

Hola, me alegro de verle.
�Se han tomado su tiempo?

Me falta el aire.

Hay que aprender a
no respirar durante los bombardeos.

Cuesti�n de sentido com�n.

�Lo notas?

Es el miedo.

�Se�ora Langer?

�Se acuerda de mi?

Ernst Graeber.

�Sabe d�nde est�n mis padres?

Est�n muertos.

Como mi Lena y mi August.

�Usted los conoc�a, no?

�Qu� ha sucedido?

�Cu�ndo?

�Usted lo vio?

No hab�a nada que ver.

Solamente fuego.

Fuego y gritos.

No pude ver a mi Lena.

No me dejaron verla.

�Por qu� lo han hecho, Ernst?

La se�ora Langer...

No le entiende.

�Y usted?

�Y usted?

Si usted lo entiende,
es que no vale m�s que...

aquellos que han provocado todo esto.

- Dice que mis padres est�n muertos.
- Ella lo ignora.

Cree que todos los que no est�n
aqu�, est�n muertos.

Porque nuestros hijos lo est�n.

Dijo cosas...
Nos acus�.

�Usted ha visto a mis padres?

Har� 2 o 3 semanas, por la calle.
Despu�s no.

�Le pareci� que estaban bien?

Estaban vivos, Ernst.

Lo siento, Se�or Langer.

Lo siento por sus hijos.

Se alejan.

�Ten�an noticias de tus padres?

Nos hemos librado de una buena,
se han ido a otra parte.

�Arnold?

- �Has apagado la cocina?
- No lo s�.

No lo has hecho.
La cena va a estar carbonizada.

La vida vuelve a la normalidad.

Acerqu�monos a la puerta,
para salir pronto.

La Se�ora Lieser no ha vuelto.

�C�mo lo sabes?

Escuchar�amos esos programas de radio
dedicados a subir la moral de la gente.

Pone su radio al m�ximo
en todo el barrio.

�C�mo lo aguantas?
M�date.

No. Estoy esperando
a que mi padre vuelva.

Si me voy, ser�a
como matarlo.

�Aceptar�as salir conmigo
para tomar una taza de t�?

Para un hombre en permiso,
no soy la compa��a m�s divertida.

Buenas noches.

Toma, para ti.

Es comida.
Pens� que...

Conozco estos paquetes.

Toma.

No tengo a nadie a quien d�rselo.

�Ese es tu �nico argumento?

�Cu�l es el problema?

Comida, cigarrillos,
perfume franc�s.

- Los soldados se creen que cada mujer...
- �Eso cr�es?

S�lo quer�a complacerte,

�No comprarte!

No me apetece discutir.

Y menos contigo.
Buenas noches.

Buenas noches, soldado.

Cu�ntame todas tus penas.

Tenga, para usted.

�Qu� piernas tan incre�bles!

Largas, bonitas y delgadas.

�Y qu� ojos!

�Y dientes blancos como
flores de jard�n!

Entonces abr� mi
co�ac Napole�n, de 50 a�os.

Un lujo, pero val�a la pena.

Dos vasos, deliciosos.
�Sagrado Napole�n!

�Y despu�s qu�?

El buen gusto me impide
contaros m�s.

�Eres un cerdo!
Enga�ar as� a tu mujer...

�Imb�cil!

Si ni siquiera s�
si sigue viva.

Si estuviera ah�,
no la enga�ar�a.

Soy v�ctima de la vida militar.
Un m�rtir.

No hemos invitado todav�a
a Graeber a nuestro club.

�La botella!

Est� aqu�.

Aguardiente casero.

Un matarratas,
pero es mejor que nada.

�Dame eso!
El doctor te lo ha prohibido.

Ya no me dejan.

Siempre he nadado en champ�n,
y aqu� tengo "la gota".

Es lo que me salva la vida.

Mejor estar enfermo aqu�
que muy sano en el frente.

�Basta!

Bebo para salvar mi pellejo.

Ser� mejor dejarle hacer
que perder nuestro tiempo con �l

Ay�dame.

Con ella voy por los pueblos
buscando en los cementerios.

�Hay registros?

Un registro te bastar�

para asegurarte sobre tus padres.

Pero yo no estar� tranquilo
hasta que est� con mi mujer.

�Y con sus 100 kilos!

T� puedes tener a la primera chica
que caiga en tus manos.

Pero yo, �d�nde encontrar�a
una mujer como mi Alma?

En el restaurante de abajo.

La camarera pesa m�s de 100 kilos.

100 kilos de grasa temblorosa
como la gelatina.

Da miedo.

A mi Alma,
no podr�as hincarle el diente.

Depende de como se la muerda.

- Alma no es as�.
- Ya s�, ya s�.

S�lo te espera a ti,
como la mujer de Nosseck.

Nosseck, cu�ntale como

todos los bomberos han
ayudado a tu mujer a esperarte.

�Por mi amistad con Nosseck,
te joder�a bien la otra pata!

No malgastes tu permiso
como Boettcher.

Vive la vida.

�Sabes cu�nto durar�?

�Qui�n sabe, cu�ntos d�as?

Tres semanas.

Tu permiso, es lo que dura tu vida.

Despu�s, la muerte te llamar�.

Ya has perdido 3 d�as de 21.

Unos diez a�os de vida normal.

Diez a�os perdidos.

Vamos, salgamos de aqu�.

�Los registros?

Tal vez hasta los hayamos enterrado.

Si contin�an los bombardeos,
no sabr� d�nde meterlos.

Ha probado en los otros cemen...

Sab�a que eras t�

�No reconoces a los colegas?

�Oscar Binding!

�Qui�n si no?
�De d�nde vienes?

De Rusia.

Hay que celebrarlo.

Te invito, un co�ac de primera.
podr�s tomar lo que quieras.

Vente, por los viejos tiempos.

Tomar� ese trago.

Has llevado bien tu vida.
Jefe de distrito, no est� mal.

�Yo, que jam�s aprob�
un examen de historia,

me tienes listo para vigilar
cuando el alcalde ordene!

Precioso, �verdad?

Y es todo m�o,
el hijo de un lechero.

�Qui�n habr�a imaginado que yo,
Oscar Binding,

coleccionar�a arte?

�Qu� quieres beber?

�Co�ac, cointreau, vodka,

ginebra, kummel, vino?

Lo que quieras.

�Qu� te pasa?

Si puedo ayudarte, d�melo.
Ahora estoy bien situado.

Tal vez puedas ayudarme.
Mis padres han desaparecido.

No los encuentro.

Terrible.
Me ocupar� de ello.

- �Algo m�s?
- Eso es todo.

Dalo por hecho.

Al�grate,
arriba ese �nimo.

- Trae unas copas de co�ac.
- S� Se�or Binding.

�D�nde te alojas?

En el cuartel.

- Pasa tu permiso aqu�.
- No puedo aceptar.

Claro que s�.

Aqu�, podr�as tener una
habitaci�n con cuarto de ba�o.

�Hace cu�nto que no has usado
jab�n ni agua caliente?

Me parece como si nunca lo
hubiera utilizado.

Y bien, aqu� est�.

�Qu�, te gusta?

�Por supuesto!

D�jame eso.

- �Bonito historial!
- Quieren que las luzcamos.

�Y esta "condecoraci�n",
la conseguiste en Rusia?

En �frica.

�Has estado all�?
Estoy sorprendido.

Las copas de co�ac.

Y si quieres una mujer,
o muchas, las que quieras,

este es el sitio adecuado.

Ellas asedian la casa.

Mendigando favores
y ofreciendo todo lo que tienen,

incluso aunque no tengan nada.

�Si hubieras visto a la de ayer!

Una magn�fica criatura aristocr�tica,

con el cabello pelirrojo
y un cuerpo de ensue�o.

Me suplic� de rodillas

que sacar� a su marido
de un campo de concentraci�n.

Pero no todo es tan divertido.

La soledad es el precio a pagar
por mi posici�n.

- Si te quedas...
- No podr�.

Si no encontramos a mis padres,
mi sitio est� en el cuartel.

Lo entiendo.
Pero est� tambi�n es tu casa.

Y si necesitas cualquier favor,
tengo contactos.

Eres muy amable.

�Qu� va!.
Los amigos est�n para eso.

�Podr�as sacar a alguien
de un campo de concentraci�n?

Es m�s f�cil entrar
que salir.

Pero no se lo he dicho a la pelirroja.

�Te acuerdas del
profesor Pohimann?

S�. Pensaba ir a verle.

No. Me expuls� del instituto,

porque prefiero a los
j�venes hitlerianos

a sus rid�culos controles.

Cuando he podido,
le he devuelto la bola:

he hecho que lo deporten.

Y ha perdido su puesto de ense�anza.

�l me ha expulsado,
yo lo expulso.

Es de justicia.

�Est� en un campo?

No. Le he dado unos meses.
Sabes que tengo buen coraz�n.

Ahora vive
en las ruinas del museo de arte.

Tuve piedad con �l,
le dej� en paz.

- �Qu� haces?
- Sacrificar mis sales preferidas.

Lilas, el toque final perfecto
para los caballeros.

�No te andas con tonter�as!

Por tus padres

y nuestra amistad.

Tengo que arrestar a dos hombres,
volver� pronto.

�Otro trago?

Una botella de importaci�n.

Hab�a un mensaje para usted,
lo he arrancado.

No es el lugar indicado
para concertar citas.

Tome.

"Ernst, estar� en mi casa
a partir de las 19 h. "

"Elizabeth. "

�Eres t�? Estaba listo
para enfrentarme a un cocodrilo.

Hay toda una conveci�n de cocodrilos.

Quiero pedirte disculpas por lo
de ayer por la noche.

No tengo excusas.
Tuve un car�cter espantoso.

Trat� de controlarme, pero...
Deber�as haberme parado.

Pero eso, �te habr�a gustado.

Llegas pronto.

No he tenido tiempo de cambiarme.

Puedo venir m�s tarde.

Si�ntate,
vuelvo en un minuto.

�Alguna novedad con tus padres?

No, pero tengo una esperanza.

Me he encontrado con un amigo
que ahora es jefe de distrito.

�Eres amigo de un jefe
de distrito?

Lo conozco desde el instituto,
era el hijo del lechero.

Har� lo imposible por
encontrar a mis padres.

�Se supone que debo decirle que no?

Me ha preguntado qu�
pod�a hacer por m�.

Maniobrando bien,

podr�a saber algo tambi�n
sobre tu padre.

Debe ser f�cil para �l.

S�lo tiene que preguntar a la Gestapo,
para salir de toda duda.

Fue �l primero
quien me propuso ayudarme.

Los asesinos siempre descansan.

Algunos echan de menos a su madre
o lloran la muerte de su perro.

Pero un minuto al d�a
basta a los asesinos,

para acabar con aquellos
que caen entre sus manos.

�Est�s ciego o es

no lo quieres ver?

Tiene tanto riesgo o�rte hablar
como atravesar un campo de minas.

Regalo de Binding.

�Nos bebemos la sangre del enemigo
o la vaciamos en el fregadero?

Nos la bebemos.
Si encuentro el sacacorchos.

Mira c�mo lo hacemos en el ej�rcito.

Al menos,
evitaremos la resaca.

La risa te sienta bien.

Gracias a las botellas de co�ac rotas.

Cre�a que ol�a a co�ac,
pero huele a lilas.

Pero no estamos en la estaci�n.

Salgamos un poco.

La primavera no est� tan lejana.

S� donde podr�amos
pasar un buen momento.

�D�nde has estado hoy?

Detr�s de una maquina de costura,
con otras 50 mujeres.

Haciendo abrigos militares.

Yo hab�a dicho que
s�lo sab�a tocar el piano.

- �Entonces por que te mandan coser?
- Es lo que habr�n entendido por "tocar".

Est� cerrado.

Ven�a aqu� con mi padre.

Charlaba con sus amigos
mientras yo me ba�aba.

Hab�a barcos,
m�sica...

�Ernst, nada de vana nostalgia!

Aqu� hay lilas.
�Las hueles?

Sin duda una especie tempranera.
Es dulce...

Soy yo, esa especie precoz.

Nuestro jefe de distrito
me ha ba�ado con lilas.

Se me oler� hasta en la Luna.

Vamos a la orilla.

�La primera estrella!

�Qu� has pedido?

Que no fuera un bombardero.

No lo es.

Es una estrella.

�Qu� ocurre?

Nada.

S�lo pensaba...

Es una locura.

No soy yo misma.

Quien quiera que seas,
estoy feliz de que est�s conmigo,

y verte sonre�r.

Es lo m�s hermoso que he visto
en mucho tiempo.

�Mira ese �rbol!

Est� floreciendo.

Es muy pronto.
No ha florecido ninguno m�s.

Una bomba ha ca�do por aqu�,
y ha debido hacerlo florecer.

Una mitad est� destruida,

y la otra florece a pesar de todo.

Si pudi�ramos hacer
como este �rbol,

creer en la vida y continuar.

Si pudi�ramos...

Trato de tener valor...

Tienes suficiente.

No.

S�lo finjo.

Como todos nosotros.

De acuerdo, te ha enga�ado.

Pero has estado fuera 3 a�os.

�Y ella no te lo echa en cara,
ni te lo reprochar�!

He tomado una decisi�n.
Quiero el divorcio.

Ella nunca aceptar�.

La mujer de un soldado
recibe 200 marcos por mes.

Y un bonito premio de consolaci�n
cuando el soldado se retira.

Haz un servicio a tu ciudad:

vuelve a casa convertido en bombero,

y as� los bomberos podr�n
reemprender el servicio.

�D�jale! �Dejadle en paz!.

�Otra vez sales?
�Siempre con la misma?

Bebamos a la salud del �nico t�o listo
para seguir mis consejos.

T� no.

�Podr�as hacerme un favor?

Busco un sitio especial.

�Siguen existiendo aquellos
que frecuentabas antes?

En tiempos de guerra,
el lujo est� prohibido.

Claro que, los oficiales que aplican
las leyes, necesitan darse lujos.

O sea, que queda uno de esos sitios.

Fui uno de sus mejores clientes.

El Germania, en Linde Platz.

Pero no podr�as entrar
con estas pintas.

S�lo son admitidos los ricos.

Te presto mi nuevo uniforme,
hecho por el taller de un general.

No me ir�.
Y adem�s tengo prisa.

El Germania no abre hasta las nueve.
Tienes tiempo de apa�arlo.

Feldman era costurero.

�Feldman, sal de la poltrona!

Nuestro Casanova necesita ayuda.

Va al Germania.

As� es como se supone que debes ir
para parecerte a mi.

No tienes mi aire distinguido,

pero en la noche,
nadie lo notar�.

El ma�tre se llama Heinz.

Pedir�s vino
Johannisberger Hochsberg de 1937,

Recuerda que eres de Alemania.

Aunque no descaradamente.

Y utiliza un aire suelto,
es decir, remilgado.

Es m�s f�cil morir
que vivir.

Haznos sentir orgullosos.

En caso de problemas, n�mbrame.

Diles que vas a morir ma�ana.

Diles lo que quieras,
salvo tu verdadero nombre.

Esperamos tu informe.

Si su marido se levanta...

Vamos a nuestras cartas.

No entres, tiene visita. Cocodrilos.

�No te has vestido?

Quer�a verte primero.

�Cu�l?

Este es m�o,
estar�a lista en 5 minutos.

Este era de mi madre.

Tengo que arreglarlo,
me llevar� 30 minutos.

Esperar�.

Sab�as que esperar�a.

Buenas noches.
Entren r�pido, por favor.

�Heinz sigue aqu�?

S�, claro.

Me env�a el se�or Reuter.

Tienes un uniforme nuevo muy elegante.
�D�nde has...

Ya no hay lugares as�.

�De verdad estamos en guerra?

Buenas noches, Heinz.

Una mesa para dos.

Es un placer volver a verle.
Tengo una mesa excelente.

Queremos algo fuera del men�.

S�lo tenemos men�.

L�stima.

Tr�iganos entonces un
Johannisberger Hochsberg de 1937,

de las bodegas de G.H. von Mumm.

No muy fr�o.

Ya veo que el se�or es un experto
en todo.

Tenemos un lenguado fresqu�simo.

Servido con manzanas
al perejil y una ensalada.

�Foie gras para empezar?

Nos ponemos en sus manos...

Otto, se�or.

Gracias, Otto.

�D�nde ha aprendido todo eso?

De un tal Reuter.

Es tan gourmet que incluso tiene gota.
Esto es suyo.

Cortado por el sastre de un general.

Gracias a su nombre
nos han dejado entrar.

Se supone que este lugar est� cerrado.

Pero si te pillan aqu�...

�Me castigar�n sin dejarme volver al frente?

No hay nada que temer.

�Ni siquiera los precios?

Llevo encima dos a�os de sueldo.

Y tengo dos semanas para gastarlo.

�Dos semanas?
�Nada m�s?

Dos semanas es mucho.

Nuestro mejores copas,
cristal puro.

Excelente.

�Qu� pasa?

Si bebo antes de comer
me caigo debajo de la mesa.

- �Aunque sea vino?
- S�, es que bebo muy poco.

Vamos.

Brindemos por todo lo que
nos falta en la vida.

Nos vemos debajo de la mesa.

�Le gusta?

Delicioso.

En cualquier caso, me recuerda
muchas cosas olvidadas.

Como bailar.

En el vino brilla el sol
bajo el que madur�.

1937 fue un gran a�o.

Es bueno recordar nuestros mejores a�os

por los vinos y no por las guerras.

Muy cierto, se�or.

Lo siento.
P�rame.

No, es una forma de apreciar el vino.

Puedo parar
si me concentro en algo.

Mira este hermoso foie-gras, Elizabeth.

Y esta cuberter�a de plata
que ya no es de plata.

Y esta m�sica que ya no es...

Sea lo que sea,
brindo en su honor.

Y por Reuter, el gourmet,
y por G.H. von Mumm y su vino

y por ti.

Por nosotros.

Por nosotros.
Pero sobre todo por ti.

Tus ojos brillan, y cada vez que te miro
est�s m�s hermosa.

Y ahora, est�s tan guapa
como la pr�xima vez.

�Estaremos borrachos?

�Con una sola copa?

Es la alerta,
no ha habido aviso.

No se preocupen,
nuestra bodega es segura.

B�betelo todo, olvida las sirenas.

Se me pas� el hipo.

�R�pido, se�or!

Por aqu�.

Am�monos esta noche

bajo la luz tamizada

del d�bil resplandor de las estrellas

Se�ores y se�ora, disculpen
esta estridente nota final.

Disfruten la guerra,
la paz ser� terrible.

�Nuestros abrigos! �Sal!

Soy m�dico.

Todo ir� bien.

Esto le calmar�.

Te has quemado la mano.

Es holl�n del abrigo. V�monos.

�De verdad no te has hecho
nada en la mano?

�No te duele?

Te limpiar� el abrigo.

�De d�nde sale esto?

De la bodega.

�Las has cogido?

�Por qu� no?

Un soldado no debe desperdiciar una bodega.

Ahora s� por qu� ponemos unos bolsillos
tan grandes en los abrigos.

�D�nde vas?

Vienen del campo de concentraci�n.

- Puede que est� mi padre.
- Puedes ver desde aqu�.

No te metas en l�os.

No est�.

Pero lo condenaron a trabajos forzados,

porque pensaba que Alemania perder�a.

Y se lo dijo a la persona equivocada.
�se fue su gran delito.

�Me das un poco de vino?

Elizabeth,

�y si nos casamos?

Va a llover.

�Me has o�do?

No es un problema de audici�n,

sino de sentido del humor.

A veces me falta.

No bromeaba.

Tendr�as 200 marcos al mes

y una indemnizaci�n si muero.

�Por qu� regal�rsela al Estado?

�De acuerdo?

�Claro que no!

Tu entusiasmo me reconforta.

- Son 200 marcos...
- �No los quiero!

Lo entiendo.

La obligaci�n de soportarme
por 200 m�seros marcos...

- No digas eso.
- Entonces, �qu�?

Enti�ndeme.

No tienes que darme nada por...

No te lo ofrezco por eso.
Quiero que lo tengas.

No puedo aceptarlo.

No te agotes.

No me quieres, ya lo he entendido.

Te quiero tanto...

que duele.

�Buenos d�as! Por fin sabr�
d�nde ha pasado mi uniforme la velada.

�Puedo qued�rmelo para ir a una boda?

- �La de qui�n?
- La m�a.

Entonces deja esa botella.
Tengo prisa.

- �D�nde vas?
- Me marcho.

Ha encontrado a su Alma.

�Fant�stico! �D�nde?

En la calle.

As� sin m�s.
La busqu� por veinte pueblos.

�Qu� le has dicho?

No la reconoc�.

Iba por ah� y alguien me dijo:

"Hermann, �no me conoces?"

�C�mo iba a reconocer a una mujer
que pesaba sus buenos 100 kilos

y que ahora no pesa m�s de 55?

Eres de lo m�s canalla.

�El amor no se pesa en kilos!

�Tengo derecho a mi mujer
como era antes!

Pero est� viva, imb�cil.
S�lo tienes que engordarla.

�C�mo? �Con qu�?

S�lo tengo 5 d�as de permiso.

Amo a mi mujer,
pero la quiero entera.

Adi�s.

Llego tarde, lo siento.

Quer�a obtener 8 d�as de permiso,
pero me los han negado.

�Hay alg�n problema?

Esto.

En el formulario,

piden todos los detalles...

de nuestras familias.

�Nuestras familias? Entiendo.

Y como mi padre est� en un campo...

Lo comprobar�n con la Gestapo.

Si llamas la atenci�n
puede ser peligroso.

Son cosas que pasan.

Lo s�.

Quiero hacerlo.

�No tienes miedo?

No.

Pero no me preguntes
por qu� tiemblo.

Si�ntense, por favor.

Vete al pasillo y m�rame.

Si me quito la gorra,
sal corriendo y no vuelvas.

Vete al museo de arte,
el profesor Pohimann se esconde ah�.

Esp�rame all�.

�Te lo ruego!

�Nunca ha visto un ojo de cristal?

Si, pero no es
del mismo color.

- Es azul.
- No, es marr�n.

Mi ojo de verdad es azul.
El otro se me ha roto esta ma�ana

y me han prestado el marr�n.

�D�nde est� la Srta. Kruse?

Ha tenido que salir.
�Est� todo en regla?

Las preguntas las hago yo.

�Es la hija del doctor Bernard Kruse?

- S�, pero...
- Pero, �qu�?

Nada.

El doctor ya no ejerce.
Hablaba demasiado, �verdad?

Se lo aseguro.

Pero me salv� este ojo.

Est� jubilado,
al menos, oficialmente.

�Cu�ndo quieren casarse?

Lo antes posible.
Los permisos son breves.

Les caso ahora mismo.
Firme aqu�.

Sus papeles est�n en regla,

pero la Srta. Kruse tiene que firmar tambi�n.

- �Sus papeles est�n en regla?
- eso he dicho.

�Mi gorra!

Ahora vuelvo.

�Todo va bien!
Podemos casarnos en seguida.

�Nos vamos de luna de miel?
�Tenemos todo el d�a!

�Por qu� no nos vamos a casa,

y nos quedamos all�
hasta que se declare la paz?

�Srta. Kruse!

Ya se ha ba�ado,
la he o�do.

Va a gastar todo el agua caliente.

Hace 20 minutos que espero.

�Abra!

Srta. Kruse,
si no abre inmediatamente...

�Qu� ocurre aqu�?

�Me llamaba?

Buenas tardes.

Disc�lpeme.

Un paquete para Ernst Graeber.

Es para m�.

�C�mo se atreven?

�Soy una mujer honrada
y esta casa seguir� siendo honrada!

Voy a buscar a la polic�a.

M�s vale que este hombre se largue,

y usted con �l, Srta. Kruse.

Esto le va a enfadar,
pero... ll�meme Sra. Graeber.

�Me toma por imb�cil?

�Lea!

Amor, la Sra. Lieser est� encantada
con nuestro certificado de matrimonio.

Se lee la emoci�n en su rostro.

�No quer�as entrar al ba�o? �Ve!

�Qu� felicidad! Mi venganza
de todo lo que me ha hecho.

�Por eso te has casado conmigo?

- �Qu� es esto?
- Un regalo de Binding.

�C�mo lo ha sabido?

Supongo que llam� al cuartel.

Chocolate holand�s, jam�n polaco,
melocotones al co�ac.

Y champ�n.

No tengo copas.

No importa.

Cualquier vaso vale.

En Par�s beb�amos champ�n en las tarteras.

Siempre quise ir a Par�s.

Para la luna de miel, quiz�s.

Pero no ser�amos bienvenidos.

�Os odiaban en Par�s?

S�lo estuve all� al principio.

Y en Holanda,
�ser�amos bienvenidos?

No creo.

Hemos destruido Rotterdam.

Mis padres pasaron
su luna de miel en Hildesheim.

Vieron un rosal milenario
que trepa por los muros de la catedral.

Pero estar� tambi�n destruida.

No podr�amos ir a ning�n sitio
de luna de miel.

Las bombas y el odio
lo han destruido todo.

Lo s�. Lo siento.

Por nosotros, estemos donde estemos.

Por nosotros.

Lo he visto hacer en el cine.

Yo tambi�n.

Nunca supe qui�n limpiaba despu�s.

Seguro que alguien con zapatos.

D�jame a m�.

"Replegados con �xito.

"Grandes p�rdidas infligidas al enemigo. "

Es tan f�cil,
ni una palabra sobre nuestras p�rdidas.

Gracias a Dios que t� no estabas.

Hombres que eran como hermanos para m�...

Cuidado con los cristales.

Ernst, olvidemos todo lo que pasa
fuera de este cuarto.

Es nuestra noche de bodas.

Tenemos los dos el mismo anhelo.

Que el tiempo se detenga.

En ese sue�o, habr� un lugar
donde no nos odien.

No se nos preguntar�
nuestra nacionalidad.

Nuestro mutuo amor

ser� nuestro pasaporte y nuestro visado.

�Eh, soldado!

Le esperaba.

Tengo algo para usted.

Esto lo mandaron al frente
y lo reexpidieron aqu�.

No recibi� ese paquete por un pelo.

Es de mi madre.

Sin direcci�n de remite.

�Mis padres est�n vivos!

Mandaron esta carta
el d�a que los evacuaron.

Me enviar�n su direcci�n
en cuanto tengan una.

�Que no me preocupe!

Me alegro por usted.

Quito su nota.

Hay que dejar sitio.

Ha llegado una carta
para su mujer.

Me encargar� de d�rsela.

Se lo agradecer�.

Es una citaci�n de la Gestapo.
Para ma�ana a las 16.00.

�Profesor Pohimann?

�Qui�n es usted?

Ernst Graeber,
un antiguo alumno.

�Qu� quiere?

Profesor,
�puedo pedirle consejo?

Ya no me permiten
recibir a los estudiantes.

No tengo a nadie m�s
a quien acudir.

D�jeme entrar.

�Le han visto llegar?

S�lo los obreros.

Igual no son todos obreros.

Me vigilan.

Vuelva m�s tarde
sin que nadie lo vea.

D� dos golpes largos y dos cortos.

Si los obreros le preguntan
d�gales que no quise verle.

�Soldado! El refugio est� all�.
S�guenos.

�En pleno d�a?

Quieren acertar sobre las f�bricas.

�Inconsciente! �Al refugio!

- �Es la f�brica de uniformes?
- Era. �Qu� hace aqu�?

Mi mujer trabaja aqu�
�Est�n en el refugio?

Ha habido un corte de luz
antes de la alerta,

muchas obreras volvieron a casa.

�Y el taller de abrigos?

�C�mo quiere que lo sepa?

Vuelva a su casa,

y lo sabr�.

�Ha visto a mi mujer?

- �Est� en el refugio?
- Ya no hay refugio. Se ha inundado.

Gracias a Dios que est�s aqu�.
Te buscaba en la f�brica.

He salvado lo que he podido.

Esta noche dormiremos en la calle.

Pero no en �sta,
en cualquiera menos �sta.

Vamos al museo de arte,
es una ruina elegante

y ver� al profesor Pohimann.

Pohimann no est� all�.

Esperemos que le gusten
sus nuevos vecinos.

Cuando ten�a siete a�os,

quer�a ser gitana
para vivir as�.

Una noche tranquila, una cama
y una mujer como t�,

eso es lo que so��bamos en el frente.

�Has recibido una carta?

�Y qu� carta!
Con todo esto, no te lo he contado.

Es de mis padres,
han sido evacuados.

- Todav�a no s� d�nde.
- �Est�n vivos!

�C�mo se te ha podido olvidar dec�rmelo?

�Hay alguien?

Es Pohimann.

Soy yo, profesor,
Ernst Graeber.

- Nos han bombardeado...
- �Qui�n est� con usted?

Mi mujer.
Nos acabamos de casar.

Ya veo.

Est� bien, Josef.

Ernst, Josef.

Los nombres bastan.

No pod�is quedaros aqu�.

Si os encuentran
estar�is en peligro.

Por mi culpa. Soy jud�o.

Hoy no deber�a pasar nada.

Despu�s de un ataque reina la confusi�n.
Pero nunca se sabe.

Tengo que hablar con usted.

Entre un momento.

�Por qu� quiere la Gestapo
ver a su mujer?

Su padre est� en un campo.

Quieren informaci�n.

�Qu� har�a usted, Josef?

Esconderse es la �nica garant�a
de supervivencia.

Siempre hay que evitar
las visitas a la Gestapo.

Josef es un especialista.

�Y si yo fuera en su lugar?

Quieren hablar con su mujer.

�Pero hablar�n con Oscar Binding!

Me ofreci� su ayuda
y tiene contactos en la Gestapo.

Presum�a de ellos.

A m� me los demostr�.

S�lo tengo 10 d�as.
Si me voy, ella se quedar� sola.

Ir� a ver a Binding ma�ana por la ma�ana.

Gracias por haberme recibido.

Ha dicho: "Si me voy".
�Piensa quedarse?

Quiero saber qu� le espera
a mi mujer.

Si deserta, ser� la muerte.

Solo podr�a escaparse,
pero con ella no.

Quienes le escondan
se arriesgan a ser fusilados.

�Todav�a viven sus padres, Ernst?

S�, pero no s� d�nde est�n.

La Gestapo lo sabr�,
y lo utilizar� contra usted.

Debo partir entonces
y hacer como si nada.

No creo en nada.

�Profesor, se puede creer en algo?

S� se puede.

- �En qu�?
- En Dios.

- �Todav�a cree en �l?
- M�s que nunca.

�Nunca ha dudado?

S�, claro.

Sin la duda,
no necesitar�amos la fe.

�C�mo se puede creer en Dios
con todo lo que pasa?

Dios no es responsable
ante nosotros,

somos nosotros quienes
lo somos ante �l.

De ser cierto, �hasta qu� punto
soy responsable?

�A partir de qu� momento la obediencia
conlleva la responsabilidad?

�En qu� momento el deber de obedecer
se transforma en un crimen?

�Debo decidir, debo saber!

Nadie puede decidir por usted
ni siquiera su profesor.

Cada uno debe decidir por s� mismo.

De entrada hay que afrontar la verdad,

por cruel que sea.

La guerra est� perdida.

Necesitamos que se pierda

para que nuestro pa�s
reencuentre su alma.

No le pongo las cosas f�ciles.

No, m�s dif�ciles.

Sonr�e.

�Por qu� no a�lla?

A�llo.

Pero no oye.

Estamos despiertos.

Puede ir a lavarse.
Y Pohimann ha conseguido hacer caf�.

Me gustar�a dejarla
dormir un poco m�s.

�Ella sabe, que es para la Gestapo?

Es lo que pensaba.

Si la cree en peligro
y quiere esconderla...

Venga a verme a Sainte-Catherine.
Tendr� una direcci�n.

Me encontrar�
en la cochera de la torre Norte.

Deje sus cosas en la iglesia
antes de salir.

All� citar� a su mujer
sin inquietarla.

Sea prudente,

sobre todo al hablar con Binding.

�Entre!

"�Entre!" dijo la ara�a a la mosca.

�Ernst! Vaya unas horas
para una visita.

O� tocar, y...

No ha parado en toda la noche.
Te has perdido algo.

Pero estoy contento de verte.

Tomemos un vaso.

�Toca bien, no?

Yo no entiendo nada, pero a Heini
lo consideran un maestro.

Toc� en Berchtesgaden,

�Y tan bien que hizo
llorar al F�hrer!

�No cojas mi biber�n!

No se le coge su biber�n a un beb�.

Te presento a mi amigo Ernst.
Est� de permiso,

del frente ruso.

Pas� buenos momentos en Rusia.

Su vodka es cien veces
m�s eficaz que la gasolina.

Se les echaba gaznate abajo
y se prend�a fuego.

�Hab�a que verlos escupir fuego!

Era el patizambo.

Atenci�n.

Es una receta m�a.

Le llaman el milhojas.

Los prisioneros extienden
una plancha de madera

sobre la que se acuestan.

Despu�s, cada uno tiene
derecho a una bala.

Y pasamos a la capa siguiente.

Un prisionero, una plancha de madera,
y seguimos as�.

Regar generosamente de gasolina...

y...

Di, "bichou".

Afina tu piano.

Esta nota es falsa.

Est� loco.

�l manda aqu�, en el campo.

Lo que hace no me divierte.

T� me conoces,

soy un tierno.

Pero �l puede hacerlo.

No pienso en ello.

No soy responsable de los dem�s.

�Nadie es responsable!

Es lo que dicen en el frente
cuando fusilan a los rehenes.

Tu vodka, Ernst.

�Has matado a civiles?

S�, he matado.

�Bebe!

Eres de los nuestros.

Hay que creer.

Voy retrasado, pich�n.
El deber me llama.

- �Pido un coche?
- Voy andando.

Ernt puede llevarte de vuelta.

Voy andando.
�No me crees capaz?

"No est� de muy buen humor".

Va a ser el infierno, en el campo.

�Otro... mil hojas?

�Qu� importa el modo de morir?

El resultado es la muerte.
T� tambi�n has matado.

Puede que no a los buenos.

Ernst, estoy bastante borracho.

No pillo lo que dices.

As� que no digas nada m�s.

Tienes raz�n.

Es m�s seguro.

�D�nde vas?

Siempre huyes.

Adi�s, Oscar.

�A qui�n debo dirigirme?

Esto es para Elizabeth Kruse.

Soy su marido. Lleg� cuando
ella estaba trabajando

Despacho 72, en el subsuelo.

�Su mujer es la hija
de Bernard Kruse?

Firme aqu�.

Y escriba:

"Marido de Elizabeth Kruse",
con fecha y lugar del enlace.

El paquete Kruse.

�Qu� es lo que firmo?

El recib� de las cenizas
de Bernard Kruse.

Causa de la muerte:
enfermedad cardiaca.

S�.

�Qu� m�s?

Debe haber la m�xima discreci�n.

Nada de esquelas en los peri�dicos.

�Entendido?

Para eso era.
Las cenizas de su padre.

- No encontr� a Pohimann.
- Ha sido detenido.

Al o�rlos venir,

corri� por la calle
para llamar su atenci�n,

para que yo pudiese huir.

�Una caja de puros
como f�retro!

Es mejor que las habituales conservas.

�Lo conoc�a?

Era nuestro m�dico de familia.

Un buen hombre.

Reducido a esto.

�Qu� podemos hacer?
Ella vendr� pronto.

El cementerio est� a dos pasos.

Por lo menos es un suelo consagrado.

�Qu� le pasar� a Pohimann?

- �Y a usted?
- Si no me cogen, sobrevivir�.

Cu�nto debe odiarnos.

El odio hace olvidar la prudencia.

Y adem�s, me acuerdo

de la Alemania en que crec�
y que he amado.

�Y Pohimann, deber�a odiarlo?

Y al pastor Brenner,
que me esconde aqu�,

�debo odiarlo?

- �Cu�ntos son como ellos?
- No lo suficientes, pero son muchos.

No todo est� perdido.

�Todav�a ve usted motivos
para la esperanza?

Desde luego. Vivo,
�No es suficiente prueba?

Ahora v�yase.

Mejor entierre esto antes
de que llegue su mujer.

Buena suerte, Ernst.

Buena suerte, Josef.

�Quieren que su hijo sea bautizado
en la fe de la Iglesia?

Christina Renata,
yo te bautizo en el nombre del Padre,

del Hijo

y del Esp�ritu Santo.
Amen.

Que el Se�or te bendiga
y vele por ti.

Ernst, tengo buenas noticias.

�Se cierra la f�brica
tres d�as m�nimo!

�Magn�fico!

Estamos totalmente libres.
Es un milagro, �verdad?

S�, si supi�ramos d�nde dormir.

Aqu� s�lo se quedan
las familias con hijos.

Te he dicho el primer milagro.

El segundo,
hay que verlo para creerlo.

�Qu� quieres decir?

No perdamos el tiempo.
�V�monos r�pido!

Est� casi intacta.

Tiene incluso ventanas.
Es un espejismo.

No, es real.
Ver�s.

�Sra. Witte!

- Aqu� est� mi marido.
- Buenas tardes, Sr. Graeber.

Lo hab�a descrito bien:
guapo, con unos ojos...

�Llegamos a tiempo?

Siempre,
para una sopa de lentejas.

Pero venga primero a instalarse.

�C�mo has encontrado esto?

De casualidad, gracias
a una calle bloqueada.

Tengo cerrada la pensi�n
desde hace dos a�os,

�pero c�mo decirle que no
a su mujer?

�No es verdad?

He decidido entonces que mi carnicero
no me dir�a que no.

La sopa est� enriquecida
con salchicha.

Es la habitaci�n de mi hija.
Se llamaba Ilse.

Tras el segundo bombardeo,
no volvi�.

No la he ense�ado nunca.
No quer�a a nadie m�s aqu�.

Pero si es para usted, est� bien.

Permita que su mujer se quede.

Estoy tan sola.

Cuando quieran cenar,

av�senme cinco minutos antes,
para que ponga la mesa.

Quiero que nuestra casa
sea exactamente como �sta.

Con la misma vajilla, todo...

�Te imaginas, Ernst?

Las dos familias
reunidas el domingo,

los ni�os trepando por todas partes,

todo el mundo
hablando a la vez.

No sab�a que quisieras tanto
tener hijos.

Quiero tener tus hijos.

Con los tiempos que corren,
�no te aterra?

M�s me aterrar�a el no tenerlos.

Mi padre trajo cientos
de ni�os al mundo.

Ver�s,
cuando tenga los nuestros.

�Los va a echar a perder!

�Qu� pasa?

Nada.

�Qu� me ocultas?
Hay algo.

�Te vas de nuevo?

No. Te lo hubiera dicho.

�Entonces qu�?
�Es algo que he hecho?

�O que no he hecho?

�Mi padre?

�Ha muerto?

Muerto.

Todav�a me quedaban unas botellas,

y he pensado...

�Debo servir ya la cena?

S�, Sra. Witte, por favor.

Ha perdido el �nimo.

Anulan todos los permisos.

�Y usted, no s�lo tiene uno,
si no que quiere prolongarlo!

- Mi mujer...
- �Ha tenido gemelos, una neumon�a o qu�?

Acabamos de casarnos,
hemos tenido poco tiempo.

Le pido aunque sea
un solo d�a m�s.

Su tren sale ma�ana
por la ma�ana a las 6.

Tiene que cogerlo.

Pres�ntese aqu� a las 5.

El propio Reuter
apreciar�a los vinos de la Sra. Witte.

Berndtcassler 1935...

Este vino casar�a perfecto con langosta,

si tuvi�ramos langosta.

No lo abra, no vale para nada.

�ste, s�.

No lloro de verdad.

No te preocupes.

No es tristeza,

soy feliz.

�Me han pasado tantas cosas
en tan poco tiempo!

Intento parar,

pero no lo consigo.

Se paciente conmigo esta tarde.

Hubiera querido llevarte
fuera de la ciudad,

a cualquier pueblo.

Incluso sin mi trabajo,
me quedar�a aqu�.

Yo quiero estar
donde hemos estado juntos.

�Quieres dormir?

Ya dormir� en el tren.

Y despu�s, �tendr�s una cama?

Como mucho un catre o paja.

No es tan grave,
se acostumbra uno r�pido.

Y el verano se acerca.
Es en invierno cuando...

Cuando la consiga, te enviar�
la direcci�n de mis padres.

Ve a verlos si est�n cerca de aqu�.

Te adorar�n.

Dales un abrazo de mi parte.

�Todo el mundo al refugio!
�Apaguen las luces!

El refugio est� justo al final de la calle.

Pase lo que pase,

no pasar� esta �ltima noche
en una cueva.

�Podemos quedarnos?

Lo entiendo.
El responsable de barrio no se enterar�.

�Y si las bombas destruyeran
la estaci�n y los trenes?

Tendr�amos que ir a pie.

No vengas ma�ana a la estaci�n.

La �ltima vez, vino mi madre.

Vi una mujer fuera de s�,
que sollozaba y chocheaba...

No era mi madre.

No se debe sufrir as�.

�Est� libre esa plaza?

Maxl,

di adi�s a tu pap�.

Est� cansado.

Vamos, Elsa.

Puede esperar.

No hubieras debido venir.

�4� Compa��a?

�Graeber!

�Por aqu�!

Immerman.

�Aqu� est� nuestro hombre de permiso!

Idiota, �por qu� has vuelto?

Al ritmo que vamos,
te hubi�ramos pillado.

�Qui�n te trae?

C�mo nos has encontrado?

El mapa de un ingeniero.
Hace 15 d�as que os buscaba.

Calma.

Deja tu fusil. No haya nada a que
echarle el ojo desde hace d�as.

Nos aplastan.
Cuando est�n cortos, descansamos.

Hasta que reciben nuevos obuses.

Hagan salir a esos hombres.

�Qui�n es?

�Qu� hace?

Ignoro c�mo es que est�s aqu�,
pero estoy contento.

�C�mo estaban las cosas, en casa?

Ya s�.

Vamos, salimos.

Tranquilo, muchacho.

Nos buscan,
pero no nos han visto todav�a.

Creo que me estoy acatarrando.

No te preocupes, paga el seguro.

Mi mujer es tan bruta
que no sabr�a cobrarlo.

�Mira!

- �Cerveza!
- All� voy.

No, voy yo.

�Deb�a ser una cervecer�a!

�Adelante!

Vamos, nos movemos!

Secci�n...

Rompan filas.

�Correo!

Amrick,

muerto.

Bender, muerto.

Muerto.

Immerman.

�Es de mi mujer!

�Avancen!

�Alcen los pies!

Se escond�an.
Seguramente son insurrectos.

- �Estaban armados?
- No.

�C�mo est� tan seguro entonces?

Los retenemos hasta
poderlos interrogar.

�Pero, d�nde?

La granja tiene un cerrojo exterior.

Llevadlos all� y...

Le conf�o estos prisioneros.
Vig�lelos.

Cond�zcalo.

Nada para usted, mi capit�n.

Nadie puede escribirme.

Si hubieras venido ayer,
estar�as menos cargado a la vuelta.

Descansa un poco.

No me vendr� mal.

Te escribo desde la ribera,
cerca del �rbol bombardeado.

Revive como
si nunca hubiera sufrido.

T� quer�as que hici�semos como �l.
Es lo que hacemos.

Espero un beb�.

Y eso me hace olvidar todo lo dem�s.
Salvo a ti.

La Sra. Witte dice que el nombre
del beb� no tiene importancia,

siempre que sea una ni�a.

Escribo a tus padres,
tienen derecho de voto.

Me has enviado
a tiempo su direcci�n...

�Graeber! Vuelve a la secci�n,
partimos.

�Qu� haces?

No los vamos a llevar con nosotros.
Voy a acabar con ellos.

Yo soy su responsable.

Bien. Entonces, hazlo t�.

- Para ti el honor.
- Esto no es un honor.

�Pero es una orden!

No para m�.

�Sabes con qui�n est�s hablando?

Lo s� perfectamente.

�Salgan!

Son libres.

�Vamos, v�yanse!

�Eh, alem�n!